Internacional
'Generación de Oslo', centro de la ola de violencia en Israel
Nacidos cuando se vislumbraba la creación de un Estado Palestino, ahora viven frustrados por la ocupación
AL BIRE, CISJORDANIA (14/OCT/2015).- La “Generación de Oslo”, jóvenes palestinos nacidos en los últimos 22 años, están en el centro de la oleada de violencia que vive la región y que atribuyen a la frustración generada por años de ocupación.
Cuando el padre del nacionalismo palestino, Yasser Arafat, y el primer ministro israelí de entonces, Isaac Rabin, ampararon la primera fase de los acuerdos negociados en Oslo, Noruega, que establecían las bases de lo que debía ser el camino hacia la creación de un Estado Palestino independiente, en 1993, Fadi tenía dos años y sus padres creían que era el principio del fin de décadas de demandas de la autodeterminación.
Hoy, este joven se ajusta la “kufiyya” (pañuelo palestino) para cubrir su rostro, agarra piedras y se dirige rodeado de sus amigos de la Universidad de Birzeit, la más prestigiosa de Palestina, a enfrentar a las tropas israelíes apostadas en las proximidades de un puesto de control a las afueras de Al Bire, vecina a Ramalá. “Tiro piedras para protestar contra la vida que vivo”, explica este estudiante de ingeniería que critica ferozmente a Israel y lamenta cómo su Gobierno (la Autoridad Nacional Palestina, creada por los Acuerdos de Oslo) “ha abandonado” a su pueblo.
“Ambos (liderazgos) dicen que quieren paz, pero no hacen absolutamente nada. Yo, mientras, no tengo sueños. No puedo leer los libros que quiero, ni viajar adonde me gustaría. Así que vengo aquí y tiro piedras”, grita y se aleja hacia las columnas de humo de explosiones y llantas quemadas.
Mientras en Jerusalén e Israel la violencia se extiende con apuñalamientos, fundamentalmente de palestinos a israelíes, dentro de la Cisjordania ocupada y Gaza la violencia se canaliza con disturbios entre jóvenes carentes de esperanza y fuerzas armadas israelíes, que reprimen la ira a golpe de gas lacrimógeno y balas.
CÁNTICOS JUDÍOS
Los ultras piden “venganza”
JERUSALÉN.- Decenas de judíos ultranacionalistas se manifestaron en el centro de Jerusalén para denunciar la ola de ataques de palestinos a israelíes y exigir “venganza” y represalias por parte del Ejército de Israel.
“No podemos vivir así. Los árabes vienen por la mañana y nos dicen: ‘Te quiero matar’. Y toman un cuchillo y hacen lo que quieren”, dijo una de las decenas de adolescentes ultranacionalistas que se concentraron en la plaza de Zión de Jerusalén.
Entre pancartas y cánticos que reclamaban “Venganza” y “Muerte a los árabes” por los asesinatos de israelíes y que exhortaban a luchar “porque la guerra es la guerra”, la joven, residente de una colonia, pidió a su Gobierno que “ponga al Ejército a castigar a los árabes que hacen cosas que no tienen que hacer”.
Otros de los presentes reclamaban la pena de muerte para “terroristas” responsables de los ataques.
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, aseguró que Israel “ajustará cuentas con los asesinos”, en una sesión especial de la Kneset (Parlamento) para analizar la situación, y anunció la adopción de “una serie de medidas audaces para acabar con la incitación y el terrorismo” que serán aplicadas “cuanto antes” y que no desveló.
EFE
Cuatro muertos tras serie de ataques
JERUSALÉN.- La violencia continuó en Israel y Palestina, con cuatro ataques palestinos en los que fueron asesinados tres israelíes y 22 resultaron heridos, que se suman a la muerte de uno de los atacantes y de un joven palestino en un enfrentamiento con soldados.
Jerusalén fue, de nuevo, blanco de varios ataques, con un atropello y apuñalamiento en el que murió una víctima y otro atentado, el más sangriento hasta ahora, perpetrado por dos palestinos con un arma de fuego y un cuchillo, en el que murieron dos israelíes y 16 fueron heridos.
Este último tuvo lugar en el asentamiento judío de Armón Hanatziv, en Jerusalén Este y limítrofe con la población palestina de Yabel Mukaber, de donde procedían los dos jóvenes de 22 y 24 años que asaltaron un autobús, según muestran imágenes de la Policía.
Los atacantes “se subieron en el autobús con una pistola y un cuchillo y, dentro del vehículo, hirieron a cuatro personas de diversa consideración. Una patrulla policial trató de abordar el automotor y, aparentemente, los agresores se lo impidieron y continuaron atacando a personas inocentes desarmadas”, indicó un responsable de la Policía del distrito, Yaser Aroni.
Un agente de la Policía de Fronteras disparó y mató a uno de los agresores y el otro fue aprehendido en el lugar, informó el portavoz policial Micky Rosenfeld.
EFE
Cuando el padre del nacionalismo palestino, Yasser Arafat, y el primer ministro israelí de entonces, Isaac Rabin, ampararon la primera fase de los acuerdos negociados en Oslo, Noruega, que establecían las bases de lo que debía ser el camino hacia la creación de un Estado Palestino independiente, en 1993, Fadi tenía dos años y sus padres creían que era el principio del fin de décadas de demandas de la autodeterminación.
Hoy, este joven se ajusta la “kufiyya” (pañuelo palestino) para cubrir su rostro, agarra piedras y se dirige rodeado de sus amigos de la Universidad de Birzeit, la más prestigiosa de Palestina, a enfrentar a las tropas israelíes apostadas en las proximidades de un puesto de control a las afueras de Al Bire, vecina a Ramalá. “Tiro piedras para protestar contra la vida que vivo”, explica este estudiante de ingeniería que critica ferozmente a Israel y lamenta cómo su Gobierno (la Autoridad Nacional Palestina, creada por los Acuerdos de Oslo) “ha abandonado” a su pueblo.
“Ambos (liderazgos) dicen que quieren paz, pero no hacen absolutamente nada. Yo, mientras, no tengo sueños. No puedo leer los libros que quiero, ni viajar adonde me gustaría. Así que vengo aquí y tiro piedras”, grita y se aleja hacia las columnas de humo de explosiones y llantas quemadas.
Mientras en Jerusalén e Israel la violencia se extiende con apuñalamientos, fundamentalmente de palestinos a israelíes, dentro de la Cisjordania ocupada y Gaza la violencia se canaliza con disturbios entre jóvenes carentes de esperanza y fuerzas armadas israelíes, que reprimen la ira a golpe de gas lacrimógeno y balas.
CÁNTICOS JUDÍOS
Los ultras piden “venganza”
JERUSALÉN.- Decenas de judíos ultranacionalistas se manifestaron en el centro de Jerusalén para denunciar la ola de ataques de palestinos a israelíes y exigir “venganza” y represalias por parte del Ejército de Israel.
“No podemos vivir así. Los árabes vienen por la mañana y nos dicen: ‘Te quiero matar’. Y toman un cuchillo y hacen lo que quieren”, dijo una de las decenas de adolescentes ultranacionalistas que se concentraron en la plaza de Zión de Jerusalén.
Entre pancartas y cánticos que reclamaban “Venganza” y “Muerte a los árabes” por los asesinatos de israelíes y que exhortaban a luchar “porque la guerra es la guerra”, la joven, residente de una colonia, pidió a su Gobierno que “ponga al Ejército a castigar a los árabes que hacen cosas que no tienen que hacer”.
Otros de los presentes reclamaban la pena de muerte para “terroristas” responsables de los ataques.
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, aseguró que Israel “ajustará cuentas con los asesinos”, en una sesión especial de la Kneset (Parlamento) para analizar la situación, y anunció la adopción de “una serie de medidas audaces para acabar con la incitación y el terrorismo” que serán aplicadas “cuanto antes” y que no desveló.
EFE
Cuatro muertos tras serie de ataques
JERUSALÉN.- La violencia continuó en Israel y Palestina, con cuatro ataques palestinos en los que fueron asesinados tres israelíes y 22 resultaron heridos, que se suman a la muerte de uno de los atacantes y de un joven palestino en un enfrentamiento con soldados.
Jerusalén fue, de nuevo, blanco de varios ataques, con un atropello y apuñalamiento en el que murió una víctima y otro atentado, el más sangriento hasta ahora, perpetrado por dos palestinos con un arma de fuego y un cuchillo, en el que murieron dos israelíes y 16 fueron heridos.
Este último tuvo lugar en el asentamiento judío de Armón Hanatziv, en Jerusalén Este y limítrofe con la población palestina de Yabel Mukaber, de donde procedían los dos jóvenes de 22 y 24 años que asaltaron un autobús, según muestran imágenes de la Policía.
Los atacantes “se subieron en el autobús con una pistola y un cuchillo y, dentro del vehículo, hirieron a cuatro personas de diversa consideración. Una patrulla policial trató de abordar el automotor y, aparentemente, los agresores se lo impidieron y continuaron atacando a personas inocentes desarmadas”, indicó un responsable de la Policía del distrito, Yaser Aroni.
Un agente de la Policía de Fronteras disparó y mató a uno de los agresores y el otro fue aprehendido en el lugar, informó el portavoz policial Micky Rosenfeld.
EFE