Internacional

Holanda retira sus fuerzas de la OTAN

La operación de Amsterdam que inició en agosto de 2006 ha costado más de mil 800 millones de dólares al Gobierno

KABUL, AFGANISTÁN (02/AGO/2010).- Las fuerzas holandesas pasaron el mando de la provincia de Uruzgán (sur) a las fuerzas internacionales de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), al término de su misión de cuatro años en Afganistán.

“La comunidad internacional y la OTAN ayudan a Afganistán a sostenerse con sus propias piernas (...) Holanda ha asumido su responsabilidad y ha combatido por la seguridad y la reconstrucción de Afganistán”, se congratuló el ministro holandés de Relaciones Exteriores, Maxime Verhagen.

Los holandeses serán reemplazados por soldados estadounidenses, australianos, eslovacos y singapurenses.

Tras la partida del contingente holandés, la OTAN “mantendrá sus actuales  capacidades, sobre todo en lo que concierne a las unidades de combate, la formación y la reconstrucción”, según el comandante Joel Harper, portavoz de la Fuerza Internacional de Asistencia a la Seguridad (ISAF).

Un total de mil 950 militares holandeses estaban desplegados en Afganistán  desde el primero de agosto de 2006, principalmente en Uruzgán, una provincia del Sur del país donde los talibanes son muy activos. Veinticuatro soldados murieron en misión.

Pese a que la OTAN deseaba una prolongación de un año (hasta agosto de 2011) de la presencia de las fuerzas holandesas, las divergencias sobre este asunto provocaron el 20 de febrero la caída del Gobierno holandés —una coalición tripartita de democristianos, laboristas y calvinistas—, con lo que la misión no pudo extenderse.

Tras un largo debate sobre si las tropas holandesas debían o no continuar un año más en Afganistán, los laboristas del PvdA —en ese momento la segunda fuerza política en Holanda— sorprendieron con la retirada de sus ministros del Gobierno en febrero, aunque el primer ministro entonces, Jan Peter Balkenende, apoyaba su prolongación como había solicitado la OTAN.

La Alianza Atlántica había solicitado a Holanda que prorrogase la presencia de sus tropas en Afganistán para facilitar la formación de soldados afganos, a lo que se oponían los laboristas y que derivó en diferencias insuperables entre los partidos de la coalición.

De esta forma, Holanda adelantó para junio de 2010, las elecciones previstas para principios de 2011, en las que el partido de extrema derecha Partido Por la Libertad (PVV) del diputado Geert Wilders venció al Partido Laborista (PvdA).

La cancillería de Holanda dijo que continuaría sus relaciones diplomáticas con Afganistán y con su apoyo financiero al desarrollo del país.

GUÍA
Estrategia “3D” para el desarrollo


¿En qué se basó la misión holandesa en suelo afgano?

Holanda se encargó entre otras cosas de la construcción de una carretera asfaltada entre Tarin Kowt y Chora, las dos ciudades más pobladas de Uruzgán, y del entrenamiento de tres mil soldados afganos.

Desde el inicio de la misión, que costó más de mil 800 millones de dólares al Gobierno  holandés, el número de ONG presentes en Uruzgán pasó de seis a 50. El número de  escuelas se duplicó, hasta 179. La estrategia holandesa, llamada “3D” —desarrollo, diplomacia y defensa— ha sido puesta de ejemplo en la escena internacional.

¿Cuál es el tema inmediato en la agenda holandesa?


Holanda continúa a la búsqueda de su próxima coalición gubernamental desde que las divergencias sobre la continuidad de sus tropas en Afganistán entre los partidos que componían el ejecutivo del democristiano Jan Peter Balkenende motivaron su caída en febrero, y la anticipación de las elecciones.

El antiguo primer ministro de Holanda Ruud Lubbers, al que la reina Beatriz puso al frente de las negociaciones para formar un nuevo gabinete, se afana en lograr un acuerdo de coalición.

¿Cómo estaría conformado el nuevo Gobierno?


Los democristianos (CDA) y los liberales ya han declarado esta semana que están dispuestos a formar una coalición en minoría con el apoyo del partido antimusulmán PVV. De esta manera, Holanda parece aproximarse a un gabinete de derecha en minoría que gobernaría con el respaldo del partido de extrema derecha de Geert Wilders, que estaría implicado en el diseño de la coalición y que la respaldaría, aunque no formaría parte de la misma.

¿Cómo incide la coalición en el retiro de tropas?

Democristianos, liberales y el Partido de la Libertad —que sumarían 76 escaños de los 150 que tiene el Parlamento neerlandés— han asegurado que aceptarán sus divergentes puntos de vista sobre el Islam y que se asegurarán mutuamente la libertad de expresión.

Sin embargo, la izquierda holandesa, por su parte, ya ha manifestado su preocupación ante tal combinación, que sería la antesala a la decisión del Gobierno de retirar a su contingente en Medio Oriente.

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