La responsabilidad de los derechos humanos

GUADALAJARA, JALISCO (25/MAY/2013).- Los derechos humanos son inherentes a todas las personas, sin distinción ni discriminación alguna. Fueron creados para proteger las libertades fundamentales de los individuos, pero en muchas circunstancias son corrompidos por los mismos acreedores.

Nos alarmamos porque escuchamos en los medios de comunicación que constante y sistemáticamente se violan los derechos humanos en muchas partes del mundo. Asesinatos, maltrato a los migrantes, violaciones, falta de conciencia ecológica, discriminación, violencia infantil, explotación laboral y más, que terminan en manifestaciones, gritos desesperados que claman por justicia y paz.

Pero, ¿quién escucha esas súplicas? Precisamente las organizaciones pertenecientes al Gobierno o no gubernamentales, como el caso de Amnistía Internacional, que se encargan de informar sobre estas problemáticas, asimismo, de proporcionar los medios necesarios para erradicarlas o disminuirlas. Sus propuestas y proyectos nos invitan a sumarnos masivamente en una acción conjunta que provoque un verdadero cambio en  México y en el mundo.

Ante esta situación precaria e inquietante sobre los derechos universales, se habla mucho de exigirlos, protegerlos y buscar su cumplimiento a toda costa, con el fin de vivir en una nación más armónica. Pero cuando sólo se piensa en exigir, se pierde de vista un punto importante: nosotros también tenemos la responsabilidad y el compromiso social de cumplir con ellos.

Debemos tomar acción en primera persona y no esperar a que otros lo hagan, a tener la convicción de tratar a los demás como nos gustaría ser tratados, a respetar a los otros para que se nos respete, a dar testimonio con nuestra vida y acciones de que todos los seres humanos nacemos libres e iguales en dignidad, derechos y dotados de razón y de conciencia.

A sabiendas de que el primer derecho es valorar la dignidad propia y de los demás, debemos tomarlo como punto de partida y proponernos ejercer los demás derechos para después tener la licencia de exigirlos. Y sobre todo, no podemos permanecer pasivos cuando hay tanto por hacer.

Natalia Villaseñor Urrea

ECOS DEL DEBATE

¿Actualmente es eficaz la Comisión Nacional de los Derechos Humanos?

“Considero que en la medida de sus posibilidades hacen lo correcto. Son constantes las conferencias, cursos y diplomados que otorga  en distintos espacios, y recientemente impartió una capacitación exclusiva para servidores públicos. Al final la tarea nos atañe a todos como sociedad, pues si exigimos nuestros derechos, debemos empezar por respetar los de los demás”.

Mariel Matlalcóatl, participante de Mar Adentro.

“La labor que debe realizar es muy compleja. Desafortunadamente existe quien, a la luz de los derechos humanos, viola los derechos de otros, y se generan casos en donde resulta difícil defender a quien ha cometido agresiones inhumanas”.

Raúl Zermeño, participante de Mar Adentro.

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De viva voz, los líderes sociales comparten algunas de sus experiencias

México, un país de contrastes: Daniel Zapico

A pesar de dirigir en México una de las organizaciones de defensa de los Derechos Humanos más grandes del mundo, Daniel no se cree experto en la materia. Ni él ni gran parte de su equipo, a quienes simplemente define como “un conjunto de ciudadanos y ciudadanas que participan activamente en la defensa de los derechos humanos.”

Amnistía Internacional ha trabajado en México prácticamente desde su inicio, en los años 60, y para la organización nuestro país representa un mosaico de avances y retrocesos. México, dice Daniel, es un país muy complejo. Por un lado ha sido ejemplo de conquistas en la materia a nivel internacional. La Ciudad de México fue una de las primeras ciudades en el mundo en legalizar el matrimonio igualitario, y nuestro país  influyó de manera importante en la firma del tratado internacional sobre el comercio de armas. Pero, por otro lado, es de los pocos países que aún tienen presos de conciencia: personas encarceladas sólo por sus ideas, además de que fenómenos violentos como la tortura, que parecían aparénteme erradicados, están regresando con fuerza.

“Es difícil establecer un criterio para saber qué derecho humano es el más urgente de atender en México, pues aunque la violencia se ha llevado toda la atención en los últimos años, aún tenemos problemas muy arraigados como la pobreza, que está relacionada con los derechos económicos y sociales, y la discriminación a las comunidades indígenas y a las mujeres, que siguen siendo temas críticos y pendientes”, explica al respecto de la situación de los mexicanos.

La aportación de organizaciones como Amnistía consiste en hacer visibles éstas y otras problemáticas y el triunfo está en que cada vez más personas son conscientes de la realidad y que los gobiernos ya no pueden, como antes, ignorar las recomendaciones y denuncias que hacen los organismos sociales.

Amnistía forma parte de un movimiento de conciencia que cuenta con más de tres millones de miembros y simpatizantes en todo el mundo, pues, como dice Daniel, en temas de derechos humanos lo importante es que la comunidad internacional se mantenga alerta y reaccione, sin importar las diferencias culturales de los países que vivan la crisis.

“La intervención internacional en un país que atenta contra los derechos humanos reduce su soberanía, en la medida que reduce las arbitrariedades que los gobiernos puedan realizar, aunque hay que tener claro que no por ello impone un modelo económico o político determinado, lo importante es la protección de las personas.”

La comunidad internacional no puede asistir como simple espectador a los crímenes cometidos en contra de la Humanidad, sólo por guardar ciertos intereses con el país en entredicho o por presunto respeto a su soberanía. Las intervenciones deben ser graduales, confiables y pacíficas, sólo así podrán evitarse horrores como los cometidos en Ruanda e incluso en Siria, conflicto en el cual, Amnistía ha recomendado por mucho tiempo la intervención de otros gobiernos.

Nuevos retos se nos presentarán en cualquier momento. Para Daniel no falta mucho para que los temas del impacto al medio ambiente y el uso de la tecnología deban ser incluidos en una nueva agenda de derechos, lo que incluso podría llevarnos a replantear debates de hace más de 200 años como la privacidad en nuestras formas de comunicación.

“Aunque la responsabilidad última de proteger los derechos humanos recae en los gobiernos, porque son quienes están obligados a ello, como sociedad civil tenemos que entender una cosa: sin nuestra movilización, participación y exigencia, muchas obligaciones de los gobiernos no se van a cumplir”, dice a propósito de la falta de personas comprometidas con la defensa de los derechos de todos.

Los  niveles de involucramiento y participación son distintos, desde la congruencia con que llevamos nuestras relaciones personales cada día, hasta la implicación en organizaciones, firmando peticiones electrónicas, colaborando como voluntario o haciendo donativos.

“Difícilmente vamos a tener un mundo sin discriminación si en nuestro día a día discriminamos, o un mundo igualitario entre hombres y mujeres si nosotros reproducimos actitudes sexistas”,

No importa qué nivel de participación se elija: todos debemos actuar. Una vez alguien cuestionó al equipo de Amnistía por qué se arriesgaban en participar en acciones que a veces han tomado 20 años en dar frutos, como es el caso del tratado internacional de armas; uno de los miembros respondió con lo que quizá resuma el objetivo de la organización: “Con tantos problemas e injusticias a nuestro alrededor, la pregunta es: ¿tú por qué no estás haciendo nada?”

PERFIL

Daniel Zapico

Daniel Zapico es un activista social que actualmente coordina las movilizaciones e impacto de Amnistía Internacional en nuestro país. Aunque ha tenido también la oportunidad de colaborar en instituciones gubernamentales y de iniciativa privada, asegura que el ámbito social es, en este momento, una excelente plataforma de acción.

VOLUNTADES

Historias de éxito que trascienden

Rigoberta Menchú Tum, una vida de lucha constante

Rigoberta Menchú nació dentro del grupo indígena denominado maya quiché en Guatemala, y desde muy chica conoció las injusticias, la discriminación y la explotación que sufren los indígenas en ese país y en el mundo entero.

Las pésimas condiciones en que empezó a trabajar desde los cinco años en una finca de café, ocasionaron la muerte de sus hermanos. Además su padre, junto con otras 36 personas, fue quemado vivo por la Policía Nacional por defender sus derechos, en lo que se conoce como la Masacre de la Embajada Española.

Cuando recrudeció la violencia en Guatemala por la guerra civil, Rigoberta se exilió en México y empezó su lucha por la justicia social y el respeto a los pueblos indígenas. En 1979 fue miembro fundadora del Comité de Unidad Campesina y de la Representación Unitaria de la Oposición Guatemalteca, organizaciones que dirigió y en las cuales enfocó su trabajo a defender los derechos humanos.

Gracias a su ardua tarea le fue otorgado el Premio Príncipe de Asturias de Cooperación Internacional en 1998 y el Premio Nobel de la Paz en 1992. Con los fondos que recibió, estableció la fundación Rigoberta Menchú Tum con sede en Guatemala, además estableció una filial en México y otra en Nueva York, desde las cuales sigue luchando para que cualquier persona, sin importar en qué país, etnia o condición económica nazca, tenga derecho a llevar una vida plena y feliz.

10 NOTAS POSITIVAS

1. Ocho países presentan por primera vez un plan contra el tráfico ilegal del marfil.

2. Rinden homenaje a Carlos Fuentes en Nicaragua.

3. Se conmemora el Día Internacional de los Museos.

4. Se conmemora el Día Mundial de Internet.

5. Inauguran en el Estado de México la fábrica de café más grande del mundo.

6. El PIB de México crece 0.8% durante el primer trimestre del año.

7. El clavadista mexicano Yahel Castillo obtiene medalla de oro en la Serie Mundial de  Clavados en Guadalajara.

8. Los clavadistas tapatíos Germán e Iván ganan medalla de oro en sincronizados durante la Serie Mundial de Clavados en Guadalajara.

9. Zapopan agrega a más de dos mil familias al programa Oportunidades.

10. Tlaquepaque realiza reforestaciones previas al temporal.

Mar Adentro Propone

Para  leer…

El Compendio de Derechos Humanos de Gonzalo Afanador es una recopilación de los más importantes documentos sobre derechos humanos de la historia, desde la Declaración de Independencia de los Estados Unidos de América, hasta la Declaración Universal de Derechos promulgada por la ONU.

Para  saber…  

A pesar del riesgo que implica, cada vez son más las personas que se dedican a defender los derechos humanos en nuestro país. Según la CNDH, mientras que en 1990 se tenían registradas sólo 200 organizaciones con ese propósito, hoy son cerca de  170 mil 012 las que realizan trabajos en la materia.

Para conocer…

Acude a la Alianza Francesa de Guadalajara, Centro Providencia, y conoce la exposición del fotógrafo francés Romain Thieriot, quien a través de una serie de fotografías de la vida cotidiana, crea un puente ente la cultura francesa y la mexicana para demostrar que, sin importar la cultura, todos somos humanos.