Misión cumplida

En medio de un cúmulo de noticias negativas, que dan cuenta de la situación que vive el país a raíz de las crisis económica, de inseguridad y epidemiológica; informaciones de crímenes, “ejecuciones”, secuestros, enfrentamientos entre grupos criminales y de éstos con fuerzas de seguridad; accidentes como el incendio en la guardería de Hermosillo, de tan lamentables consecuencias; la sociedad preocupada por la aparición de virus como el de la influenza humana... En medio de todo, surge una noticia que contrasta y da felicidad: Jalisco obtiene su décimo título en la Olimpíada Nacional.

Una noticia refrescante, agradable, positiva, que distrae, afortunadamente, de tanta información preocupante... que incluso permite olvidar que las campañas políticas, a dos semanas de las elecciones intermedias, no han cumplido con su objetivo de atraer el interés ciudadano, mientras candidatos se dedican a hacer una “guerra sucia”, golpeándose entre ellos, en lugar de ofrecer propuestas concretas que atraigan al elector.

Ante este panorama, el hecho de que los niños y jóvenes deportistas de Jalisco hayan logrado una vez más el campeonato en la Olimpiada Nacional, aún antes de que ésta concluya, debe ser motivo de gran satisfacción y de orgullo para los deportistas mismos, para sus entrenadores, los dirigentes del deporte en la Entidad, para los padres de esos pequeños... para todo Jalisco.

Cabe destacar que atrás de este triunfo hay un largo camino recorrido, una labor que debe ser reconocida. Ha sido un trabajo continuo, tenaz, responsable; un ejemplo a seguir. El éxito es de todo un equipo humano compuesto por entrenadores, deportistas, padres de familia y, desde luego, el director del Code Jalisco, Carlos Andrade Garín, como cabeza de la organización, cuya actuación ajena a intereses políticos, sin buscar dar el salto a otros puestos, y solamente preocupado por el buen rendimiento de los niños y jóvenes atletas, se ha visto reflejado en un título más, el décimo.

El trabajo desarrollado por este equipo humano ha sido la clave del éxito, y es el ejemplo de lo que se debe hacer cuando el único interés que se tiene es el de lograr las metas fijadas.