Compromisos incandescentes

GUADALAJARA, JALISCO (18/FEB/2012).- El mundo está inevitablemente determinado por procesos globales; sin embargo, éstos finalmente representan la suma de individualidades que, desde su perspectiva local, impactan en la escena internacional. Conforme se avanza en el tiempo, la ciudadanía se consolida con mayor fuerza como un actor decisivo en la política doméstica y exterior de un Estado. Frente a las distintas problemáticas actuales, los ciudadanos elevan su voz y exigen cambios estructurales en los paradigmas prestablecidos.

El vertiginoso avance de la tecnología representa un factor clave para la acción ciudadana, ya que permite que individuos ajenos y distantes entre sí compartan ideas, acojan causas comunes e influyan decisivamente como colectividad. Lo anterior se traduce en una nueva forma de hacer activismo e incidir en la vida pública.

La defensa de los derechos humanos, la protección del medio ambiente, la erradicación de la pobreza y el combate a la injusticia son tan sólo algunas de las causas en las que un individuo se puede involucrar de manera activa. No basta con imaginar un mundo más ecuánime para que la justicia se haga presente, tampoco es suficiente desear un cambio para que cristalice. Para alcanzar verdaderas transformaciones en el sistema, es necesario que los individuos asuman la responsabilidad y se comprometan en el largo plazo con la causa que más logre conmoverlos.

Silvia Figueroa, académica del Tecnológico de Monterrey y analista política, es el ejemplo de una mujer entregada a causas sociales que ha hecho del compromiso un hábito y del activismo un estilo de vida. Silvia reconoce la importancia de transmitir su sentido de responsabilidad a toda persona con la que interactúa y puntualiza que el conocimiento debe motivar a la acción.

Ser un verdadero ciudadano no se limita a conseguir la mayoría de edad, sino que implica involucrarse en los acontecimientos de la vida pública. Cada quien tiene la capacidad de decidir entre ser espectador o protagonista de la realidad, permanecer en la indiferencia o trascender en la acción. El cambio se entiende como una permutación de estado o situación; si deseas ver un cambio en el mundo, transforma tu entorno y comprométete con la permutación del entorno de los demás.  

Gilda Colín Bracamontes

FRASE

"Nunca dudes que un pequeño grupo de ciudadanos pensantes y comprometidos pueden cambiar el mundo. De hecho, son los únicos que lo han logrado "

Margaret Mead.

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Escucha de viva voz a los líderes sociales compartir, en una entrevista, algunas de sus experiencias

Silvia Figueroa
Educación para la acción

—¿Quién es Silvia Figueroa, según Silvia Figueroa?

Una mujer con responsabilidad social, comprometida con las causas sociales y con provocar un cambio en mi entorno inmediato para después darme a los demás. Considero que estoy en este mundo para dejar huella y para que ese compromiso se vea reflejado en nuevos compromisos con mis estudiantes, con mis niños y la gente a la que quiero.

—Cuando pequeña, ¿qué soñaba ser de grande?

Bailarina. A los tres años conocí la danza; la música me transformaba y me daba una sensación de libertad. Desde entonces, la libertad se ha convertido en una de las causas de mi vida: libertad de actuar, de comprender, de creer. Los derechos humanos me apasionan. Cuando era niña, soñaba con seguir experimentando esa serenidad, esa libertad y esa capacidad de expresar, transmitir y comunicar a los demás.

—¿Qué persona, viva o muerta, es su inspiración?

Mi padre definitivamente es una gran influencia; un hombre responsable, congruente, honesto y trabajador. Entre los grandes personajes, indiscutiblemente, la Madre Teresa de Calcuta, mujer nacida en un país por demás difícil, que dio su vida por los demás y logró grandes obras en el servicio. Asimismo, el discurso de No Violencia de Gandhi, me conmueve y me hace admirarlo.

—¿Qué valor guía su vida?

Honestidad, responsabilidad y congruencia. Si tuviera que escoger uno sería la responsabilidad porque una vez que conoces, no puedes dejar de comprometerte. Responsabilizarme de mis actos, de las personas que dependen de mí, en quienes influyo o con quienes interactúo día a día.

—¿Qué es más peligroso: la ignorancia o la indiferencia?

La ignorancia porque no tienes la oportunidad de comprometerte. Si eres indiferente,  la vida y las personas con las que te cruzas pueden sacudirte y eventualmente llevarte a un compromiso, pero si lo ignoras, no hay manera de sensibilización. De ahí la importancia de educar para actuar. México necesita mucho de educación para la paz, para ser tolerantes e incluyentes. Quienes tenemos cierto conocimiento, oportunidad, salud e inteligencia, tenemos la responsabilidad de cambiar ese entorno de ignorancia.

—¿Cómo describiría actualmente el escenario internacional?

Convulsivo, problemático, complejo. Es interdependiente y enfrenta retos que requieren nuevos patrones de cooperación y convivencia para diseñar mejores soluciones para problemas gloloclaes. Vivimos en un mundo glocalizado, donde un problema global requiere de la acción local. Ya no es únicamente esperar a las decisiones de los grandes organismos internacionales, es vincular al ciudadano con su problemática inmediata para tener una incidencia regional, nacional y mundial.

—¿Cómo ha evolucionado el papel de la ciudadanía en la escena internacional?

De manera impactante, lo vemos con la Primavera Árabe. Hoy el ciudadano tiene voz pero no puede estar aislado, sino crear su propia red comunitaria en donde converjan sus intereses; entonces se pueden enarbolar grandes causas. Hasta  hace poco era impensable que esquemas dictatoriales de décadas sucumbieran ante el clamor ciudadano. Aquí vemos que hay un uso positivo de la tecnología de la información y las redes sociales, donde ésta se suma a una causa de los corazones, un tema emotivo y social. Estamos en un parte aguas porque muchos se sienten inspirados por lo que se ha logrado en otras latitudes.

—¿Cómo puede un individuo involucrarse en un movimiento internacional?

Primero tienes que estar sensible al corazón del movimiento, habrá una causa que realmente te mueva y te conmueva, te enerve y te enoje. Después hay que encontrar a quien refleje el mismo sentir. Posteriormente hay que comprometerse, no sólo con un donativo o una firma electrónica, sino con tiempo. Cuando hay verdadero activismo, no se busca que tu nombre y apellido figuren, eres una luz más que ilumina el camino.

—¿Cuál es el cambio que quiere ver en el mundo?

Menos inequidad. No es posible seguir viviendo en estas burbujas sociales, donde la gran mayoría está en los cinturones de miseria. Si el Estado ha fallado en propiciar que exista igualdad, las personas que contamos con habilidades, conocimiento y capacidad, tenemos una gran responsabilidad. Todos nacemos libres e iguales en el papel, pero en la práctica no sucede así. Esto implica que cambien muchas cosas, pero no es imposible.

—¿Cuál es la responsabilidad del hombre respecto al futuro del mundo?

Somos los custodios de este planeta finito. Todo custodio tiene que ser responsable, visionario y actuar en consecuencia. No se nos puede permitir dilapidar los recursos del planeta y regresarle únicamente contaminación. En cuanto a la civilización, no se nos puede permitir contaminar la comunidad con la que vivimos, sino por el contrario, aportarle en todo sentido.

—¿Qué desea, desesperadamente, que entienda la juventud?

Que el tiempo es para aprovecharse y que la educación es para la acción, no sólo para el conocimiento. Este sería el lema de mi quehacer docente.

—¿Qué debate y entre quienes le gustaría presenciar?

Me encantaría tener a Hu Jintao, de China, y a Angela Merkel, de Alemania.  Se debatirían dos esquemas de hacer política y economía completamente diferentes. Me gustaría que se hablara sobre lo que significa un estado de bienestar y un Estado vigilante de los derechos humanos. Desde la perspectiva china hay un esquema autoritario que permite cierta calidad de vida a todos y el Estado es garante de los derechos individuales. Desde la perspectiva alemana, tendríamos lo que significa un estado de bienestar en un contexto de libertad, democracia y derechos humanos.

—¿Qué sabe ahora que le hubiera gustado saber antes?

Que el mundo es muy amplio, que hay mucha oportunidad de coincidir con personas a quienes no les he visto el rostro pero que estamos inspirados por los mismos valores y creemos en las mismas causas. Ahora que existen las redes sociales y el internet,  no podemos quedarnos cruzados de brazos al haber tanta oportunidad de sumar.

—¿Qué mensaje puede dar a los jóvenes de Mar Adentro?

Primero, felicitarlos por estar ahí. Segundo, continúen comprometidos con objetivos bien planteados, que es válido replantearlos, pero no abandonarlos. Mantengan la fuerza de voluntad, el compromiso y la claridad en la meta, pero sobre todo, nunca abandonen los intereses y las metas que se han fijado, volteando a ver siempre a los demás.

Voluntades
Historias de éxito que trascienden

Peter Benenson
La lucha por los derechos humanos

Las grandes causas sociales son como el fuego; al encenderse una voluntad, su luz se contagia hasta lograr cambios trascendentales. Peter Benenson, abogado británico fundador de Amnistía Internacional, nació el 31 de julio de 1921 en Londres, Inglaterra.

En 1961, su vida dio un giro inesperado al leer un artículo publicado en un diario londinense. En éste se relataba la historia de dos estudiantes portugueses encarcelados tras brindar por su libertad en un restaurante de Lisboa. El régimen del dictador luso, Antonio de Oliveira Salazar, condenó a estos jóvenes a 7 años de prisión. La noticia encolerizó a Benenson a tal grado, que publicó a su vez el artículo “Los presos olvidados” en el diario The Observer. El texto hacía un llamado a todas las personas del mundo a actuar para conseguir la excarcelación de estos presos de conciencia. Sorprendentemente, más de mil lectores se sumaron a su causa y Peter instituyó una nueva forma de hacer activismo y luchar contra la injusticia.  

Al inicio, la organización fue llamada Appeal for Amnesty, pero, tras consolidarse como un movimiento internacional de carácter permanente, fue rebautizada como Amnistía Internacional.

En menos de un año, contaba con delegaciones en cuatro países y trabajaba sobre 210 casos de personas encarceladas injustamente. Conforme crecía, su objetivo se extendió a víctimas de otros abusos de derechos humanos.

Amnistía Internacional es la organización no gubernamental que más se ha destacado en la defensa de los derechos humanos a nivel mundial. Su labor fue reconocida con el Premio Nobel de la Paz en 1977 y con el Premio de Derechos Humanos de las Naciones Unidas en 1978. A 50 años de su fundación, la organización está presente en 150 países y cuenta con más de 3 millones de simpatizantes.

Peter Benenson falleció en 2005, sin embargo, su legado crece conforme se encienden más voluntades que creen en la libertad y en la dignidad como derechos inalienables de la condición humana.

10 notas positivas

1. Se destinan 617 millones de pesos para atender a los afectados por el huracán “Jova” y los efectos de la sequía.

2. Estudio revela que la energía solar y de fusión cubrirán demanda de toda la Humanidad.

3. Inicia la reunión de la Asociación Americana para el Avance de las Ciencias en Vancouver, Canadá.

4. Las reservas de México alcanzan máximos históricos.

5. Cancilleres del G20 buscan fortalecer diálogo en México.

6. La Secretaría de Educación Jalisco reconoce a los mejores alumnos del Estado.

7. Se inaugura el Museo de Arte Sacro de Guadalajara.

8. Se presenta la segunda edición del Jalisco Open.

9. El escritor mexicano Jorge Volpi gana el Premio Planeta-Casa de América.

10. México condecora a Jan Hendrix con el Orden del Águila Azteca.

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