Omar anduvo muy bravo

GUADALAJARA, JALISCO (05/NOV/2013).- Salió con tantas ganas de ser el primer jugador en ser campeón con Atlas y Chivas en torneos oficiales, que las revoluciones las traía a tope y como comenzó el partido, lo terminó, mal y de ser un sol en algunos minutos, acabó siendo oscuridad para el Atlas.

Y es que Bravo se fue expulsado en tiempo de compensación del primer tiempo, luego de haber arrancado con mucho ímpetu, carácter, determinación y sería este último aspecto, el que lo marginó de la segunda parte.

Rodrigo Godínez fue su marcador la mayor parte del partido, de hecho apenas al minuto de juego reclamó una falta dentro del área, la cual no marcó el central Fernando Guerrero y ahí lanzó un corte de manga.

Por ganas no paró, apoyo, sacrificio, ya que al 5' recuperó un balón en terreno propio y por poco sorprende al arquero Federico Vilar, quien tuvo que regresar rápido para quedarse con un balón que estuvo a nada de techarlo.

La desesperación de no tener balones sacó de concentración al atacante, quien al 16' cayó en fuera de lugar, luego al 18', sacó media tijera que más bien fue un despeje tipo "viva Villa", porque el esférico salió a una banda.

Al 27', Bravo ya andaba encendido con los ánimos calientes, estuvo forcejeando con los rivales, reclamando las jugadas en contra, mientras el Morelia era dueño del cotejo. El primer error por andar de bravo estaba cerca.

Con balón controlado, se quitó a Godínez, recibió falta que no le marcaron, le mentó la madre al central; en la jugada siguiente, Ponce fue amonestado por una falta menor a la que había recibido Bravo, quien fue a reclamar de manera airada y se llevó amarilla. Error consumado, corrió 40 metros para ir a reclamar algo que ya estaba sancionado.

Al 31', sacó una de peligro de su área y seis minutos después, fue el sol que necesitaba el equipo. Sacó tiro a bocajarro que paró Vilar, en el contrarremate de Vuoso,  Morales metió la mano que se sancionó con penal y que Bravo hizo efectivo para acortar distancias 2-1.

El segundo error de un Omar que anduvo con emoción encendidas, bravo pues, llegó al 44', cuando en una jugada en las afueras del área Monarca, fue a cometerle falta a Enrique Pérez, el central lo vio y al ser con fuerza desmedida, se ganó la segunda amarilla y por ende, la tarjeta roja.

Bravo sin voltear a ver al nazareno, se paró rápido, corrió hacia la banca donde estaban sus compañeros, pues sabía que estaba expulsado. Omar se equivocó en contra de su equipo, pese a toda su experiencia, se notó con un Bravo novato, como en sus inicios.

AGENCIA INFORMADOR / ALEJANDRO RAMÍREZ.