Pese a ventaja, pide no confiarse

TOLUCA, ESTADO DE MÉXICO (28/JUN/2012).- Enrique Peña Nieto, candidato presidencial del PRI-PVEM, hizo uno de sus cierres de campaña presidencial en el Estado de México, Entidad que gobernó; ahí, llamó a sus simpatizantes “a redoblar el paso”, pues dijo que pese a estar adelante en todas las mediciones no pueden confiarse.

“Y así asegurar, con su participación libre, razonada, informada, con su voto, con su participación este 1 de julio, lograr realmente el triunfo contundente e inobjetable que queremos”.

El mexiquense estuvo primero con sus paisanos en Toluca y posteriormente en Monterrey; en esta última ciudad también convocó a todas las fuerzas políticas a asumir de manera madura, seria y responsable los resultados de la elección del próximo domingo.

Tras el cierre de campaña en su Estado natal, llamó a todos los partidos y sus candidatos presidenciales a trabajar juntos para revisar los temas urgentes que son los verdaderos enemigos de México: la inseguridad, la pobreza, la falta de crecimiento y empleo, entre otros.

Al término del evento en el Estado de México, el grupo Pesado ofreció un concierto a los miles de priístas que soportaron una temperatura de más de 30 grados.

Insistió en que es necesario no esperar más tiempo para sacar adelante a México e indicó que de ganar los comicios está en total disposición de colaborar con el Gobierno del Presidente Felipe Calderón.

En Monterrey estuvo acompañado por su esposa Angélica Rivera, el gobernador Rodrigo Medina, y los aspirantes a puestos de elección popular, y la secretaria general Cristina Díaz.

Tanto en Monterrey como en el Estado de México, agradeció a todos los mexicanos y a toda la gente que a través de los medios de comunicación, le permitieron llevar su propuesta política.

En la capital regia, Peña Nieto expresó su confianza en obtener el triunfo e hizo un llamado a sus contrincantes a actuar con madurez y responsabilidad, para aceptar el resultado de los comicios.

Insistió en que, de triunfar en los comicios, “no será escenario de derrota para otros”, por lo que buscará recoger las aportaciones de las distintas ideologías políticas para encontrar “un mejor camino” para los mexicanos.

“La nuestra es la propuesta del cambio con rumbo, con estabilidad, de cambio seguro, para llevar a México a mejores condiciones”, remarcó el abanderado de los partidos Revolucionario Institucional (PRI) y Verde Ecologista de México (PVEM).

En su discurso, hizo un repaso de sus compromisos para frenar el alza de productos alimenticios, bajar costo de tarifas eléctricas en zonas cálidas, seguro de vida para madres solteras, seguridad social para todos los mexicanos y la creación de un sistema universal de acceso real a la salud, así como los vales de medicina.

Indicó que a lo largo de su campaña su propuesta fue “propositiva y constructiva, no destructiva”, como la de otros candidatos presidenciales.

Investigación
Presunta compra

La Unidad de Fiscalización de los Recursos de los Partido Políticos del Instituto Federal Electoral envió a la FEPADE copia de la queja que presentó Acción Nacional sobre la presunta compra y reparto de monederos electrónicos del PRI. En el expediente se argumenta que la campaña presidencial de la coalición Compromiso por México, encabezada por Enrique Peña Nieto, habría comprado al grupo financiero Monex monederos electrónicos con un valor de 701 millones de pesos.

FRASES

"Yo espero que haya en todos los partidos políticos una actitud madura, seria y responsable para asumir plenamente el mandato de los mexicanos "

"Estos son los retos, las grandes metas a los que me voy a entregar en cuerpo y alma, con toda mi experiencia, con toda mi capacidad "

Enrique Peña Nieto, candidato presidencial del PRI.

Análisis
Cierres en tierra firme

Enrique Toussaint (periodista)

Una imagen vale más que mil encuestas. La fotografía de los cierres de campaña de los candidatos presidenciales ilustra su objetivo final: Enrique Peña Nieto culmina en el Norte que ha respaldado abrumadoramente su campaña; Andrés Manuel López Obrador busca en el Distrito Federal esa imagen de solidez, que ha perdido su campaña tras el segundo debate, y Vázquez Mota identifica en Guadalajara una metrópoli panista que está cerca de perderse y que constituye una reserva de votos insustituible para el blanquiazul.

En primer lugar, Andrés Manuel López Obrador decide no correr riesgos. La intención del candidato presidencial de la izquierda no es impactar en el votante capitalino (va ganando en el DF por 30 puntos, ya alcanzó su techo de voto), sino llenar el Zócalo y demostrar que las plazas muestran su “inexorable triunfo”, aun cuando las encuestas contradicen esta realidad. Las plazas llenas son el mensaje más efectivo para el votante de izquierda en este país, es un guiño y un espaldarazo a la estructura. El cierre en el DF es una señal de que la izquierda es competitiva y que el indeciso puede corroborarlo en las masas que se reúnen a despedir al candidato.

La jugada de Enrique Peña Nieto tampoco es riesgosa. Según Consulta Mitofsky, el priista lleva ventaja de 17 puntos en el Norte. El hecho de abrir en Guadalajara y cerrar en Monterrey, significa para el tricolor consolidar una candidatura de “vocación nacional”, dejando a sus competidores adscritos a ciertas zonas de influencia. De la misma manera, comenzar el día en Toluca también simboliza para Peña Nieto pisar las tierras más firmes de su candidatura, esa Entidad que el PRI ganó por 40 puntos en 2011.

Vázquez Mota corre más riesgos. Aunque también se suma a la lógica de privilegiar las regiones donde más eco ha tenido su candidatura, la panista sí viene por votos e incidencia local. Sin Jalisco, Vázquez Mota es una espectadora más, con nulas posibilidades de competir el domingo. Meter miles de panistas al Estadio de las Chivas constituye una vía eficaz de mandar un mensaje de fortaleza ante las posibilidades de que el partido del Gobierno caiga a una catastrófica tercera posición.

La suerte está echada, cada candidato privilegió un último mensaje nacional. Andrés Manuel opta por la calle y las plazas llenas; Peña Nieto por el mensaje nacional, la estabilidad y la aversión al riesgo; mientras que Josefina elige por afianzar un entorno que es clave en sus aspiraciones.