Deportes
Otro corneado en Pamplona
Durante el tercer encierro de la Feria de San Fermín, un francés resultó herido
PAMPLONA, ESPAÑA (09/JUL/2011).-Un francés fue corneado por un toro este sábado en el tercer encierro de las fiestas de San Fermín de Pamplona (norte de España), anunciaron los organizadores.
El francés, de 23 años, herido en el muslo derecho, "ha sido trasladado al hospital, su vida no corre peligro", dijo un portavoz de la organización.
Otras tres personas, dos de ellas españoles, sufrieron heridas leves y fueron atendidas en el hospital, agregó.
El viernes en el segundo encierro, un australiano de 25 años recibió una cornada en la plaza de toros, al final del encierro, tras colocarse frente a uno de ellos provocando al animal, en una actitud que los organizadores calificaron "imprudente".
El joven fue herido en la arteria femoral derecha y operado en la misma plaza antes de ser trasladado al hospital, indicó el gobierno regional en su página web, en la que precisó que su estado es "grave".
Este sábado un portavoz de la organización declaró que el australiano "ha pasado una buena noche y se está recuperando bien".
Otros seis corredores --dos estadounidenses, un italiano, un británico, un australiano y un español-- resultaron heridos con contusiones sin gravedad.
El jueves, el primer encierro causó cuatro heridos leves.
Más de un millón de visitantes son esperados hasta el 14 de julio para las fiestas de San Fermín.
Los encierros de Pamplona son una tradición que se remonta al siglo XIX, cuando los toros eran llevados a pie hasta la plaza de toros, antes de la corrida.
Los animales recorren las callejuelas del casco antiguo de la ciudad a toda velocidad, hasta el coso, en 3 minutos y 55 segundos de media, rodeados por entre 2.000 y 3.500 corredores. De estos, entre 200 y 300 resultan heridos cada año, un 3% de gravedad.
Los encierros también pueden ser mortales. Desde 1911, han causado 15 muertos. El último fue en 2009, un español de 27 años, que sufrió una cornada en el cuello
El francés, de 23 años, herido en el muslo derecho, "ha sido trasladado al hospital, su vida no corre peligro", dijo un portavoz de la organización.
Otras tres personas, dos de ellas españoles, sufrieron heridas leves y fueron atendidas en el hospital, agregó.
El viernes en el segundo encierro, un australiano de 25 años recibió una cornada en la plaza de toros, al final del encierro, tras colocarse frente a uno de ellos provocando al animal, en una actitud que los organizadores calificaron "imprudente".
El joven fue herido en la arteria femoral derecha y operado en la misma plaza antes de ser trasladado al hospital, indicó el gobierno regional en su página web, en la que precisó que su estado es "grave".
Este sábado un portavoz de la organización declaró que el australiano "ha pasado una buena noche y se está recuperando bien".
Otros seis corredores --dos estadounidenses, un italiano, un británico, un australiano y un español-- resultaron heridos con contusiones sin gravedad.
El jueves, el primer encierro causó cuatro heridos leves.
Más de un millón de visitantes son esperados hasta el 14 de julio para las fiestas de San Fermín.
Los encierros de Pamplona son una tradición que se remonta al siglo XIX, cuando los toros eran llevados a pie hasta la plaza de toros, antes de la corrida.
Los animales recorren las callejuelas del casco antiguo de la ciudad a toda velocidad, hasta el coso, en 3 minutos y 55 segundos de media, rodeados por entre 2.000 y 3.500 corredores. De estos, entre 200 y 300 resultan heridos cada año, un 3% de gravedad.
Los encierros también pueden ser mortales. Desde 1911, han causado 15 muertos. El último fue en 2009, un español de 27 años, que sufrió una cornada en el cuello