No a la discriminación

GUADALAJARA, JALISCO (22/JUN/2013).- En la historia de casi todos los pueblos del mundo podemos encontrar episodios de violencia injustificada y discriminación hacia grupos específicos de la sociedad. Aunque parezca increíble, países como el nuestro siguen padeciendo profundos niveles de discriminación hacia los indígenas, los migrantes y las mujeres, demostrando que a pesar del avance científico, económico o tecnológico, hay áreas en las que el ser humano no ha podido evolucionar.

La discriminación, entendida como la creencia de que algunas personas son superiores a otras por cuestiones de raza, color de piel, preferencia sexual o religiosa y hasta condición económica, ocasiona dolorosos episodios en la vida diaria de las personas que no pidieron nacer en determinada condición social.

El tema va ganando terreno en foros de discusión académica, en movimientos sociales y hasta legislaciones internacionales de defensa de los Derechos Humanos. Aunque es un gran avance darle visibilidad y la mayor protección jurídica posible, la realidad es que ninguna de estas acciones nos garantiza un cambio real ni inmediato.

Así como el surgimiento de la discriminación se gestó por siglos en el subconsciente de la sociedad, de igual manera el reto ahora es revertir el proceso y conseguir que, más allá de las acciones coercitivas impulsadas por leyes o consejos de defensa, las acciones diarias de los ciudadanos de a pie reflejen un verdadero sentido de equidad.

Esa es la tarea del Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación en nuestro país que actualmente preside Ricardo Bucio: luchar en contra de la normalización del fenómeno y educar a la población para mitigar los daños que ocasiona.

Lograr que desaparezca la naturalidad con que se desprecia a un niño indígena, se obstruyen los accesos para una persona en silla de ruedas, se niegan los derechos laborales de una trabajadora del hogar o se profesan burlas en contra de las personas homosexuales, son, por ejemplo, acciones concretas en las que aún falta mucho por lograr.

Sin duda es necesaria la creación continua de instituciones públicas y privadas que promuevan la igualdad y no discriminación, aunque la tarea más grande, como en todo lo que hay que cambiarle a este país –que es tanto- la tenemos cada uno de nosotros. Hasta que nuestros actos en lo individual hablen de lo que queremos para el país, el país hablará de quiénes somos nosotros.

Judith Hermosillo Lozano

ECOS DEL DEBATE

La existencia de un consejo nacional y marco legislativo para prevenir la discriminación, son señales de que existe en México la cultura de la tolerancia

El mundo evoluciona y con él nuestro país, cada vez hay mayor impulso a la cultura de tolerancia y respeto entre distintas personas, incluso en el marco legal y empresarial. Como en todo, aún hay mucho por hacer, pero si se dan pasos firmes se lograrán verdaderos avances, por eso es importante que el marco legal sustente cualquier propuesta.

Héctor Ríos, participante de Mar Adentro.

La existencia de la cultura tolerante es inversamente proporcional a la necesidad de crear leyes y consejos que prevengan la discriminación; aunque ante la cultura que existe en México se debe actuar a la inversa: crear leyes para propiciar la tolerancia a grupos vulnerables —que ni siquiera deberían ser llamados así— que es lo que el Conapred busca. A raíz de nuestra intolerancia, sin importar las razones de su existencia, es necesario un órgano nacional que busque erradicarla.

María José Alexander, participante de Mar Adentro.

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De viva voz, los líderes sociales comparten algunas de sus experiencias

Educar para la no discriminación

Ricardo Bucio se enfrentó con la desigualdad desde que era joven. En la edad universitaria vivió por pequeñas temporadas en algunas comunidades indígenas, además de colaborar en instituciones de apoyo para personas con discapacidad y jóvenes presos.

Su relación con estas realidades lo llevó a interesarse por el tema de la igualdad. Hoy, después de años de estudio al respecto, asegura que la sociedad ha creado mecanismos formales y estructurales para dejar en desventaja a ciertos grupos de población, especialmente en México.

Históricamente ha sido así. Para Ricardo se debe, por un lado al hecho de que durante la conquista los grupos indígenas, que eran similares entre sí, debieron luchar y crearon rivalidades que todavía hoy nos alcanzan. De igual forma, los 300 años que vivió México bajo el régimen colonial, impidió que el proceso de cultura democrática iniciara y se afianzara, cuestión que también ha dejado una huella en los conceptos de igualdad y clasismo.

La buena noticia es que esta condición es sólo un aprendizaje social, no forma parte del ADN humano y por lo tanto es posible erradicarla. Como en tantos temas, la situación mexicana al respecto de la discriminación es muy paradójica, pues, por un lado, se les da suma importancia a las relaciones interpersonales cercanas: a la familia, vecinos, amigos, etc., pero en la medida que crece el círculo social de la persona, los procesos de discriminación se hacen más evidentes.

“México es uno de los pocos países donde la legislación contra la discriminación ha crecido en los últimos  años y eso es un avance. Hemos creado instituciones y políticas para combatirla y hacerla visible. Pero todavía tenemos mecanismos de reproducción social para invisibilizar a ciertas poblaciones, lo que nos deja, por ejemplo, con una decena de leyes para proteger a las mujeres pero ningún cambio en la perspectiva machista”, explica.

En este mosaico de circunstancias la educación juega un papel muy importante. Por desgracia, según Ricardo, la educación  no nos forma para conocer y mucho menos para aceptar la diversidad humana. Y aunque cada generación entiende el tema de forma distinta, hoy los jóvenes todavía defienden arraigados sentimientos de discriminación. Si bien aceptan la diversidad religiosa y sexual con mayor facilidad, son el grupo de población que más legitima la violencia en la pareja y el rechazo a los migrantes.

Los jóvenes no son, por lo tanto, el sector más tolerante de la población mexicana pero es el que más posibilidad tiene de serlo. Si aprendemos de experiencias internacionales como la de los países nórdicos, iniciar un proceso de construcción de cultura igualitaria, permitiría observar cambios sustantivos en sólo dos generaciones.

Este proceso, como cualquiera que implique la búsqueda de una mejoría en la condición de un país, debe pasar por las instituciones del Estado. Las sociedades más auto reguladas, dice Ricardo, son también las que tienen mejores legislaciones, de ahí la importancia de seguir impulsando un marco legislativo que defienda la igualdad.

Pero, más allá de los formalismos institucionales, es urgente entender a la tolerancia como una condición de vida a la que todos debemos aspirar.

“Ser tolerante implica aceptar que no es necesario ni posible que todas las personas estemos de acuerdo con todas las expresiones, condiciones, preferencias, opiniones y formas de ser, además de tener mecanismos de contención, en lo individual y colectivo, que impidan la injerencia negativa hacia aquellos con quienes no coincidimos”, explica.

La mejor forma que existe para adoptar este pensamiento es, por un lado, tomar en cuenta que en términos de diversidad humana no existen los absolutos y que por lo tanto no hay nada que sea completamente bueno ni completamente malo, y cuestionarnos en cada momento si el trato que les damos a otras personas, las miradas y el tipo de relación que les ofrecemos, son los que nos gustaría recibir. “Cuando nosotros somos el parámetro, normalmente encontramos el punto adecuado para un trato respetuoso”, confirma.

PERFIL

Ricardo Bucio Mujica

Ricardo Bucio preside actualmente el Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación, pero ha trabajado de cerca con diversas Organizaciones de la Sociedad Civil por más de 25 años. Es licenciado en Ciencias Políticas y Administración Pública por la Universidad Iberoamericana.

VOLUNTADES

Historias de éxito que trascienden

Rosa Parks: una vida de lucha en contra del racismo

En 1955, cuando Rosa Parks tenía 42 años, volvía a casa después de su jornada como costurera en el sur de Estados Unidos. Según las leyes americanas de ese tiempo, los negros debían sentarse en la parte trasera de los autobuses y ceder su lugar en caso de que algún blanco abordara el transporte. Sin embargo, Rosa Parks, en un acto de valentía y dignidad, se negó a ceder su asiento a un joven americano.

Cuando el chófer del autobús trató de convencerla para que obedeciera la ley, ella respondió que no lo haría porque estaba cansada. Rosa no se refería al cansancio físico que le impidiera estar de pie, sino al cansancio emocional de vivir relegada sólo por el color de su piel.

Debido a su acto, considerado como disturbio público, Rosa Parks fue arrestada y su caso se hizo tan popular que se le considera iniciadora del movimiento civil de defensa a los derechos de las personas de color en Estados Unidos.

Al salir del arresto inició una intensa carrera como activista social y gracias a su trabajo, junto con las miles de expresiones de solidaridad y de desesperación de quienes vivían en una situación similar a la suya,  la Corte Suprema de Estados Unidos declaró iguales a todos los individuos de la nación, finalizando un violento periodo de clasismo.

Rosa Parks recibió en vida el Premio Martin Luther King Jr., la medalla Spingman y la Congressional Gold Medal por su aportación a la defensa de los derechos de los negros en Estados Unidos. Al morir, en octubre del 2005, sus restos fueron honrados en la Rotonda del Capitolio, convirtiéndose en la primera mujer afroamericana en recibir este honor.

10 NOTAS POSITIVAS

1. Se generaron seis mil 929 empleos en mayo: IMSS.

2. Tlaquepaque ofrecerá curso para emprendedores el próximo 25 de junio.

3. México anuncia acuerdo para exportar tequila y cerdo a China.

4. Según el banco australiano y Chesapeake Gold México tendrá un alza de 106.1% en la producción de oro, durante la próxima década.

5. Hospital en Boston trasplantará manos a niños.

6. Aceptan 178 países acuerdo internacional de protección de especies.

7. Hallan extensa urbe maya en las selvas de Campeche.

8. Descubren restos de una ciudad antigua cerca del Río Nilo.

9. Una misión española consiguió abrir una cámara intacta de más de cuatro mil  años, en uno de los cementerios privados más importantes de Egipto.

10. Ballet Folclórico de la UdeG regresa al Degollado.

Mar Adentro Propone

Para  leer…

> María del Carmen compila en el libro ''Pobreza, exclusión social y discriminación étnico- racial en América Latina y el Caribe'', una visión general de la situación de los grupos vulnerables en países como México, Ecuador, Colombia, Brasil, Guatemala, El Salvador, Bolivia, Cuba y Argentina.

Saber más…  

> De acuerdo con la Encuesta Nacional Sobre Discriminación (Enadis) 2010, a medida que aumenta la escolaridad de los mexicanos, aumentan los niveles de expresión de tolerancia hacia los diferentes grupos.

Conocer más…

> No te pierdas este domingo en el Cineforo de la Universidad de Guadalajara la película Calle López de Gerardo Barroso y Lisa Tillinger, donde se aprecia la diversidad de clases sociales que conviven en una misma calle en la Ciudad de México.