La consecuencia de estos sismos al interior del Guadalajara son muy obvias. De estar en un cómodo noveno sitio en la tabla de los cocientes en 2010, un lustro después el Rebaño alterna con Dorados y Morelia las últimas posiciones de la tabla que define al equipo que desciende al Ascenso MX.InexplicableLuego de la crisis de 2009, donde Chivas vio desfilar técnicos como Paco Ramírez o Raúl Arias, la estabilidad llegó al año siguiente con alguien de casa, José Luis Real, que le devolvió protagonismo al Guadalajara.En el Bicentenario 2010 el Rebaño logró la marca de ocho victorias consecutivas en un arranque de torneo, pero sus sueños de campeonato se los comió la Selección Nacional, que le quitó seis jugadores para la Copa del Mundo de 2010, incluido su goleador Javier Hernández, que ya no volvió.Todavía el Rebaño alcanzó a ser finalista de la Copa Libertadores, que terminó perdiendo en Porto Alegre.El “Güero” Real se mantuvo en el timón de las Chivas tres torneos completos y de manera abrupta fue despedido en el Apertura 2011 cuando estaba en quinto lugar general y estaba a dos puntos del líder. Su lugar lo tomó Fernando Quirarte, quien consiguió el superliderato ese torneo, pero cayó en Cuartos de Final ante Querétaro.A partir de ahí, lenta, pero de manera constante, el porcentaje de las Chivas empezó a caer. Desfilaron en el banquillo Ignacio Ambriz, John Van’t Schip, Benjamín Galindo, regresó el “Güero” Real, Ricardo La Volpe, Carlos Bustos y el último técnico que los hizo campeones, José Manuel de la Torre.Pero el porcentaje sólo cayó y cayó.Se van todosA la par del desfile de técnicos hay otro más significativo, el de los directivos.Harto de las críticas, Jorge Vergara se ha empeñado en asegurar que los presidentes deportivos que él designa tienen manga ancha para tomar decisiones, pero lo cierto es que nadie dura en su cargo.A José Luis Real lo puso Rafael Lebrija, quien al poco tiempo salió mal con Vergara. Llegó Rafael Ortega, quien tuvo tiempo pero nunca presupuesto para reforzar al equipo y dejó el cargo, aunque permanece en la institución como jefe de servicios médicos.Vergara entonces se casó con un proyecto de Johan Cruyff, pero a pesar de obtener los mejores resultados en dos años, la relación terminó en seis meses.Vinieron entonces designaciones sorpresivas como la de los inexperto Marcelo Leaño y Dennis Te Kloese, hasta una especie de triunvirato formado por Paco Palencia, Juan Manuel Herrero y Rafael Puente, todos, y en ese orden, designados presidentes en su momento desbancando al anterior.Otra vez Jorge dio un golpe de timón y presentó a los De la Torre, “Chepo” y Néstor. El arrepentimiento por echarlos tiempo atrás duró apenas diez meses. Con el equipo en llamas Vergara Madrigal cortó, como ha sido una costumbre, con técnico y directivo.La palabra proyecto, en Chivas, es insostenible. DESFILE DE PRESIDENTES