Internacional
Fernández se reúne con Raúl Castro en Cuba
Fue recibida en el Palacio de la Revolución por el presidente anfitrión para una reunión a puertas cerradas y participar en la firma de una decena de acuerdos
LA HABANA, CUBA.- La presidenta argentina Cristina Fernández se entrevistó este lunes con su colega cubano Raúl Castro en la primera visita de un mandatario del país sudamericano a Cuba en dos décadas.
La presencia de la presidenta "constituye una expresión de los cordiales vínculos políticos y diplomáticos existentes entre los dos estados y gobiernos'', manifestó el periódico oficial Granma.
Fernández recorrió el lunes el primer día de actividades oficiales a pesar de encontrarse en Cuba desde el domingo el Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología donde se fabrican vacunas, incluyendo algunas que se comercializan en Argentina.
La Presidencia argentina emitió un comunicado según el cual la mandataria se manifestó ``impresionada por el nivel alcanzado por la ciencia cubana'' y por la capacidad que tiene no sólo de investigar un medicamento sino producirlo, lo cual consideró es una asignatura pendiente en su país.
Posteriormente puso una ofrenda florar al prócer isleño José Martí.
Por la tarde fue recibida en el Palacio de la Revolución por el presidente anfitrión para una reunión a puertas cerradas y participar en la firma de una decena de acuerdos. Ninguno de los dos gobernantes hicieron comentarios.
La visita, a concluir el miércoles, coincide con la toma de posesión del presidente electo estadounidense, Barack Obama, a quien varios líderes latinoamericanos le pidieron que evalúe la eliminación de sanciones a Cuba, impuestas para propiciar un cambio en el sistema político de la isla hace cinco décadas.
Pese a iniciales especulaciones, la agenda de Fernández no contempla un encuentro con disidentes ni con una médica cuyo caso generó tensiones entre las autoridades de ambos países.
``No demandé una audiencia (con la mandataria)... lo que yo le pedía a ella (en una carta en diciembre) fue que hablara de mis nietos con Raúl Castro sin un enfoque político'', dijo por teléfono a AP la doctora Hilda Molina, cuyo hijo y dos nietos viven en Argentina.
Molina dirigió el Centro Internacional de Restauración Neurológica ( CIREN) y las autoridades primero la despidieron y luego le negaron el permiso para viajar a Argentina.
Según comentarios del ex presidente Fidel Castro la mujer intentó apropiarse del hospital poco después de la caída de la Unión Soviética previendo la caída de la revolución y en acción similar a la tomada por colegas suyos del ex país socialista que se quedaron de centros otrora estatales.
El anterior viaje de un presidente de Argentina a Cuba fue el de Raúl Alfonsín en 1986. Fernández es la tercer gobernante en arribar a esta capital en 15 días, tras el panameño Martín Torrijos y el ecuatoriano Rafael Correa.
Paralelamente, un grupo de 50 empresarios argentinos y sus contrapartes cubanos comenzaron una ronda de negocios en ramas como alimentación, biotecnología, perfumería, la industrias de los componentes electrónicos y del plástico.
La intención es lograr un incremento del comercio binacional que era de unos 150 millones de dólares en 2007, la última cifra disponible.
La presencia de la presidenta "constituye una expresión de los cordiales vínculos políticos y diplomáticos existentes entre los dos estados y gobiernos'', manifestó el periódico oficial Granma.
Fernández recorrió el lunes el primer día de actividades oficiales a pesar de encontrarse en Cuba desde el domingo el Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología donde se fabrican vacunas, incluyendo algunas que se comercializan en Argentina.
La Presidencia argentina emitió un comunicado según el cual la mandataria se manifestó ``impresionada por el nivel alcanzado por la ciencia cubana'' y por la capacidad que tiene no sólo de investigar un medicamento sino producirlo, lo cual consideró es una asignatura pendiente en su país.
Posteriormente puso una ofrenda florar al prócer isleño José Martí.
Por la tarde fue recibida en el Palacio de la Revolución por el presidente anfitrión para una reunión a puertas cerradas y participar en la firma de una decena de acuerdos. Ninguno de los dos gobernantes hicieron comentarios.
La visita, a concluir el miércoles, coincide con la toma de posesión del presidente electo estadounidense, Barack Obama, a quien varios líderes latinoamericanos le pidieron que evalúe la eliminación de sanciones a Cuba, impuestas para propiciar un cambio en el sistema político de la isla hace cinco décadas.
Pese a iniciales especulaciones, la agenda de Fernández no contempla un encuentro con disidentes ni con una médica cuyo caso generó tensiones entre las autoridades de ambos países.
``No demandé una audiencia (con la mandataria)... lo que yo le pedía a ella (en una carta en diciembre) fue que hablara de mis nietos con Raúl Castro sin un enfoque político'', dijo por teléfono a AP la doctora Hilda Molina, cuyo hijo y dos nietos viven en Argentina.
Molina dirigió el Centro Internacional de Restauración Neurológica ( CIREN) y las autoridades primero la despidieron y luego le negaron el permiso para viajar a Argentina.
Según comentarios del ex presidente Fidel Castro la mujer intentó apropiarse del hospital poco después de la caída de la Unión Soviética previendo la caída de la revolución y en acción similar a la tomada por colegas suyos del ex país socialista que se quedaron de centros otrora estatales.
El anterior viaje de un presidente de Argentina a Cuba fue el de Raúl Alfonsín en 1986. Fernández es la tercer gobernante en arribar a esta capital en 15 días, tras el panameño Martín Torrijos y el ecuatoriano Rafael Correa.
Paralelamente, un grupo de 50 empresarios argentinos y sus contrapartes cubanos comenzaron una ronda de negocios en ramas como alimentación, biotecnología, perfumería, la industrias de los componentes electrónicos y del plástico.
La intención es lograr un incremento del comercio binacional que era de unos 150 millones de dólares en 2007, la última cifra disponible.