El Texmex Grand Prix

GUADALAJARA, JALISCO (16/NOV/2012).- Amigos, resulta por demás interesante destacar que se avecina un Gran Premio que podrá ser histórico en varios aspectos. Primeramente, la lucha por el campeonato de la Fórmula Uno entre Sebastian Vettel y Fernando Alonso. En segundo término, la importancia de ser la carrera inaugural del Circuito de las Américas. Y por último, la gran expectativa que existe de ver en acción a nuestro piloto, Checo Pérez, frente a numeroso publico mexicano que atenderá esta maravilloso competencia.

Con respecto al duelo Vettel-Alonso, tendremos que suponer una lucha entre los pilotos, ingenieros y estrategas de cada equipo.

Los primeros están obligados a evitar meterse en problemas y manejar sin errores. Los segundos, en jornadas “matadoras” tratar de encontrar alguna mejora en los monoplazas y, los estrategas, buscando el mejor balance y desempeño de neumáticos para una pista desconocida.

No olvidemos también un factor importantísimo: El resto de los competidores. ¿Alguien duda de que Lewis Hamilton, Kimi Raikkonen o Jenson Button no buscaran el triunfo? Este factor pudiera enrarecer la contienda y hacerla más “cardiaca”.

El Circuito de las Américas es el retorno en toda forma de la máxima categoría a territorio norteamericano. La historia nos remonta a que las pruebas de más prestigio con participación internacional se llevaron a cabo en Riverside y Sebring, y posteriormente en el Watkins Glenn. Tuve la suerte de correr en estos tres trazados y entender el porqué no fueron más utilizados (seguridad y obsolescencia). Posteriormente, el “American way of life” provocó una serie de esfuerzos fallidos en circuitos callejeros terribles, casi innombrables: Las Vegas, Phoenix, Detroit, Dallas, y quizá el más decente de todos, Long Beach. Y de ahí al templo mayor de Indianápolis, al que por cierto nunca me pareció el escenario adecuado para la F1, por aquello de las “odiosas comparaciones”.

El Circuito de las Américas promete mucho, ya que su diseñador, el arquitecto Hermann Tilke, es quien más experiencia tiene en estos menesteres. La combinación de curvas rápidas y rectas generosas, harán lucir en su esplendor a estos bólidos.

Por último, es obligado referirnos a lo que esperamos de Sergio Pérez para este Gran Premio. Teniendo en cuenta de que no hay referencia previa sobre el circuito, a Checo se le “acumulará la chamba” en lograr poner a punto su auto, de lo cual estoy seguro saldrá airoso, y no creo que teniendo a tanto paisano a la vista sienta alguna presión. Se que su máxima ilusión sería obtener un podio y para lograrlo tendrá que hacerlo cerebralmente, según se dice, la pista parece ser favorable al C31, así que todo está dispuesto para un Texmex Grand Prix con grandes emociones y satisfacciones y con una necesaria recomendación: si ven a la migra cerca “no corran, ques pior”.