Lula y Lugo extienden reunión para seguir negociado por la usina de Itaipú

BRASILIA, BRASIL.- Los presidentes de Brasil y Paraguay,  Luiz Inácio Lula da Silva y Fernando Lugo, respectivamente, decidieron este  jueves por la noche extender una reunión iniciada en la tarde, para seguir  negociando las diferencias relativas a la usina binacional de Itaipú.

Ambos mandatarios mantuvieron una reunión de tres horas en la sede de la  cancillería, en Brasilia, para tratar de acercar posiciones sobre la cuestión,  pero decidieron hacer una pausa para cenar y luego continuarán los contactos en  medio de un hermetismo prácticamente total, informó una fuente de la  presidencia brasileña.

La fuente dijo a la prensa que la reunión en la cancillería se desarrolló  "en un clima excelente, muy constructivo", pero que al cabo de varias horas de  conversaciones los dos jefes de estado decidieron que era conveniente continuar  las negociaciones.


Lula y Lugo tenían previsto compartir una cena en el Palacio de Alvorada,  residencia oficial del presidente brasileño, y luego continuar las  conversaciones. Por ello, ambos se retiraron de la cancillería sin formular  declaraciones a la prensa.

Los 15 memorandos de entendimiento y protocolos de cooperación bilateral  que Lugo y Lula debían firmar quedaron apilados en una enorme mesa en el  segundo piso de la cancillería, mientras que la prensa fue orientada a  abandonar el local.

La asesoría de prensa de la presidencia brasileña informó que los dos  mandatarios concederán una rueda de prensa en la mañana del viernes, poco antes  de viajar juntos al estado brasileño de Mato Grosso (centro-oeste), donde  incluso planean compartir un almuerzo.

Este jueves, Lula se retiró de la cancillería eludiendo todo contacto con  la prensa, negándose a formular cualquier comentario sobre la confirmación de  cuatro casos de fiebre porcina en el país.

Lugo inició este jueves una visita de Estado a Brasilia con un llamado al  diálogo para tratar de superar las divergencias entre los dos gobiernos,  surgidas por el reclamo paraguayo de mejorar las condiciones que rigen la  división de la energía producida por la represa de Itaipú.

Brasil consume 95% de la energía de Itaipú, que abastece con ésta el 19% de  sus necesidades. Paraguay consume apenas 5% de lo que le corresponde y vende el  excedente a Brasil. Pero Lugo convirtió en eje de su campaña electoral el  reclamo por "un precio justo" y una revisión de la deuda.

El gobierno brasileño considera "un precio justo" los 45 dólares por  megawatt hora que paga a Paraguay, y dejó claro que se niega a renegociar los  términos del tratado constitutivo que permitió la construcción de la usina.

En las últimas semanas Brasil ensayó diversas medidas de compensación a  Paraguay, incluyendo propuestas como la financiación de una línea de  transmisión de Itaipú a Asunción, y una línea de crédito por 1.500 millones de  dólares del banco brasileño de fomento BNDES para el sector industrial  paraguayo.

Al visitar en la mañana de este jueves el Congreso brasileño, Lugo admitió:  "tenemos dificultades, situaciones que podemos superar juntos". Y expresó su  convicción de que "el diálogo es la mejor arma para solucionar las grandes y  pequeñas dificultades".

En una clara alusión a las asimetrías en una región donde Brasil es un  gigante, Lugo dijo aún que "a nadie le conviene tener un vecino pobre, creo que  a todos nos conviene crecer juntos y que esa es la apuesta que hoy hacemos en  América Latina".