En bares de la Zona Poniente, una de cada cuatro infracciones por ruido

GUADALAJARA, JALISCO (14/JUN/2011).- La generación de ruido en los establecimientos comerciales y de prestación de servicios dentro del municipio de Guadalajara, es un aspecto de sus actividades que no se encuentra regulado en ninguno de los apartados de la reglamentación para la autorización de estos giros, y que apenas menciona en un par de ocasiones.

El Reglamento para el Funcionamiento de Giros Comerciales, Industriales y de Prestación de Servicios de Guadalajara, como lo señala la titular de la Dirección de Inspección y Vigilancia de Guadalajara, Verónica Martínez Espinoza, no contiene requisitos específicos que deban ser cumplidos por los titulares de las licencias de funcionamiento para normar el nivel del ruido que producen y las formas de aislarlo o controlarlo.

El artículo 15 sólo indica como una de las prohibiciones para los titulares de las licencias de giro, en su fracción tercera, “causar ruidos, trepidaciones, producir malos olores o sustancias contaminantes”. La única otra mención expresa del tema aparece para las ferias y juegos electromecánicos, a los que se les prohíbe “la utilización de sonido a decibeles mayores a los autorizados por la Norma Oficial”, dice la fracción II del artículo 123, pero no más.

El reglamento tampoco fija qué establecimientos por las características de su funcionamiento deberán garantizar el aislamiento del sonido en su interior ni qué aditamentos o adecuaciones para dicho fin son requerimientos oficiales en los inmuebles para obtener la autorización del Gobierno municipal.

Martínez Espinoza hace ver que la reglamentación tapatía ni siquiera prohíbe que los bares o sitios similares deban tener sus fuentes originadoras de ruido en inmuebles cerrados, esto ha permitido que haya cada vez más giros con bandas o dj’s en vivo en terrazas, al aire libre, donde la música evidentemente se escapa al entorno. 

Ante la carencia de un cuerpo de artículos para regular en este sentido la operación de los giros en el municipio, la Dirección de Inspección y Vigilancia, responsable de hacer cumplir los reglamentos del Ayuntamiento tapatío, debe recurrir a la aplicación de la Norma Oficial Mexicana-081-Semarnat-1994, “que establece los límites máximos permisibles de emisión de ruido de las fuentes fijas y su método de medición”.

Esta norma básicamente establece que la generación de ruido no puede rebasar los 68 decibeles de las 06:00 a las 22:00 horas, y los 65 decibeles de las 22:00 a las 06:00 horas. Las mediciones las realiza la dependencia al exterior de los establecimientos.

La funcionaria concedió una entrevista con este diario:

— ¿Incluir un apartado en la reglamentación municipal sobre la generación de ruido serviría a disminuir las problemáticas que se presentan alrededor de ello?

— Qué bueno que estuviera y que estuviera exactamente acorde a la NOM, sería como una especie de reiteración de lo que dice esta norma federal, aunque no pasa nada con que nosotros la apliquemos. 

— Parece importante que la reglamentación precisará los requisitos para la autorización de giros en cuya operación será prioritaria la generación de ruido, como aquellos con música.

— Sí, sí es importante, que estuvieran bien definidos los lugares generadores de sonido, todos generamos sonido pero el lugar con mayor generación que tuviera más requisitos bien especificados en la norma para que no trataran —bueno, siempre tratan— de ver como la evitan. Donde se les ordenara que tuvieran dobles vidrios, que tuvieran paredes forradas, etcétera, eso probablemente evitaría un poco de menos molestia —siempre la va a causar por el ruido que se genere en la madrugada porque salen las personas muy alegres y pues también va a molestar—.

— Cuando se incumple la NOM y sus inspectores imponen una clausura, ¿ésta se retira hasta que se implementen adecuaciones para aislar el sonido e impedir que se escape al entorno?

 — No, porque tampoco está en la norma (municipal). Lo que yo hago es, a través del manual de procedimientos, reviso los antecedentes del giro para ver la reincidencia, y si veo que es un giro que en forma reiterada está violando la norma de una u otra forma, entonces doy un castigo que puede ir de una semana, a 15 días o tres semanas sin abrir, aunque hayan cubierto el pago.

La problemática alrededor del ruido, apunta la funcionaria, no se circunscribe exclusivamente a los giros restringidos (restaurante-bar, bar, discoteca, por ejemplo), lo mismo sucede en los blancos:

“Tenemos farmacias que tienen el sonido (muy alto), mueblerías porque es mercadotecnia, el sonido atrae al comprador, y entonces tenemos anunciando con música guapachosa aquella que llama la atención, también hay molestia en los gimnasios, que empiezan en muchos desde las 06:00 horas, y con música incentiva al alumno a hacer con mas intensidad el ejercicio”.

Para cualquier tipo de molestia que surja por el ruido que libere un establecimiento, los ciudadanos pueden recurrir a esta dependencia para solicitar la verificación del sitio, incluso, en estos momentos se calcula que el 70% de todos los reportes que llegan a través del 070, hacen referencia a quejas por estas razones.

“Lo digo y lo repito, el sonido nos está estresando demasiado”, concluye la directora.
 
Cifras e inspecciones

En el Subdistrito 2 Minerva de Guadalajara, que comprende corredores como Chapultepec, Vallarta y López Mateos, se levantaron en 2010, 127 actas por faltas reglamentarias detectadas por la Dirección de Inspección y Vigilancia, de las cuales 34 fueron originadas por la generación de ruido, es decir, 26%.

En 2011, hasta mayo, la dependencia había levantado 36 actas por faltas reglamentarias, de las cuales tres fueron por la generación de ruido (8%).

Si se habla de cifras totales en 2010 y 2011, entonces las actas fueron 163, con 37 motivadas por la generación de ruido (22%).  

La veda

Prohíben nuevos permisos

Recientemente el presidente municipal de Guadalajara, Aristóteles Sandoval Díaz, y el presidente del Consejo de Giros Restringidos, Eduardo Almaguer Ramírez, anunciaron la próxima aprobación de una veda para no otorgar más licencias a este tipo de establecimientos en todo el Subdistrito 2 Minerva.
La veda a estas autorizaciones la argumentan en la “saturación” que dicen encontrar en la zona poniente del municipio de estos giros, y en la “crispación social” que se ha venido originando cuando estas actividades se enmarcan en áreas habitacionales.

Para saber

Cero decibeles no es sinónimo de silencio

Los decibeles no son una escala lineal sino logarítmica, por lo que cero decibeles no es sinónimo de silencio. Una situación de 30 decibeles es prácticamente una situación de silencio, por debajo de este nivel en el exterior necesitamos ambientes sin ruido o viento. Situaciones por encima de 80-90 decibeles son difíciles de encontrar en el ambiente, normalmente están en industrias o discotecas.

Sólo en situaciones muy ruidosas podemos estar por encima de 90 decibeles, especialmente si nos referimos a niveles promedio de ruido ambiental que caractericen una zona.

La escala en decibelios representa variaciones grandes en los 140, que van del umbral de audición al de dolor.

Operativos tapatíos

Historial de algunos giros

Callejón de los Rumberos (Chapultepec 287)

Inspecciones implementadas en 2010

18 de febrero. Se verifican emisiones de ruido dentro de la NOM con 63 decibeles.
13 de mayo. Se verifican emisiones de ruido dentro de la NOM con 63 decibeles, se apercibe mantenerlas así.
7 de octubre. Sin anomalía en ruido, se apercibe seguir en la NOM.
2 de diciembre. Se verifican emisiones sonoras en la NOM, con 64 decibeles y se apercibe seguir así.

Inspecciones implementadas en 2011

14 de mayo. Se infracciona por ruido excedido, se apercibe corregir y presentar comprobante de control de fauna nociva.

4 de junio. Sin anomalía, se verificaron 65 decibeles dentro de la NOM.

Bar Cassette (López Cotilla 1423)

Inspecciones implementadas en 2011

4 de febrero. Se verifica ruido dentro de la NOM, se apercibe mantenerlo en esas condiciones.
24 de febrero. Se infracciona por ruido excedido de la NOM.

Lola Lolita (Vallarta 1110)

Inspecciones implementadas en 2011

25 de febrero. Se verifica ruido dentro de la NOM, se apercibe mantenerlo en esas condiciones.
29 de mayo. Se verifica ruido excedido con valores de 79 decibeles, se infracciona.

Fuente: Dirección de Inspección y Vigilancia de Guadalajara.

Efectos sobre el sueño

Impactos

El ruido ambiental puede causar efectos primarios durante el sueño y efectos secundarios que se pueden observar el día siguiente. El sueño ininterrumpido es un prerrequisito para el buen funcionamiento fisiológico y mental.

Los efectos primarios del trastorno del sueño son dificultad para conciliar el sueño, interrupción del sueño, alteración en la profundidad del sueño, cambios en la presión arterial y en la frecuencia cardíaca, incremento del pulso, vasoconstricción, variación en la respiración, arritmia cardíaca y mayores movimientos corporales. La diferencia entre los niveles de sonido de un ruido y los niveles de sonido de fondo, en lugar del nivel de ruido absoluto, puede determinar la probabilidad de reacción. La probabilidad de ser despertado aumenta con el número de eventos de ruido por noche. Los efectos secundarios o posteriores en la mañana o día(s) siguiente(s) son percepción de menor calidad del sueño, fatiga, depresión y reducción del rendimiento.

Para descansar apropiadamente, el nivel de sonido equivalente no debe exceder 30 dB para el ruido continuo de fondo y se debe evitar el ruido individual por encima de 45 dB.
 
Funciones fisiológicas

Después de una exposición prolongada, los individuos susceptibles pueden desarrollar efectos permanentes, como hipertensión y cardiopatía asociadas con la exposición a los altos niveles de sonido. La magnitud y duración de los efectos se determinan en parte por las características individuales, estilo de vida y condiciones ambientales. Los sonidos también provocan respuestas reflejo, en particular cuando son poco familiares y aparecen súbitamente.
 
Salud mental

El ruido ambiental no causa directamente enfermedades mentales, pero se presume que puede acelerar e intensificar el desarrollo de trastornos mentales latentes. La exposición a altos niveles de ruido ocupacional se ha asociado con el desarrollo de neurosis, pero los resultados de la relación entre ruido ambiental y efectos sobre la salud mental todavía no son concluyentes. No obstante, los estudios sobre el uso de medicamentos, tales como tranquilizantes y pastillas para dormir, síntomas psiquiátricos y tasas de internamientos en hospitales psiquiátricos, sugieren que el ruido urbano puede tener efectos adversos sobre la salud mental.

FUENTE: Organización Mundial de la Salud.