Puebla impedirá extorsión telefónica desde cárceles

PUEBLA (20/SEP/2010).- La titular de la Secretaría Técnica del consejo Estatal de Seguridad, María Lourdes Nares manifestó que con la finalidad de erradicar el delito de extorsión, a partir del siguiente año se instalarán inhibidores de señal para telefonía celular en las tres cárceles más importantes de Puebla.

Explicó que de acuerdo con un análisis realizado por la Secretaría de Seguridad Pública federal, la entidad no registra altos índices de chantajes telefónicos provenientes de los penales, sin embargo, la medida es necesaria como estrategia preventiva ante la ola de inseguridad que se aprecia en otros estados.  

Comentó que el sistema de bloqueo de llamadas se implementará en los Centros de Readaptación Social (Ceresos) de San Miguel, ubicado en la capital poblana, así como los edificados en los municipios de Tepexi de Rodríguez y Ciudad Serdán.

Estos fueron seleccionados tanto por el número de reos que albergan y por su ubicación geográfica, que los convierte en los más importantes pero también vulnerables al delito.

Recalcó que al momento no existe ninguna denuncia formal respecto a extorsiones provenientes de penales, lo que imposibilita la detección de presidarios que posiblemente operen desde la celda.

Señaló que el proyecto se formalizará en noviembre próximo al ser presentado ante los diferentes niveles de gobierno y dependencias de seguridad. Posteriormente, entre enero y febrero se adquirirán los equipos para los que se invertirán tres mil 900 dólares, calculando que cada uno cueste mil 300 dólares.  

“Lo ideal es antes no después, hay que ir a las causas no a los efectos, si estamos viendo que en otros lugares sucede y si nos estamos dando cuenta de que este tipo de llamadas o extorsiones o fortalecimiento de vínculos los facilita la telefonía celular, hay que actuar”, comentó la titular de la Secretaría Técnica del consejo Estatal de Seguridad.

Nares Rodríguez refirió que estos equipos no entran en las prioridades de la Secretaría de Seguridad Pública Federal (SSPF), quienes son los que etiquetan los recursos que se destinan en temas de seguridad en los estados, debido a que la inversión por cada equipo sería de mil 500 dólares y tan sólo en Puebla se necesitaran cuatro.

Confió en que el actual mandatario de Puebla, Mario Marín Torres firmará un convenio para formalizar la instalación de los inhibidores para teléfonos móviles de modo que el proyecto no se concreta en esta administración, para la entrante que encabezará el gobernador electo del estado, Rafael Moreno Valle esté comprometido en hacerlo.