Mueren cuatro personas tras resultado electoral en Congo

KINSHASA, CONGO (10/NOV/2011).- Violencias poselectorales causaron al menos cuatro muertos en Kinshasa, donde la situación sigue siendo tensa tras la cuestionada reelección de Joseph Kabila y las amenazas del poder contra el opositor Etienne Tshisekedi, quien se autoproclamó presidente.

Las fuerzas del orden congoleñas dieron muerte a cuatro personas entre el viernes en la noche y el sábado, anunció el jefe de la policía de República Democrática del Congo, general Charles Bisengimana.

Según el general se trata de "tres saqueadores" y de una mujer que recibió "una bala perdida".

El viernes en la noche se produjeron violentos incidentes en la capital congoleña poco después de que la comisión electoral anunciara la victoria del presidente saliente Joseph Kabila, con 48,95% de los votos en la elección del 28 de noviembre, superando a Etienne Tshisekedi (32,33%).

Casi de inmediato, Tshisekedi rechazó el resultado de las elecciones y se autoproclamó presidente electo.

La situación en la capital continuaba tensa este sábado, con violentas protestas en distintos lugares de Kinshasa.

Según Radio Okapi, patrocinada por la misión de la ONU, seis personas perecieron en Kinshasa, donde la gran mayoría de la población vive en una gran pobreza.

Al promediar la jornada se escucharon esporádicas detonaciones.

"Globalmente, la gente a la cual nos enfrentamos son saqueadores y ladrones" y no tenían nada que ver "con manifestaciones políticas", afirmó el general Bisengimana, quien se refirió a "detenciones" sin precisar cuántas personas habían sido arrestadas.

Manifestantes incendiaron varios vehículos y neumáticos, y arrojaron piedras a la policía, que tuvo que efectuar disparos al aire para dispersarlos.

El portavoz del gobierno lanzó una advertencia al líder opositor Tshisekedi.

"Debemos denunciar firmemente la autoproclamación (como presidente electo) de Etienne Tshisekedi (...) Se trata de un acto irresponsable que viola las leyes de la república", declaró a la prensa el portavoz Lambert Mende.

Es una "violación de la ley", un "ataque a la Constitución" que el fiscal general de la República está autorizado a demandar judicialmente, añadió.

"La protección de los ciudadanos y de los expatriados en el territorio congoleño es un motivo suficiente para que el gobierno restrinja la libertad de cualquier persona que se atreva a planear actos que perjudiquen el orden público y la seguridad", advirtió.

Según el general Bisengimana "la situación está totalmente bajo control, la tensión ha disminuido".

Desde el viernes Kinshasa es patrullada por la policía, así como por militares y agentes de la guardia republicana. Había pocos taxis y vehículos que circulaban este sábado. Las estaciones de servicio estaban cerradas, así como numerosos almacenes.

En el barrio Limete (este), donde Etienne Tshisekedi tiene la sede de su comando electoral, un testigo afirmó a la AFP que "combatientes" (militantes) de su partido, Unión para la Democracia y el Progreso Social (UDPS), estaban armados de fusiles Kalashnikov.