Prevenibles, las malformaciones por defectos al nacer

CIUDAD DE MÉXICO (12/SEP/2011).- De acuerdo con el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF), en México nacen dos millones de niños al año, entre ellos, aproximadamente 120 mil presentan algún tipo de malformación que provoca discapacidad.

Diario nacen entre nueve y 10 niños con defectos congénitos del tubo neural, que suscitan una serie de padecimientos del sistema nervioso central y afectan el cerebro y la médula espinal.

Estos defectos surgen debido a que la columna vertebral de los fetos no se cierra completamente durante el primer mes de embarazo y provocan enfermedades de alta discapacidad, como la espina bífida, la endefalocele (un defecto del cerebro), el labio leporino y el paladar hendido.

Datos revelados por el doctor José Antonio León Pérez —durante el Primer Congreso Internacional para la Prevención de la Discapacidad al Nacimiento, que se llevó a cabo en Cancún, Quintana Roo, en los primeros días de este mes— indican que la población mexicana podría tener un alto riesgo para el desarrollo de enfermedades asociadas a elevados niveles de homocisteína (un aminoácido que se produce dentro del cuerpo humano).

Prevención

La mayoría de los que tienen un nivel de homocisteína elevado no obtiene suficiente folato (también llamado ácido fólico), de ahí que el doctor León Pérez, vicepresidente de la Red Nacional para la Prevención de la Discapacidad (Renapred), y subdirector de Cirugía del Instituto Nacional de Pediatría (INP), recomiende el consumo del ácido fólico desde que los niños cumplen los 12 años de edad, hasta el final de la vida, para prevenir las enfermedades crónico degenerativas en mujeres y hombres (diabetes, cáncer de mama, cáncer cérvico uterino, cáncer de próstata y presión arterial, que pueden presentarse a lo largo de la vida).

“Los altos niveles de homociteína pueden corregirse en forma segura y económica con la administración de ácido fólico, una sustancia que puede prevenir hasta 70% estos efectos”.

Federico Núñez Perea, presidente de Renapred, comenta que los hombres son los responsables de los genes y contribuyen con la formación de la placenta, y si se desea que genes y placenta tengan alta calidad, pues se necesita de la vitamina B9, coloquialmente conocida como ácido fólico.

Expertos aseguran que aunque el ácido fólico puede encontrarse en determinados alimentos como frutas, vegetales y granos, es difícil obtener la cantidad necesaria de esta vitamina solamente de la ingesta de dichos productos.

“Por lo general la dieta común de muchas personas no aporta en ningún caso más de 200 microgramos, los especialistas recomiendan el uso diario de un complejo multivitamínico que contenga 400 microgramos de ácido fólico en su forma sintética (comprimidos), que es más sencilla de asimilar por el organismo que la vitamina en su forma natural.

Si lo amas, cuídalo…

Además, una vez que el bebé ha nacido deberá practicarse el tamiz neonatal, que es una prueba de alta precisión de la que se obtienen cinco gotas de sangre a través de una pequeña punción en el talón del pequeño.

Con esta prueba es posible conocer y tratar a tiempo padecimientos graves o irreversibles, como el hipotiroidismo congénito y finilcetonuria, que provoca retraso mental si no se trata a tiempo.

También se pueden detectar y tratar otras enfermedades como defectos neuromusculares, problemas cardiacos, deficiencias en el sistema inmunológico, deficiencias hepáticas y trastornos en la diferenciación sexual.

La Norma Oficial Mexicana establecida por la Secretaría de Salud, dice que el tamiz neonatal para el hipertiroidismo congénito es obligatorio y debe realizarse de modo rutinario y gratuito a todo recién nacido, por lo que según expertos es muy importante exigirlo.

Embarazos de 12 meses

Los médicos presentes en el Congreso Internacional para la Prevención de la Discapacidad al Nacimiento coinciden en recomendar lo que llaman embarazos de 12 meses. La idea es dedicar un periodo de tres meses antes del embarazo a evaluar la salud de la pareja y preparar su salud, para que el embrión tenga todo lo necesario y se desarrolle de manera adecuada.

El pasado 31 de agosto, Mariana Zorrilla, presidenta del Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF) de Quintana Roo, dio el banderazo para el lanzamiento de las Brigadas para la Prevención de la Discapacidad, “para que los futuros padres tengan las herramientas necesarias en cuanto a prevención, y así garantizar el derecho a nacer sano, reforzando e innovando los programas para evitar que los niños adquieran alguna discapacidad”.

Actualmente Renapred tiene cinco Brigadas de la Prevención en los estados de Veracruz, Guerrero, Michoacán, Oaxaca y Yucatán, y próximamente se lanzarán cuatro brigadas más en Nuevo León, Colima, Chiapas y Ciudad de México en el marco de lo que fue el primer Congreso Internacional para la Prevención de la Discapacidad al Nacimiento Renapred.

Afectaciones recurrentes

Otros de los temas relevantes abordados durante el Congreso Internacional para la Prevención de la Discapacidad al Nacimiento en Niños y Niñas Menores de Cinco Años, fue el de labio leporino y paladar hendido, consideradas las malformaciones más frecuentes e importantes de todas las afecciones de la cara, y uno de los defectos de nacimiento más frecuentes en el país.

Ambos padecimientos se desarrollan en la etapa temprana del embarazo, cuando los lados del labio y del paladar no se fusionan como deberían.

Tanto el labio leporino como el paladar hendido podrían suscitar ciertas discapacidades, como la pérdida auditiva por infecciones recurrentes y retardo en el habla, o habla anormal.

Entre el 2 y el 5 de septiembre de este año José Antonio León Pérez, en colaboración con un grupo multidisciplinario, realizó más de 60 operaciones a niños y niñas con labio leporino y paladar hendido, las cuales fueron coordinadas por la Secretaría de Salud de Quintana Roo, Renapred y la organización “Vida Maya Congresos Con Causa”, en los hospitales generales de Chetumal y de Cancún, además de una clínica privada de especialidades médicas.

Estimulación temprana

Gabriel Cortés Gallo, comisionado nacional del Seguro Popular, da a su vez relevancia al programa “yo quiero, yo puedo… darte pecho, jugar contigo y protegerte de la muerte de cuna”.

Estudios de la Comisión Nacional de Protección Social de la Salud revelan que sólo 38% de los bebés de entre cero y seis meses se beneficia de la lactancia materna exclusiva (no reciben fórmulas, ni alimentos sustitutos).

Para el especialista, las condiciones de salud y nutrición en los primeros años de vida están relacionadas de manera significativa con el desarrollo físico y cognitivo, y, además, los bebés deben dormir boca arriba.

Desde 1992 la Academia Americana de Pediatría indicó que la posición correcta para la salud de los bebés es acostarlos boca arriba. En México los pediatras más conscientes lo confirman y participan para que los niños duerman en esa posición.

Dormir a nuestros niños boca arriba puede prevenir la muerte de mil 500 bebés. La “muerte de cuna” no es algo “natural” sino absurdo, por ser tan evitable, concluye Salomón Chertorivski, recién nombrado secretario de Salud.