Internacional | El PP inicia hoy el proceso de traspaso de funciones del Ejecutivo Rajoy pretende formar su gobierno antes de Navidad El PP inicia hoy el proceso de traspaso de funciones del Ejecutivo; Zapatero ofrece “máxima colaboración” y anuncia renovación socialista Por: EL INFORMADOR 22 de noviembre de 2011 - 02:06 hs Ni el giro político a la derecha ni las promesas de cambio lograron calmar a los mercados bursátiles ayer lunes. REUTERS / MADRID, ESPAÑA (22/NOV/2011).- El conservador Partido Popular (PP), que arrasó al Partido Socialista Obrero Español (PSOE) en las elecciones del domingo en España, comenzará hoy mismo el traspaso de funciones con el gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero con vista a tener formado el nuevo Ejecutivo que presidirá Mariano Rajoy antes de Navidad. El líder conservador intervino ayer ante la dirección de su partido tras la victoria electoral, que le ha dado una amplia mayoría absoluta de 186 escaños en el Congreso de los Diputados, frente a los 110 del PSOE, que sufrió su peor derrota desde la muerte de Franco en 1975, castigado por las consecuencias de la crisis. Rajoy manifestó su deseo de que tanto el debate parlamentario de su investidura como el nombramiento del Gobierno se produzca lo antes posible y aludió en concreto a “antes del día de Navidad”, según resumió a la prensa la “número dos” de su partido, María Dolores de Cospedal. Para coordinar ese traspaso de poder, Rajoy eligió a una persona de su máxima confianza, Soraya Sáenz de Santamaría, exportavoz del PP en el Congreso de los Diputados, y que aparece en todas las quinielas que manejan los medios españoles sobre el nuevo Ejecutivo, en algunas incluso como vicepresidenta primera o “número dos”. Sáenz de Santamaría, se mostró partidaria de acelerar al máximo el traspaso de poderes al nuevo Gobierno al considerar que el país está en una situación “extraordinaria” debido a la gravedad de la crisis económica. Conforme al proceso establecido en la ley electoral, el nuevo parlamento se constituirá el 13 de diciembre. A partir de ese día el rey Juan Carlos como jefe de Estado mantendrá consultas con los partidos antes del debate de investidura del nuevo presidente, que se calcula que será en torno al día 20 de diciembre, tras el cual Rajoy jurará o prometerá su cargo ante el Rey antes de anunciar la composición de su gabinete. La delicada situación económica que vive el país, con casi cinco millones de desempleados (el 21,52 % según datos de la última encuesta de población activa), los anuncios que hablan del peligro de una nueva recesión y las presiones sobre la deuda soberana en los mercados, estuvo muy presente en la reunión de los dirigentes del PP. Según Cospedal, Rajoy presentó como sus principales objetivos: decir la verdad de la situación a los españoles, consultar con los partidos con representación parlamentaria, poner orden, cumplir las responsabilidades, realizar las reformas necesarias y “tener un gobierno presidido por el rigor y la constancia”. Los dirigentes de los principales países europeos y de las instituciones de la UE han felicitado a Rajoy por su rotunda victoria, y en el caso de la canciller alemana, Ángela Merkel, habló ayer con él por teléfono. El líder conservador volvió a advertir que no deben esperarse milagros, y aludió a las presiones sobre la deuda española en los mercados para apuntar que la solución “tiene que venir de una estrategia conjunta y operativa de toda la Zona Euro”. Pero, pese al vuelco electoral en España y al cambio del gobierno que trae consigo, los mercados hoy no han aflojado su presión sobre la deuda soberana. Por su parte, el saliente presidente José Luis Rodríguez Zapatero dijo ayer que mantendrá un diálogo fluido con Mariano Rajoy para coordinar el traspaso de poder. “Afrontamos la peor crisis económica con las consecuencias sociales más duras que hemos tenido en democracia”. Zapatero reconoció la dura derrota y anunció que el PSOE celebrará un congreso a principios de febrero para renovar sus órganos de dirección y elegir un nuevo líder. El jefe del Gobierno en funciones no aclaró si el candidato socialista Alfredo Pérez Rubalcaba, gran derrotado en los comicios, concurrirá a ese congreso. “El partido ha sufrido un fuerte deterioro en su respaldo popular”. “Es lo que procede, que el partido afronte una nueva etapa”. FICHA TÉCNICALa nueva configuración política en España Con el escrutinio finalizado, el Partido Popular logró una holgada mayoría absoluta de 186 de los 350 escaños de la cámara baja del Parlamento. El socialismo perdió cuatro millones de votos con respecto a 2008, obtuvo 110 escaños, es decir, 59 menos de los que tenía hasta el momento, y cosechó su peor resultado en la era democrática. En la Cámara alta, el triunfo del PP fue igual de arrollador, logrando 138 senadores por 48 del PSOE. No obstante, el número de votos blancos o nulos al Senado triplicó a los del Congreso. Y es que 5.37% de los electores optó por la papeleta en blanco (3.3 puntos más que en 2008) y 3.71% por el voto nulo (1.5 puntos más). En total, 2.1 millones de personas optaron por esta fórmula indirecta de protesta. ANÁLISISHolgada mayoría, estrecho margen de maniobraJESÚS CEBERIO (articulista de El Pais) Pedía Rajoy un apoyo masivo en las urnas y los votantes le han dado una holgada mayoría absoluta. Si se suma el resultado de las elecciones municipales y autonómicas, ninguno de sus predecesores en La Moncloa (sede del Gobierno) ha acumulado tanto poder como el que va a tener después de su investidura. Aunque, paradójicamente, tampoco ninguno tuvo tan estrecho margen de maniobra. Decía Rajoy en campaña, tras el último vendaval de los mercados, que a los españoles no les gusta que les digan desde fuera lo que tienen que hacer. Pues bien, gran parte de su agenda inmediata ya viene trazada con el programa de consolidación fiscal exigido por Europa y que, salvo subidas de impuestos ya descartadas, no es sino un duro plan de ajuste. La desesperante ambigüedad de Rajoy no pasó factura en las urnas, seguramente porque el fracaso de Zapatero en su segunda legislatura inhabilitaba de antemano a los socialistas para conducir al país en esta segunda travesía de la gran depresión que padecemos desde 2009. Pero lo que fue una estrategia electoral de éxito no puede prolongarse un día más. Los ciudadanos, tanto los que votaron por él como los que no, necesitan conocer a la máxima brevedad el plan de medidas urgentes que tan celosamente ha escondido. Tampoco los mercados, que vuelven a abrir tras las turbulencias del viernes, van a dar ningún respiro al presidente electo. Los electores le dieron votos suficientes para blindarle frente a las exigencias maximalistas que pueda plantear la extrema derecha que habita en el PP. Y también para formar el Gobierno fuerte que decía necesitar. Esa fortaleza depende ahora del acierto de Rajoy en la elección de un Consejo de Ministros solvente, en el que debería despejar cuanto antes la incógnita de su responsable de Economía sin los rituales secretistas que acostumbran los presidentes. Habrá que ver también en qué quedan las promesas de convocar un gran acuerdo nacional —incluido el pacto por la sanidad pública, que Gallardón comprometió en el segundo debate— para gestionar la emergencia económica. Cabe esperar que utilice la ronda de felicitaciones postelectorales para acordar citas con sus homólogos europeos, especialmente con la canciller Angela Merkel, aun antes de que a comienzos de diciembre se reúna la conferencia del PPE. Con la próxima incorporación de Rajoy los partidos de centro derecha ocuparán 24 de los 27 sillones del Consejo Europeo. La coincidencia ideológica debería servir para desarrollar una relación más fluida en esta UE de la que depende en gran medida la solución de la crisis y cuya desesperante lentitud y división interna agrava a menudo los problemas. El partido socialista cosecha su peor resultado histórico, que alimenta desde hace dos años, cuando ya las encuestas empezaban a registrar una fuga masiva de votantes. Por primera vez se ven superados por el PP en Andalucía y pierden el feudo de Cataluña en favor de CiU. El miedo a los recortes de Rajoy ha sido al fin un argumento que palidecía frente al lancinante guarismo de cinco millones de parados. Pero sería un despropósito que los socialistas se embarcaran en un ajuste de cuentas urgente que les impida realizar la tarea de oposición que les han encargado más de siete millones de votantes. Tienen tiempo para madurar los relevos que exige la magnitud de su derrota, empezando por la secretaría general del partido. En el País Vasco el gran beneficiado del cese de la actividad terrorista de ETA ha sido Amaiur, que le disputa al PNV la hegemonía del electorado nacionalista. En este Parlamento de sólida mayoría popular, a la que solo escapan Cataluña y el País Vasco, la dispersión de antiguos votantes socialistas alimentó también un crecimiento notable de IU y de otras formaciones minoritarias. Se configura así un Congreso de los Diputados donde convive una bancada mayoritaria del PP con una mayor diversidad ideológica y en el que los dos principales partidos no cuentan con votos suficientes para imponer una reforma constitucional sin referéndum, como ya hicieron en septiembre. Temas Europa España Mariano Rajoy Lee También Hombre murió solo en su casa y su cuerpo fue hallado 15 años después, esto pasó ¿Cómo se despliegan los cárteles mexicanos en Australia? Activistas lanzan pintura a un cuadro de Cristóbal Colón en museo de Madrid España consigue su boleto a los cuartos de final del Mundial Sub-20 Recibe las últimas noticias en tu e-mail Todo lo que necesitas saber para comenzar tu día Registrarse implica aceptar los Términos y Condiciones