Cultura | Fernando Barrera Torerías Los monosabios, héroes anónimos Por: EL INFORMADOR 22 de agosto de 2009 - 02:32 hs Dice el refrán que los últimos serán los primeros. Y se cumple. En el paseíllo, los monosabios son los últimos en formar el desfile multicolor, pero los primeros que están dispuestos a arriesgar su integridad física por los actuantes en el festejo. La palabra monosabio procede de un espectáculo circense que tuvo lugar en Madrid (España) hacia 1847 y en el que una cuadrilla de monos amaestrados realizaba una serie de habilidades con el nombre artístico de los “monos sabios”. Estos simios vestían unos blusones de color encarnado y al público madrileño le dio por compararlos con los uniformes que vestían los mozos de caballos, llamados hasta entonces con el nombre genérico de chulos. El nombre tuvo fortuna y los “monos sabios” acabaron lexicalizándose en una sola palabra, incorporada desde entonces a la terminología taurina y admitida posteriormente en la Real Academia Española (RAE). A comparación de plazas españolas, incluyendo Madrid y Sevilla, además de muchas mexicanas, el Servicio de Plaza del Nuevo Progreso se ha distinguido por tener preparación de primeros auxilios, inmovilización y traslado de heridos, lo cual ha ayudado, sin duda, a que los toreros caídos no lleguen a tener daños posteriores por un inadecuado viaje a la enfermería. Aquí, en comparación a un sinfín de plazas, no se ven espectáculos dantescos en los que el torero, además de ser apaleado por el toro, es izado como guiñapo por quienes saltan a auxiliarle. En la red se pueden encontrar varios videos donde los que acuden a la ayuda no son monosabios y levantan a los heridos sin cuidado alguno. En cambio, la preparación que tienen los monosabios es profesional, organizada y efectiva. Por ejemplo, cuando saltan a la arena saben perfectamente qué hacer, ya sea detener una hemorragia, inmovilizar el cuello, además de tener una camilla dura en el callejón para evitar lesiones sobre todo en la columna vertebral. Esto no es casualidad, pues los monosabios que laboran en el Nuevo Progreso tienen un verdadero amor por la fiesta y en su versión más modesta hacen todo con efectividad. Y no solo en el manejo de heridos, también en labores como entorilar, faena que requiere amplios conocimientos del manejo de ganado bravo y que repercute en que los astados no se lastimen antes de salir al ruedo. Cuando inicie la temporada y acuda a la plaza, vea con atención el trabajo que realizan. No es fácil, incluso pasa desapercibido por muchos, pero sin ellos, ¿quién lo haría? fotografiataurina@yahoo.es Temas Toreros Lee También Diego San Román se consagra en la tradicional “Corrida de las Luces” Sociales: Toros y faenas, un domingo para disfrutar de la fiesta brava Sociales: Temporada Grande, corridas en la Plaza de Toros Nuevo Progreso Los tapatíos cortan una oreja por coleta ante un encierro irregular Recibe las últimas noticias en tu e-mail Todo lo que necesitas saber para comenzar tu día Registrarse implica aceptar los Términos y Condiciones