Los desafíos de Mariano Rajoy

MADRID, ESPAÑA (28/NOV/2011).- El 20 de noviembre, mismo día en que se cumplían 36 años de la muerte del dictador Francisco Franco, el conservador Partido Popular (PP) vencía en las elecciones generales celebradas en España con una amplia mayoría absoluta (186 escaños frente a los 110 del Partido Socialista Obrero Español).

Como reconocieron muchos ciudadanos en los sondeos previos, aunque el líder del partido, Mariano Rajoy, no les convencía, lo consideraban más capacitado que su rival, el socialista Alfredo Pérez Rubalcaba, para enfrentar la grave crisis económica que vive el país, su principal preocupación.

Muchos de ellos, además, culpaban al actual presidente del Gobierno en funciones, el socialista José Luis Rodríguez Zapatero, de no haber sabido gestionar una situación que ha llevado a España a tener casi cinco millones de personas sin empleo —la tasa más alta de toda la Unión Europea (UE) con 21%—, una economía estancada y al borde de la recesión y un déficit del Producto Interno Bruto (PIB) que deberá bajar a 6% este año, a 4.4% el año que viene y a 3% en 2013 si quiere cumplir con los compromisos pactados con la Unión Europea (UE).

Por todo ello, el reto principal de Rajoy en los próximos cuatro años será enfrentar la crisis. Como explica el profesor de IE Business School, el economista Rafael Pampillón, Rajoy “hereda una situación caótica, desempleo, con casi cinco millones de personas sin trabajo, con un millón de viviendas sin vender, escasez de crédito, desequilibrio en las cuentas públicas, un déficit público que no se acaba de reducir y que genera una elevada prima de riesgo (la diferencia entre el bono nacional a 10 años y el alemán al mismo plazo) y unos elevados costos de financiación para la economía española; y con un sistema bancario en una situación complicada”.

Para la mayoría de los analistas, el nuevo Ejecutivo deberá detallar a los españoles y a los tenedores de deuda, cuanto antes, una estrategia clara y concreta de la política que va a poner en marcha y anunciar un calendario de las reformas estructurales que va a llevar a cabo para calmar a los mercados y para que la economía entre en la senda del crecimiento.

Una de estas reformas es la laboral. En opinión de Pampillón, Rajoy debe hacer una reforma laboral “que incluya la reforma de la negociación colectiva y también la unificación de los contratos”. “Y que rebaje la cotización a la Seguridad Social para que los empresarios se animen a contratar a más trabajadores”.

En este sentido, el presidente de la Comisión Económica de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE), José Luis Feito, propone sueldos más bajos, despido más barato y un salario mínimo para jóvenes también más bajo que el ordinario. Según él, la única forma de estimular el mercado laboral pasa por aumentar la productividad y, a su entender, no hay otro camino para conseguirlo que rebajar los costos salariales.

Numeralia
Panorama

5 millones de personas en España están desempleadas.

1 millón de viviendas están sin comprador.

865 dólares mensuales es el salario mínimo de los jóvenes.

18% es el valor del IVA en España; antes de Zapatero era 16 por ciento.

6% deberá bajar el déficit del PIB en 2011, por pacto con la Unión Europea.