Internacional
Dan por muertos a 100 desaparecidos en Nueva Zelanda
300 personas se encuentran desaparecidas tras el sismo de 6.3 grados Richter
SIDNEY, AUSTRALIA (24/FEB/2011).- Rescatistas de Nueva Zelanda abandonaron su intento por recuperar a unas 100 personas atrapadas bajo los escombros de la televisión local CTV, derrumbado por el terremoto del martes después del mediodía, con una réplica 15 minutos después, en Christchurch, informó la Policía.
Los rescatistas consideran que la operación es demasiado riesgosa y creen que no hay sobrevivientes. Indicaron que han inspeccionado el edificio con micrófonos de alta potencia y cámaras de video pequeñas pero no han encontrado señales de vida.
En el lugar había también una escuela de idiomas donde se cree que estaban unos 20 estudiantes japoneses que participaban en un programa de intercambio, y un número indeterminado de periodistas y policías que intentaron evacuar el edificio tras el sismo de 6.3 grados en la escala de Richter.
En ese inmueble estudiaban personas de Tailandia, Filipinas, Corea del Sur y China.
Siete cadáveres han sido extraídos del edificio CTV y otras 24 personas lograron ser rescatadas con vida.
Los rescatistas trabajan a contrarreloj para encontrar sobrevivientes, y en algunos casos se han visto obligados a realizar amputaciones para liberar a gente de entre los escombros. Hay personas atrapadas que envían mensajes de texto para pedir auxilio.
La cifra de desaparecidos tras el temblor es de 300, mientras que el número total de víctimas mortales confirmadas es de 75.
Este miércoles fue rescatada una mujer, Ann Bodkin, que llevaba 26 horas bajo una mesa en un edificio de oficinas derrumbado.
El primer ministro de Nueva Zelanda, John Key, declaró estado de emergencia nacional.
Los rescatistas consideran que la operación es demasiado riesgosa y creen que no hay sobrevivientes. Indicaron que han inspeccionado el edificio con micrófonos de alta potencia y cámaras de video pequeñas pero no han encontrado señales de vida.
En el lugar había también una escuela de idiomas donde se cree que estaban unos 20 estudiantes japoneses que participaban en un programa de intercambio, y un número indeterminado de periodistas y policías que intentaron evacuar el edificio tras el sismo de 6.3 grados en la escala de Richter.
En ese inmueble estudiaban personas de Tailandia, Filipinas, Corea del Sur y China.
Siete cadáveres han sido extraídos del edificio CTV y otras 24 personas lograron ser rescatadas con vida.
Los rescatistas trabajan a contrarreloj para encontrar sobrevivientes, y en algunos casos se han visto obligados a realizar amputaciones para liberar a gente de entre los escombros. Hay personas atrapadas que envían mensajes de texto para pedir auxilio.
La cifra de desaparecidos tras el temblor es de 300, mientras que el número total de víctimas mortales confirmadas es de 75.
Este miércoles fue rescatada una mujer, Ann Bodkin, que llevaba 26 horas bajo una mesa en un edificio de oficinas derrumbado.
El primer ministro de Nueva Zelanda, John Key, declaró estado de emergencia nacional.