El emprendimiento requiere de trabajo constante

GUADALAJARA, JALISCO (02/JUL/2021).- En los últimos años la política de desarrollo se ha centrado en conseguir que los estudiantes asuman, una vez que han egresado de sus carreras, el reto de crear sus propias empresas para convertirse en generadores de empleos.

Podría pensarse que ello sólo concierne a cierto tipo de carreras o de perfiles. Sin embargo, Brandon Price, ejecutivo con 30 años de experiencia en la industria biofarmacéutica, y profesor invitado  al Verano Internacional del ITESO, señala que para ser emprendedor hay que pensar como tal, tener una visión general y estratégica de todos los aspectos de un proyecto de negocio para que éste sea próspero.

Y bajo este concepto, hay que trabajar de manera constante en el desarrollo de un proyecto, pues no se puede pensar que las personas emprendedoras ya vienen con un gen que les permitirá desarrollarse.

La manera de pensar del emprendedor es fundamental para que un proyecto sea próspero, asegura, pero además debe pensar como director y  preocuparse por todos los aspectos de la empresa para que ésta salga a flote.

En cuanto al emprendimiento formal, Price considera que hay una figura aún ausente en el país: los parques del conocimiento.

En este sentido, afirma que en Guadalajara hay más de 30 parques tecnológicos, pero no de conocimiento, como el del Massachusetts Institute of Technology (MIT) o los que están alrededor de la Universidad de Stanford: “Son parques donde hay una cooperación y una comunicación muy fuerte entre las universidades y las industrias”.

Agrega que se requieren cuatro elementos para que funcionen: “Se necesita propiedad intelectual, que son las ideas, las cuales seguido surgen desde las universidades o de las empresas; también está el capital financiero, que es el dinero que está disponible para ayudar a las empresas a despegar; también se requiere capital administrativo, que son las personas que trabajan ahí porque no es suficiente con quien desarrolló  la idea; y el cuarto es un lugar donde deben estar las empresas, lo llamo capital físico o infraestructura”.

En el caso de México, y en concreto de Guadalajara, afirma que debe trabajarse más en el capital administrativo, por lo que considera que es importante que las universidades piensen en “cómo podemos entrenar gerentes o administradores que entiendan mejor cómo funcionan los negocios (...) de preferencia que tengan un antecedente en la parte técnica”.

Respecto al capital físico, que en su perspectiva surge de la suma de los elementos anteriores, cita como casos ejemplares el Parque Tecnológico del ITESO y las incubadoras. “Aún no tenemos un parque del conocimiento, pero las piezas ya están”.