Internacional
Reforma migratoria prevé agilizar residencia de jornaleros
De aprobarse la iniciativa, los trabajadores agrícolas tendrán una vía más rápida hacia la legalización
WASHINGTON, ESTADOS UNIDOS (04/ABR/2013).- Una profunda iniciativa de ley sobre inmigración que está tomando forma en el Senado de Estados Unidos, contempla reformar el programa nacional de trabajadores agrícolas a fin de que los productores norteamericanos cuenten con un suministro estable de mano de obra, pues este sector empresarial depende más de los jornaleros que han llegado al país sin autorización legal que cualquier otro.
Los jornaleros que ya están en Estados Unidos tendrían una vía más rápida hacia la legalización de su residencia que otros inmigrantes que están en el país sin permiso, según la iniciativa.
Además, un probable nuevo programa de visas podría hacer más fácil que los trabajadores extranjeros puedan viajar a Estados Unidos. Los legisladores estadounidenses pretenden que estos trabajadores ocupen la mitad o más de los puestos que se estima que tienen trabajadores agrícolas que llegaron sin autorización legal al país.
Los negociadores han estado trabajando para ultimar a tiempo un acuerdo para que esta iniciativa se incluya en una propuesta bipartidista de legislación que se espera sea difundida la semana próxima, pero los desacuerdos sobre salarios y el número de visas están entorpeciendo los avances.
Esta reforma busca crear un camino hacia la ciudadanía para los 11 millones de inmigrantes que viven sin autorización en el país y diseñar un nuevo programa de visas para trabajadores poco calificados ajenos al sector agrícola.
La razón por la cual la agricultura utiliza mucha mano de obra ilegal tiene que ver con que necesita trabajadores, pero también con inadecuados programas de inmigración. Hay un programa de visas por 10 meses para trabajadores agrícolas, llamado visa H2A, pero los dueños de los cultivos argumentan que es muy difícil utilizarlo porque para cuando los empleadores completan los trámites, ya ha pasado el tiempo para recoger la cosecha.
En 2011 se emitieron 55 mil visas H2A que representan un pequeño porcentaje de los aproximadamente dos millones de trabajadores agrícolas en el país.
Parte de la solución, según cultivadores y sindicatos, sería crear una fuerza de trabajo agrícola más permanente. Los senadores podrían lograr ese objetivo si concretan una nueva visa, la “blue card” o “tarjeta azul”, que concedería estatus legal a los trabajadores agrícolas que hayan laborado en el sector al menos dos años y tengan la intención de permanecer en éste al menos cinco años más.
En ese punto, posiblemente, estos trabajadores podrían tener derecho a conseguir las tarjetas verdes (“Green cards”, de residencia permanente) y acceder finalmente a la ciudadanía, un modo más rápido que la espera de 10 años para una tarjeta verde que otros inmigrantes no autorizados en el país previsiblemente enfrentarán según el proyecto migratorio del Senado.
LA CIFRA
50% e incluso hasta 70% de los jornaleros de la nación llegaron sin permiso legal, según estadísticas.
Los jornaleros que ya están en Estados Unidos tendrían una vía más rápida hacia la legalización de su residencia que otros inmigrantes que están en el país sin permiso, según la iniciativa.
Además, un probable nuevo programa de visas podría hacer más fácil que los trabajadores extranjeros puedan viajar a Estados Unidos. Los legisladores estadounidenses pretenden que estos trabajadores ocupen la mitad o más de los puestos que se estima que tienen trabajadores agrícolas que llegaron sin autorización legal al país.
Los negociadores han estado trabajando para ultimar a tiempo un acuerdo para que esta iniciativa se incluya en una propuesta bipartidista de legislación que se espera sea difundida la semana próxima, pero los desacuerdos sobre salarios y el número de visas están entorpeciendo los avances.
Esta reforma busca crear un camino hacia la ciudadanía para los 11 millones de inmigrantes que viven sin autorización en el país y diseñar un nuevo programa de visas para trabajadores poco calificados ajenos al sector agrícola.
La razón por la cual la agricultura utiliza mucha mano de obra ilegal tiene que ver con que necesita trabajadores, pero también con inadecuados programas de inmigración. Hay un programa de visas por 10 meses para trabajadores agrícolas, llamado visa H2A, pero los dueños de los cultivos argumentan que es muy difícil utilizarlo porque para cuando los empleadores completan los trámites, ya ha pasado el tiempo para recoger la cosecha.
En 2011 se emitieron 55 mil visas H2A que representan un pequeño porcentaje de los aproximadamente dos millones de trabajadores agrícolas en el país.
Parte de la solución, según cultivadores y sindicatos, sería crear una fuerza de trabajo agrícola más permanente. Los senadores podrían lograr ese objetivo si concretan una nueva visa, la “blue card” o “tarjeta azul”, que concedería estatus legal a los trabajadores agrícolas que hayan laborado en el sector al menos dos años y tengan la intención de permanecer en éste al menos cinco años más.
En ese punto, posiblemente, estos trabajadores podrían tener derecho a conseguir las tarjetas verdes (“Green cards”, de residencia permanente) y acceder finalmente a la ciudadanía, un modo más rápido que la espera de 10 años para una tarjeta verde que otros inmigrantes no autorizados en el país previsiblemente enfrentarán según el proyecto migratorio del Senado.
LA CIFRA
50% e incluso hasta 70% de los jornaleros de la nación llegaron sin permiso legal, según estadísticas.