Escribo para lectores más inteligentes que yo: Enrique Vila-Matas

CIUDAD DE MÉXICO (05/MAY/2010).- Enrique Vila-Matas (Barcelona, 1948) afirmó hoy aquí que después de muchas tentativas de escribir para un público concreto, "ahora lo hago para lectores más inteligentes que yo", y esa es una manera de crear nuevos públicos para sus novelas, como la más reciente y que ahora promueve, 'Dublinesca'.  

Durante una entrevista con motivo de la aparición en México de su más reciente novela, Vila-Matas dejó ver su convencimiento de que con esa manera de trabajar se acerca a un público mayor. "Soy un autor bastante conocido, por eso este nuevo libro debía acceder a todo tipo de lectores", aseveró.  

Otra de sus fórmulas, confió, es iniciar dos libros, en tinieblas, a la vez. "Poco a poco voy escribiendo y cada cual toma su camino". En este caso, dijo que 'Dublinesca' aborda el tema del tránsito de la imprenta a la era digital, desde la perspectiva de "Samuel Riba", un editor literario confundido.  

El personaje de la novela se considera el último editor literario y se siente hundido desde que se retiró. Un día tiene un sueño premonitorio, que le indica claramente que el sentido de su vida para por Dublín. Por eso, convence a algunos de sus amigos para ir al Bloomsday y recorrer el corazón del "Ulises".  

A título personal, como el Enrique Vila-Matas que es, el autor aseguró que piensa que la humanidad en su conjunto vive actualmente "un periodo de incertidumbre, al que debemos dar el tiempo suficiente para ver qué sucede sobre esa transición; por ahora ignoro, como todo el mundo, qué va a pasar".  

Sin embargo, "Samuel Riba" oculta a sus compañeros dos cuestiones que le obsesionan: Saber si existe el escritor genial que no supo descubrir en su época de editor, y celebrar un extraño funeral para la imprenta, agonizante ya por el evidente apoderamiento del mundo por parte de la temporada digital.  

"Eso es lo que cree el personaje y por eso desea hacer los funerales de la imprenta", abundó el escritor, quien al momento de escribir esa parte aterrizó en su ya conocido sorprendente humor.  

Al respecto, recordó que "quería contar el funeral de la imprenta, sin perder de vista que no hay tragedia sin humor".  

Vila-Matas advirtió que en el transcurso de su nueva novela ("que tiene mucha suerte y una excelente acogida desde su aparición en España, donde actualmente lleva siete semanas en los primeros lugares de ventas", aunque eso no preocupa ni ocupa al autor), se parodia al Apocalipsis.  

"Se parodia un poco la idea del Apocalipsis, un tema recurrente, que siempre ha estado presente en la literatura, en la historia del hombre y ligado a la era moderna". Vila-Matas regresa con esta novela a lo apocalíptico, al tiempo que reflexiona sobre el fin de una larga época de la literatura, la de la imprenta.  

El entrevistado estimó que 'Dublinesca', una novela abierta a las más diversas lecturas, es una especie de regalo poblado de sorpresas, "una suerte de recopilación de los diversos temas que he abordado en el transcurso de mis anteriores trabajos", y dejó ver que en este país ya ha sido bien reconocida y celebrada.  

En otro orden de ideas, tras subrayar que desde su primera visita a México, en 1991, guarda para sus lectores y escritores un gran aprecio, "porque es un país donde mejor han sido recibidas mis novelas", destacó su entrañable admiración, respeto y amistad por el escrito poblano Sergio Pitol y el capitalino Juan Villoro.  

Finalmente, el ganador de galardones ilustres como el Rómulo Gallegos (2001), Herralde (2002), Prix Aguirre-Libralire (2003), Prix Médicis-Etrange (2003) y Premio Nacional de la Crítica Española (2003), informó "que tras cinco días entrañables en México, estoy por partir hacia Buenos Aires".