Empresarios exigen a Calderón despachar desde Juárez

CIUDAD JUÁREZ, CHIHUAHUA.- A cinco días de la masacre de jóvenes en una fiesta estudiantil, empresarios exigieron al Presidente Felipe Calderón que asuma el control de esta frontera “gobernando desde aquí”, en un intento para detener la ola de inseguridad que enluta a Ciudad Juárez.

Manuel Ortega Fernández, presidente del Consejo Coordinador Empresarial de Ciudad Juárez (CCECJ), dijo que los juarenses están hartos de la violencia y pidió que se considere un “estado de excepción” y que sea el propio Calderón quien despache desde esta ciudad fronteriza.

En tanto, organismos civiles se opusieron a la petición de que se envíen cascos azules —militares de la ONU— a reforzar las labores de seguridad, al afirmar que no es con fuerza como debe resolverse la violencia.

Representantes de la Comisión de Solidaridad y Derechos Humanos de Chihuahua (Cosydhac), del Observatorio Juarense de Seguridad Pública y Seguridad Social y del Comité Médico contra la Violencia rechazaron la presunta aprobación formulada, en la Ciudad de México, para pedir que cascos azules arriben a la ciudad.

La presencia de los casos azules complicaría la situación actual; “no se resuelve con la fuerza, necesitamos restituir el tejido social”, dijo Emilia González, de la asociación Cosydhac.

Hugo Almada Mireles, del Observatorio Juarense de Seguridad Pública, aseguró que fue sorpresivo el anuncio de algunos representantes de los sectores sociales de Juárez sobre la petición de cascos azules. Dijo que esa solicitud no fue consensuada.

“Nunca se mencionó en alguna reunión que se iba a pedir la presencia de los cascos azules”, repitió la directora del Comité Médico contra la Violencia, Leticia Chavarría.

Participará la sociedad

Por su parte, el Presidente Felipe Calderón afirmó que la nueva estrategia de seguridad en Ciudad Juárez, que incluye un plan integral, no se impondrá desde el centro, sino que se dialogará con la sociedad.

Las medidas integrales “las queremos proponer a la sociedad juarense, porque tenemos, sí, un plan y una estrategia pero no queremos imponerla desde el centro sino que queremos proponerla y dialogarla a la sociedad juarense e implementarla de la mano con los juarenses, porque queremos atacar la inseguridad de raíz”.

Ratificó que no basta con fortalecer con armamento a las policías, ni basta el despliegue federal, “sino que es indispensable recomponer aquellos elementos sociales que nos ayuden a disminuir y a prevenir el delito”.

Por ello, insistió en implementar más programas sociales, rescatando espacios públicos para la convivencia.

Avance de las investigaciones

36 sicarios perpetraron la matanza  

Al menos 36 sicarios de la organización criminal “La Línea” participaron en la masacre del fraccionamiento Villas de Salvarcar de Ciudad Juárez la noche del sábado 30 de enero, donde murieron 15 personas, entre ellas varios adolescentes, reveló el único detenido hasta el momento por participar presuntamente en los hechos, José Dolores Arroyo Chavarría.  

Lo anterior se desprende de los avances de la investigación dados a conocer ayer por la Operación Coordinada Chihuahua, según los cuales la masacre fue ordenada por un sujeto apodado “El Diego” o “El 10”, apoyado en dos de sus lugartenientes: “El 51” y “El 12” o “El Rama”, quien habría muerto en un tiroteo con elementos del Ejército el pasado 1 de febrero, donde también fue capturado Arroyo Chavarría. 


Hay retratos hablados

El vocero del Operativo Chihuahua, Enrique Torres Valadez, reveló que ya cuentan con seis retratos hablados de los presuntos autores de la masacre de los 16 jóvenes. Torres Valadez negó que las investigaciones se realicen con base en el testimonio de un sólo detenido.

Quién es quien “Artistas Asesinos”  

Es una pandilla ligada al cártel de Sinaloa, que encabeza Joaquín “El Chapo” Guzmán. Este grupo, aparentemente, fue el culpable de la matanza de 18 personas en el centro de rehabilitación “Aliviane” y de 10 personas en “Anexo de Vida”.

Hace dos años se unieron con la pandilla “Los Mexicles” para hacer frente a “Los Aztecas”. De acuerdo con “El Diario”, de Ciudad Juárez, desde hace 20 años, los “Artistas Asesinos” pelean contra “Los Aztecas” por el control de la plaza. Incluso el año pasado estas dos bandas protagonizaron al menos dos riñas contra “Los Aztecas” en el Cereso de Ciudad Juárez. 


“Los Aztecas”

Es la pandilla rival, está ligada a “La Línea”, brazo ejecutor del cártel de Juárez. Su líder es “El 10” o “El Diego”,  quien aparentemente ordenó la matanza. El pistolero Adrián Ramírez, conocido como “El 12” o “El Rama” y líder material de la balacera, fue muerto en un enfrentamiento con elementos del Ejército el pasado lunes.  

 “Los Aztecas” controlan a los narcomenudistas de Juárez y El Paso, a quienes venden drogas sin su consentimiento les fracturan el brazo con un bat y a los que no quieren pagar el “permiso”, los matan.  


Emboscada o plataforma


A la memoria de Cecilia Loría
“En esta ciudad, a todo se le da respuesta policiaca”, me dijo en 2004, en Juárez, Ángel Estrada, del Movimiento Ciudadano Pacto por la Cultura. La imaginación política reducida a patrullas, balas, represión. Eso retrata la falta de lente para mirar completo el tamaño del desafío. Anticipa la emboscada, el callejón sin salida de la violencia.  

Se nos olvida que no es lo mismo cantar el Himno Nacional en el viejo Paso del Norte que hacerlo desde una ciudad del Bajío. Allá están el desierto, las maquiladoras y la proximidad de Texas, con su demanda de droga y su exportación de armas.  

Se exige desde el Congreso federal otro abordaje para enfrentar al narco. El mismo Congreso reconoció y animó, legislaturas atrás, con sus comisiones especiales, el abordaje integral de la Comisión para Prevenir y Erradicar la Violencia contra las Mujeres en Ciudad Juárez en el tema del feminicidio.  

Esta instancia federal involucró a los gobiernos locales y caminó con la sociedad civil. No partió de cero. La Sedesol de Josefina Vázquez Mota se anticipó; Indesol, capitaneada por Cecilia Loría, inició el desagravio a la sociedad juarense sumándose a fortalecer a sus organizaciones.  

Se generaron indicadores de marginalidad, inseguridad, violencia de género, desarrollo urbano.

  El Programa Hábitat construyó cerca de 30 centros comunitarios. El de Oportunidades operó por primera vez en una zona urbana. Salud capacitó en detección temprana de violencia intrafamiliar; Sedena cuidó en su vivero más de cinco mil árboles para reforestar una vieja acequia; Seguridad Pública se sentó a la mesa con las familias de las víctimas.  

La cartografía satelital del INEGI fue aprovechada para poner en manos de los tres niveles de Gobierno información georreferenciada sobre violencia contra las mujeres.  

Se aprovecharon bases de datos académicas. ¿Cuántas, quiénes, dónde, cómo fueron asesinadas? Un tesoro para la toma de decisiones.

Se creó una orquesta sinfónica para niñas, niños y adolescentes de un barrio bravo. En vez de pistolas, cargaban violines. Sí se pudo y sí se puede ofrecer otro horizonte de futuro. Veinte jóvenes hicieron un diplomado en gestión sociocultural. Varios eran ex pandilleros, ex drogos. Crearon comunidad. Nos convirtieron a la esperanza. Había una fuerte red de organizaciones sociales. Varias trabajaban el tema de adicciones. Y una fundación del empresariado chihuahuense dispuesta a aportar para el desarrollo social: FECHAC. No era una estrategia de balas. Pero sí contra la impunidad. A favor del Estado constitucional de derecho. Del cumplimiento de pactos y convenciones de derechos humanos.

En lo policiaco caben muchos agujeros. O hay jefes derechos, plena coordinación entre instancias federales y los órdenes locales, y controles internos firmes, o por el hueco abierto se mete el enemigo en casa. En educar, en construir ciudadanía, hay una plataforma de futuro.

Se amarran nudos del tejido social. Se necesita al médico, al maestro, al cura, al pastor, al líder empresarial, al militante de la ONG haciendo lo suyo. Ese abordaje tarda en dar fruto. En ambos se requiere valentía y testimonio ético. Y luego está el valor de la justicia.

Sin ella, todo es como bordar sobre el agua. Investigar y sancionar a los responsables de la masacre, cualquiera, es la primera fórmula de reparación del daño.  

Guadalupe Morfín / ex fiscal especial para Delitos de Violencia contra las Mujeres y Trata de Personas.