Los Panamericanos, en boca de todos

GUADALAJARA, JALISCO (29/OCT/2011).- Todo lo que inicia llega a su fin. Por tanto, en breve los Juegos Panamericanos llegarán a su conclusión. Aunque los tapatíos extrañaremos la conmoción que sacudió a la ciudad estas últimas dos semanas, vale la pena reconocer que los Juegos dejarán un gran legado para Guadalajara, para Jalisco y para México en general.

Nos quedamos con la enorme satisfacción de haber visto a nuestros deportistas triunfar en las distintas disciplinas, nos quedamos con medallas de oro, plata y bronce que materializan el talento de los mexicanos, y con la resonancia del himno nacional que llenó tantos momentos de ensimismada emoción.

Aunque el aprendizaje que deja el evento empieza por reconocer los desaciertos del mismo, éste comprobó que Guadalajara es una ciudad próspera, dinámica, capaz de crecer y cambiar. Asimismo, se hizo evidente que México es un país volátil, lleno de fuego y energía, parte de nuestra herencia prehispánica, que enciende antorchas y espíritus. La efervescencia de los Juegos también nos recordó la verdadera esencia de los mexicanos: un pueblo alegre, entusiasta y hospitalario. Comprendimos que aunque en ocasiones subestimamos nuestra capacidad, somos un país con talento y con un enorme potencial por explotar aún.

Los Panamericanos están en boca de todos porque han llenado de color la ciudad y reencendido el corazón de los mexicanos; sin embargo, depende de nosotros multiplicar la herencia que deja este gran evento. Es decir, aunque la emoción de los Juegos se extinga tras la clausura, adoptemos el deporte y la competencia sana como parte de nuestra cultura, llenemos de vida las instalaciones deportivas, embellezcamos nuestra ciudad aunque no se encuentre bajo la mirada de la comunidad internacional, hagamos más eficiente nuestro servicio de transporte y recuperemos los espacios públicos a pesar de que todo haya vuelto a la normalidad.

México comprobó que puede ser el orgulloso anfitrión de 42 países si nos proponemos unirnos en una sola afición. Las 50 mil luces de colores que encendieron la ceremonia de inauguración sólo servirán como una analogía de la belleza que podemos crear cuando trabajamos juntos. Un México construido con base en esfuerzos individuales puede ser fuerte, pero un México erguido sobre una colectividad es invencible.

Ignacio Colín Bracamontes

FRASE

''La excelencia no es un acto, sino un hábito ''

Aristóteles.


10 notas positivas

1. Se celebran los XVI Juegos Panamericanos en la ciudad de Guadalajara.

2. El Teatro Degollado se viste de gala con el espectáculo del ballet “Estampas Panamericanas”.

3. Proponen transporte escolar como alternativa al tráfico.

4. Se celebra la XXI Cumbre Iberoamericana en Asunción, Paraguay.

5. Exhibirá Museo de Arte de San Diego obra de artistas mexicanos.

6. Leonard Cohen recibe el Premio Príncipe de Asturias de las Letras 2011.

7. Se anuncian los ganadores de los premios de Investigación Histórica 2011.

8. Coleccionista de arte francés subastará su patrimonio para apoyar a la Liga Contra el Cáncer.

9. Líderes europeos alcanzan acuerdo integral para enfrentar la crisis.

10. Llega Teatro Negro de Praga a México.

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Escucha de viva voz a los líderes sociales compartir, en una entrevista, algunas de sus experiencias

Guadalajara 2011
El legado de los Juegos

— ¿Qué aprendizaje le quedará a Guadalajara tras la realización de los XVI Juegos Panamericanos?

— Que podemos ser un pueblo fuerte, lo cual se demostró a través de la unión de todos los ciudadanos y de la hospitalidad de los tapatíos.

Que somos una ciudad con toda la capacidad a nivel mundial y que la verdad es un privilegio que estas competencias se hayan desarrollado aquí en Guadalajara porque enorgullece y pone en alto el nombre de la ciudad y de México.

Creo que el aprendizaje es que tenemos todo para estar como en un país del primer mundo, que hay talento, hay capacidad y que sí se pueden hacer las cosas.

Que las instalaciones deportivas que se construyeron o renovaron para este evento fomenten el deporte en la comunidad porque la obesidad es un gran problema y creo que el deporte es un excelente camino para empezar a cambiar nuestros hábitos y alejar a los jóvenes de la violencia y los vicios.

Que Guadalajara es capaz de ser el anfitrión de un evento de este nivel y que de igual manera, los ciudadanos están dispuestos a colaborar para que el evento sea un éxito.

Que lo que se busca se puede alcanzar, ya que estos Juegos Panamericanos son producto de un gran trabajo y preparación. Creo que como tapatíos vamos a aprender que el pueblo latino se puede sentir unido aunque sea por dos semanas muy puntuales, y también que toda fiesta tiene su precio.

Yo creo que vamos a aprender a ser más civiles y a respetar, esto se hace evidente desde nuestra conducta en el tráfico. Sí creo que el hecho de que éste sea un evento de primer mundo impulsa a la gente a comportarse de una manera distinta.

Que Guadalajara, y Jalisco en sí, tiene mucho talento pues los atletas jaliscienses han tenido una brillante participación. Jalisco ya es un referente a nivel nacional e internacional.

Yo creo que los Juegos Panamericanos van a impactar más que nada en la cultura deportiva, al promover una competencia sana y aprender que se debe respetar y dejar atrás las posibles diferencias que tenemos como personas o como cultura, ya que en el deporte todos estamos en las mismas posibilidades.

Yo creo que más que aprender recordamos lo que verdaderamente es México. Últimamente la situación del país nos ha hecho cambiar la idea que tenemos respecto a nuestro país y nuestra gente. Sin embargo, eventos como estos nos recuerdan la alegría y el entusiasmo que caracteriza al pueblo mexicano.

Guadalajara ya ha aprendido mucho de los Juegos Panamericanos, pero yo creo que el aprendizaje más importante todavía está por venir. Es decir, le quedan a la ciudad instalaciones hermosas y una sociedad animada, creo que en la medida en que se aprovechen estos elementos se presentará un gran desarrollo para la ciudad.

Que la competencia no sólo se da con el otro sino que empieza con uno mismo. Creo que debemos aprender a ser más disciplinados, perseverantes e iniciar la batalla contra nuestros miedos.

Yo he disfrutado muchísimo de estos Juegos con mi familia, y en particular con mis hijos. Yo creo que después de este evento todos los tapatíos debemos recordar que el deporte es un medio increíble para reforzar las relaciones familiares y promover la convivencia con nuestros hijos.

Que debemos promover más el deporte entre nuestra sociedad, nuestra familia y nuestros hijos. Creo que los Juegos Panamericanos nos motivaron para empezar a hacer más deporte y nos dejan instalaciones hermosas para practicarlo.

Yo como tapatío me di cuenta de que vivo en una ciudad hermosa que muchas veces no valoro. Ahora que la vi “vestida de gala” creo que todos los ciudadanos nos deberíamos involucrar más en el cuidado de nuestra Guadalajara.

Que somos muy dados a no creer en nosotros, pero que si nos proponemos triunfar lo conseguimos.

Que los mexicanos tenemos un potencial enorme aunque que muchas veces lo subestimamos. Yo creo que los Juegos fueron una prueba con nosotros mismos para demostrar que podemos estar al nivel de competir con el mundo.

Yo creo que como tapatíos, y como mexicanos en general, debemos aprender a trabajar en equipo. Sin lugar a dudas el deporte nos enseña a trabajar juntos y recordar que la suma de las voluntades siempre tiene más fuerza que un esfuerzo individual. Creo que debemos adoptar este aprendizaje y aplicarlo en todas las esferas de nuestra vida.

De estos Juegos Panamericanos yo en lo personal aprendí que hay muchísimos deportes y muchísimas disciplinas que no sabía que existían. Sin embargo, el tener todos estos eventos sucediendo en la ciudad me motivaron a conocerlos e informarme respecto a cómo funcionan. Espero que esto le haya pasado a muchos tapatíos más.

El evento salió muy bien, pero creo que a partir de esta experiencia podemos aprender a planear mejor las cosas y organizarnos con tiempo.

Que México es un país alegre y hospitalario. Creo que la gente que vino de otros estados o de otros países se fueron con una excelente impresión de la ciudad y eso, aunque deja una sensación muy bonita, también deja un compromiso por mantener el nivel que reflejamos.

Yo creo que lo mas importante es el rescate de una mexicanidad digna. En segundo lugar, le quedan a la ciudad unas instalaciones deportivas en donde va a florecer mucho el deporte y, en tercero, creo que para los niños vivir un evento de esta magnitud les queda como un aprendizaje de vida. También considero que a todos los voluntarios les queda un aprendizaje de organización, de sistemas y de ponerse la camiseta al sentirse orgullosos de participar en algo que está valiendo la pena. A las autoridades espero que les quede claro que no hay mejor inversión que limpiar sus espacios públicos, la gente por primera vez está agradecida, no sólo por los Juegos sino porque se está dignificando la ciudad.

Yo creo que el principal aprendizaje es que, aunque vengamos de distintos países y por lo tanto tengamos culturas que contrastan, finalmente todos nos emocionamos igual con una medalla y nos enorgullecemos con escuchar el himno de nuestro país. A veces sólo nos concentramos en cómo somos diferentes, pero se nos olvida que finalmente compartimos mucho más de lo que nos separa.

Voluntades
Historias de éxito que trascienden

Paola Longoria
El oro se queda en México

Sin lugar a dudas, los XVI Juegos Panamericanos dejan un gran legado para México y en éste se destaca la participación de atletas cuyo esfuerzo puso en alto el nombre del país. Paola Longoria bañó de oro el territorio nacional con su excepcional talento para el ráquetbol. Con tan solo 22 años, Paola se ha convertido en una de las más sobresalientes atletas mexicanas; sin embargo, su trayectoria es producto de una vida de entrega y disciplina.

Longoria nació el 20 de julio de 1989 en San Luis Potosí. La potosina empezó a jugar ráquetbol cuando tenía ocho años, denotando una excepcional habilidad desde entonces. Dos años después consiguió el tercer lugar en el Campeonato Mundial en Los Ángeles, éxito que apenas representaba el inicio de una carrera de victoria.

Paola ha sido campeona nacional y centroamericana; no obstante, la deportista mexicana también ha tenido una muy destacada participación en campeonatos mundiales. Su brillante desempeño la llevó a ser galardonada con el Premio Estatal del Deporte 2006 por el Gobierno del Estado de San Luis Potosí, y en 2008 fue designada como Deportista del Año por el Círculo de Cronistas Deportivos de Tijuana.

El éxito de Paola parece multiplicarse con el tiempo, ya que en 2009 fue merecedora del oro en los Juegos Mundiales de Taiwán. Un año después fue reconocida con el Premio Nacional del Deporte 2010, por ser la primera mexicana en ganar un torneo del Tour Profesional de Ráquetbol y por ser la primera en clasificar como la número uno en el ranking mundial por dos años consecutivos en la especialidad.

El talento de esta joven deportista mexicana se hizo evidente en los XVI Juegos Panamericanos realizados en Guadalajara al conseguir que tres oros se quedaran en el territorio nacional y exaltaran el corazón de México.


Mar Adentro propone: Construyamos juntos el legado de los Juegos Panamericanos en Guadalajara


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