Operación Jaque: el plan perfecto

Bogotá.- La Operación Jaque que ejecutó el Ejército colombiano para liberar a la ex candidata presidencial Ingrid Betancourt y otros 14 rehenes resultó un plan perfecto inspirado en el famoso 'Rescate en Entebbe' aplicado por Israel en 1976 en Uganda.  

Igual que en Entebbe, la Operación Jaque del miércoles se basó en el engaño, la infiltración y la confusión del enemigo, en este caso las experimentadas Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), la guerrilla más antigua y poderosa de América Latina.  

La clave del exitoso operativo militar fue la infiltración de las telecomunicaciones de las FARC, al punto de hacer creer a los jefes guerrilleros a cargo de los secuestrados, 'César' y "Gafas", que el alto mando había ordenado el traslado de los rehenes a otro sitio.  

Agentes encubiertos que se hicieron pasar por altos comandantes de las FARC a través del sistema de comunicación radial de ese grupo hicieron creer a los custodios de los secuestrados que las instrucciones provenían del Secretariado de la organización rebelde.  

'Los engañaron haciéndoles creer que una organización humanitaria prestaría unos helicópteros para llevar a los rehenes a una zona segura. Supuestamente, las órdenes habrían sido dadas por Alfonso Cano, máximo comandante de las FARC', indicaron fuentes militares.  

A través de la radio, efectivos del Ejército colombiano ordenaron a 'César' que los secuestrados –Ingrid, tres agentes estadunidenses y 11 policías y soldados- fueran concentrados en un paraje del río Apaporis, entre los surorientales departamentos de Guaviare y Vaupés.  

De acuerdo con la falsa orden del alto mando, en ese lugar serían recogidos por un helicóptero de una supuesta organización humanitaria que los trasladaría a una zona más segura donde estarían a mejor resguardo de operativos militares.  

Un helicóptero de color blanco con agentes de fuerzas especiales a bordo aterrizó el miércoles en el sitio convenido, en el cual habían sido bloqueadas las verdaderas telecomunicaciones del alto mando de las FARC y sólo fluían las que emitía el Ejército colombiano.  

El jefe de Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Militares de Colombia, general Freddy Padilla De León, explicó que la aeronave estuvo en tierra durante 22 minutos para que abordaran los rehenes y dos rebeldes.  

'Fueron los 22 minutos más largos de mi vida', indicó el jefe militar al dar detalles sobre el exitoso operativo para lograr la liberación el pasado miércoles.  

El aporte técnico de Estados Unidos fue fundamental para el éxito de la Operación Jaque, según han reconocido las propias autoridades colombianas.  

Con el helicóptero en tierra, los agentes colombianos –que habían entrado durante 10 días el papel que debían cumplir dentro de la aeronave y quienes vestían camisetas del Che Guevara- dijeron a 'César' y 'Gafas' que debían acompañarlos junto con los 14 rehenes.  

Ambos guerrilleros, que iban armados con escuadras 9 milímetros, subieron confiados al aparato y 15 guerrilleros más quedaron en tierra mientras observaban cómo se elevaba el aparato.  

Una vez que el helicóptero tomó vuelo, cuatro agentes desarmaron en cuestión de segundos a 'Cesar' y 'Gafas', los sometieron, los desnudaron, les vendaron los ojos, los maniataron y los botaron al piso, en una escena que Ingrid recuerda muy bien.  

'De pronto algo sucedió y vi al comandante (de las FARC, ‘César’), que por tantos años había sido tan cruel con nosotros, empelotado (desnudo) y con los ojos vendados", dijo Ingrid.  

Sometidos los dos guerrilleros, el mayor del Ejército al mando de la operación expresó a los 14 secuestrados: "Somos el Ejército Nacional. Están en libertad", y el helicóptero voló hacia una base militar en la sureña San José del Guaviare, de donde se trasladarían a Bogotá.  

'Fue un rescate de película', dijo el ministro de Defensa de Colombia, Juan Manuel Santos, quien comenzó a fraguar la estrategia desde finales del año pasado junto con los comandantes de las Fuerzas Militares y con el apoyo técnico de expertos estadunidenses.  

El plan de 'cerco humanitario' consistía en intentar llegar a los secuestrados mediante agentes encubiertos e instrumentos de inteligencia y telecomunicaciones, para lo cual el primer paso fue ubicar el sitio donde tenían las FARC a sus rehenes.  

Efectivos del Ejército y asesores estadunidenses analizaron las pruebas de superviviencia de varios secuestrados –entre ellos Betancourt- incautadas a enviados de las FARC en Bogotá en noviembre del año pasado, lo que permitió establecer el sitio de cautiverio.  

En Entebbe, fuerzas israelíes ingresaron subrepticiamente al aeropuerto haciéndose pasar por un convoy del entonces presidente ugandés Idi Amin, quien retenía un avión de Air France con 244 pasajeros y 12 tripulantes a bordo secuestrado por terroristas.  

Esa operación culminó con la muerte de sólo tres rehenes, así como 13 terroristas alemanes y palestinos y 33 soldados ugandeses abatidos, además de la baja de un comando israelita en enfrentamientos en los que se dispararon miles de tiros.  

La Operación Jaque, en cambio, basada en la misma lógica del engaño, culminó de manera exitosa con el rescate de los 14 rehenes y sin disparar un solo tiro, algo inaudito para este tipo de operativos militares.  

"Fue una operación perfecta", dijo Ingrid, y pidió a las FARC que no fusilen a los 15 guerrilleros que quedaron en la selva ya que "no es culpa de ellos; no había nada que hacer".