Hollywood, la máquina de sueños

HOLLYWOOD, ESTADOS UNIDOS.-Como si se tratara del androide de Terminator, Hollywood sobrevivió literalmente a todo durante la década que termina. Crisis económicas, guerras, ataques terroristas, muertes de sus estrellas e incluso una prolongada huelga. De todo esto logró salir avante la industria que recalcó su lugar como “generadora de sueños”.

El mejor ejemplo de lo “liberador” que puede resultar la llamada Meca del Cine lo ofrecen las películas de series como El Señor de los anillos y Harry Potter, las cuales comenzaron a producirse a finales de la década pasada, pero llegaron al público meses después de los atentados del 11 de septiembre del 2001 contra las Torres Gemelas de Nueva York. El respiro que ofrecían duraba apenas unas horas, ¿pero quién no cerró los ojos y soñó con viajar a los confines de la Tierra Media o la escuela de Hogwarts y olvidar el estado de nuestro mundo aunque sea por ese breve periodo de tiempo?

Las sagas de fantasía, ciencia ficción y súper héroes han existido desde los comienzos del Séptimo Arte, con cintas como Batman, Superman y Flash Gordon, y clásicos como El mago de Oz. Pero en ese entonces, el escapismo durante la llamada “Depresión” y la brutal Segunda Guerra Mundial vino mayormente en forma de comedias ligeras o brillantes romances musicales, en películas como Cumbres borrascosas, Casablanca y Lo que el viento se llevó.

La década que termina solidificó al niño como público clave de Hollywood, con las últimas entregas de La guerra de las galaxias, del legendario George Lucas, quien al lado de libros de cómics (Batman, el Hombre Araña, los X-Men), juguetes convertidos en protagonistas fílmicos (Transformers) y el regreso de viejos conocidos (Indiana Jones, Star Trek) que produjeron una sucesión de estrenos colosales.

Rostros renovados

Además de las películas, hubo actores que también se reinventaron e incluso alcanzaron nuevos niveles de popularidad. Johnny Depp pasó de ser el tipo que hacía cintas artísticas y extravagantes de bajo presupuesto a uno de los astros más rentables de Hollywood con la serie de Disney Piratas del Caribe.

Un caso más increíble fue el de Robert Downey Jr., quien emergió del estatus de actor problema que abusaba de sustancias y se convirtió en un improbable
súper héroe de 40 y tantos años en la taquillera Iron Man. Fue nominado al Oscar por la comedia Una película de guerra y cerró la década como el más grande detective del mundo: Sherlock Holmes.

Con una postulación al Oscar por El luchador, el villano de Iron Man 2, Mickey Rourke, también está en la cúspide de una segunda carrera tras haber desaprovechado sus primeros años de éxito con actitudes rebeldes que lo dejaron sin trabajo en Hollywood.


• Salvados por la magia. Harry Potter (encarnado por Daniel Radcliffe) es uno de los pilares que por casi una década ha mantenido a Hollywood a flote.

• El poder de la fantasía se hizo presente con la trilogía de El señor de los anillos, cinta que presentó a Viggo Mortensen como el rey Aragorn.

• La aventura fue traída nuevamente por cortesía de Disney, con Los piratas del Caribe, que significó el renacimiento laboral de Jhonny Depp encarnando al cínico pirata Jack Sparrow.

Seis momentos claves

1.- La diversidad que llegó a los premios Oscar. Seis actores afroamericanos, entre ellos incluidos Denzel Washington, Halle Berry y Jamie Foxx, recibieron premios de la Academia.

2.- La bomba latina. Los hispanos hicieron sentir su voz en el cine: la española Penélope Cruz ganó un Oscar por Vicky Cristina Barcelona, su compatriota Javier Bardem otro por No es país para viejos y el puertorriqueño Benicio Del Toro se llevó uno por Traffic. También brilló el tapatío Guillermo del Toro con El laberinto del Fauno y Hellboy.

3.- El cine asiático rompe barreras. De la mano de Ang Lee ese continente ganó el premio al Mejor director por el romance entre vaqueros en Secreto en la montaña.

4.- La polémica por Secreto en la montaña. Todos creían que debía ganar, pero perdió la estatuilla a la Mejor película ante el drama Crash en una de las mayores decepciones en la historia del Oscar.

5.- La redención. Tras la escandalosa derrota de Secreto en la montaña llegó la revancha. Los dramas gay consiguieron una victoria con la película Harvey Milk, que le dio a Sean Penn su segundo premio al Mejor actor.

6.- La leyenda de Heath Ledger. El actor ya había demostrado talento, al ser postulado al Oscar por Secreto en la montaña. Pero eso fue nada comparada a la conmoción durante la ceremonia de los Oscar, cuando sus padres y hermana aceptaron su premio al Mejor actor de reparto por El caballero de la noche. Fue apenas la segunda vez que un actor ganaba un Oscar póstumamente.