Internacional
Termina sin ganador debate televisado entre canciller Merkel y rival
Los sondeos de opinión estimaron que alrededor de 20 millones de alemanes presenciaron la transmisión en vivo
BERLÍN, ALEMANIA.- El único duelo televisivo entre la canciller Federal de
Alemania, Angela Merkel, y su principal adversario por la jefatura de gobierno, el socialdemócrata
Frank Walter Steinmeier, culminó sin un ganador claro.
La población alemana siguió con interés la discusión de hoy entre la política demócrata cristiana y el político socialdemócrata y los sondeos de opinión estimaron que alrededor de 20 millones de alemanes presenciaron la transmisión en vivo.
Los comicios están previstos el 27 de septiembre.
El Instituto de Sondeo de Opinión Electoral, con sede en Mainz, dijo que no hubo un ganador del debate: un 40 por ciento de los espectadores no vieron diferencias entre ambos, 28 por ciento estimó que Merkel estuvo mejor y 31 por ciento que Steinmeier ganó.
Para el 48 por ciento de los votantes alemanes que no han decidido, los dos contricantes se mantuvieron en el mismo nivel en el que estaban.
Varios de los principales canales de televisión de Alemania, tanto de derecho público -que son los que gozan de mayor credibilidad- como privados transmitieron en vivo el debate con un gran despliegue para la realización de análisis de varios tipos al término de éste.
Equipos de televisión en diversos puntos del país en hospitales, tabernas y estudios reunieron a ciudadanos alemanes para que presenciaran el duelo e inmediatamente después expresaran sus opiniones.
Los enlaces en vivo denotaron una y otra vez que no se trató de un 'duelo' sino de un 'dúo' o un 'dueto'.
Merkel y Steinmeier se mostraron cordiales y conciliadores entre sí y no hubo ataques entre ellos. Los dos encabezan el gobierno de Gran Coalición que dirige el país, cuyo nombre se debe a que los dos mayores partidos políticos del país se coaligan para gobernar.
Para una corriente del público, los dos demostraron que están dispuestos a seguir gobernando el país en conjunto y de ahí el tono objetivo y cordial entre ellos, incluso con un intercambio de cumplidos por los logros de la Gran Coalición en los últimos 4 años.
En Alemania se ve con un tinte de desagrado a la Gran Coalición, porque los partidos de oposición quedan muy débiles y prácticamente no hay contrapeso. Para un país que ha vivido dictaduras, esa constelación es inquietante.
Para otra gran corriente de opinión, el que mejoró su posición ante el electorado como resultado del encuentro fue Steinmeier, quien saltó por primera vez a la primera fila de la política alemana en estos 4 años, y de manera inesperada en candidato a Canciller.
El rápido ascenso de Steinmeier se debió principalmente a las guerras internas de que adolece el Partido Socialdemócrata y a errores crasos de algunas de sus principales figuras públicas, lo que conllevó renuncias.
Otra corriente de opinión entre los electores fue que el encuentro resultó mas bien aburrido y que no se tocaron todos los temas centrales.
El debate televisado duró 90 minutos. Durante éste se midieron de manera acuciosa con ayuda de computadoras los minutos y segundo que cada uno habló.
Ambos quedaron prácticamente empatados en materia de tiempo con unos 32 minutos cada uno. La media hora restante fue para las intervenciones de los 4 moderadores de diversos canales de televisión que plantearon las preguntas a Merkel y a Steinmeier.
El área de opinión electoral del canal de derecho público en cuyos estudios se llevó a cabo al transmisión, el ZDF, encargó a un grupo de especialistas en análisis de contenido para llevar a cabo la cuenta de las palabras que más pronunció cada uno de ellos.
La mayoría de los principales diarios alemanes colocaron en sus páginas de Internet después del debate sus análisis y comentarios.
El mayor diario conservador de derecha, el Frankfurter Allgemeine Zeitung, escribió que el candidato socialdemócrata sorprendió durante el debate 'a amigos y enemigos' porque por primera vez mostró un perfil más definido y un aplomo no visto hasta ahora.
El principal diario de centro-izquierda, el Suddeutsche Zeitung, comentó que el duelo fue más bien un dueto, y que durante éste no se sacaron pistolas ni se escuchó el blandir de sables, sino que más bien fue un intercambio de 'algodón'.
Se aludió con ello a la ausencia de agresiones y ataques entre los dos políticos durante el encuentro.
El SZ afirmó que no hubo ganadores y que los temas centrales fueron salario mínimo, impuestos y energía nuclear.
El diario financiero Handelsblatt consideró que Angela Merkel no tuvo un buen desenvolvimiento y que Frank Walter Steinmeier consiguió una ligera ventaja.
El principal semanario de análisis, Die Zeit, que se ubica en la centro-izquierda del espectro político alemán, consideró que Steinmeier 'atacó' y Merkel 'paró', que el duelo no fue emocionante y que ambos se mostraron decididos y marcaron sus diferencias.
El semanario Der Spiegel, tituló que no se trató de un duelo 'ni por un segundo'. Resaltó que la Canciller Federal y el candidato socialdemócrata elogiaron su trabajo en conjunto.
Añadió que la jefa del gobierno alemán no lanzó ningún comentario sobre su eventual intención de formar coalición con el 'partido de los ricos', el Liberal, para deshacerse de los socialdemócratas.
Interpretó lo anterior como un reflejo de que Merkel está dispuesta a volver a formar una Gran Coalición después de las elecciones, en caso de que no reuna suficientes votos. Por ideología, su aliado natural es el Partido Liberal (FDP).
Los equipos de televisión recogieron asimismo los comentarios sobre el debate de los Presidentes de los partidos políticos con fracción en el Bundestag, y éstos, como era de esperarse, atribuyeron el éxito a su propio partido.
La población alemana siguió con interés la discusión de hoy entre la política demócrata cristiana y el político socialdemócrata y los sondeos de opinión estimaron que alrededor de 20 millones de alemanes presenciaron la transmisión en vivo.
Los comicios están previstos el 27 de septiembre.
El Instituto de Sondeo de Opinión Electoral, con sede en Mainz, dijo que no hubo un ganador del debate: un 40 por ciento de los espectadores no vieron diferencias entre ambos, 28 por ciento estimó que Merkel estuvo mejor y 31 por ciento que Steinmeier ganó.
Para el 48 por ciento de los votantes alemanes que no han decidido, los dos contricantes se mantuvieron en el mismo nivel en el que estaban.
Varios de los principales canales de televisión de Alemania, tanto de derecho público -que son los que gozan de mayor credibilidad- como privados transmitieron en vivo el debate con un gran despliegue para la realización de análisis de varios tipos al término de éste.
Equipos de televisión en diversos puntos del país en hospitales, tabernas y estudios reunieron a ciudadanos alemanes para que presenciaran el duelo e inmediatamente después expresaran sus opiniones.
Los enlaces en vivo denotaron una y otra vez que no se trató de un 'duelo' sino de un 'dúo' o un 'dueto'.
Merkel y Steinmeier se mostraron cordiales y conciliadores entre sí y no hubo ataques entre ellos. Los dos encabezan el gobierno de Gran Coalición que dirige el país, cuyo nombre se debe a que los dos mayores partidos políticos del país se coaligan para gobernar.
Para una corriente del público, los dos demostraron que están dispuestos a seguir gobernando el país en conjunto y de ahí el tono objetivo y cordial entre ellos, incluso con un intercambio de cumplidos por los logros de la Gran Coalición en los últimos 4 años.
En Alemania se ve con un tinte de desagrado a la Gran Coalición, porque los partidos de oposición quedan muy débiles y prácticamente no hay contrapeso. Para un país que ha vivido dictaduras, esa constelación es inquietante.
Para otra gran corriente de opinión, el que mejoró su posición ante el electorado como resultado del encuentro fue Steinmeier, quien saltó por primera vez a la primera fila de la política alemana en estos 4 años, y de manera inesperada en candidato a Canciller.
El rápido ascenso de Steinmeier se debió principalmente a las guerras internas de que adolece el Partido Socialdemócrata y a errores crasos de algunas de sus principales figuras públicas, lo que conllevó renuncias.
Otra corriente de opinión entre los electores fue que el encuentro resultó mas bien aburrido y que no se tocaron todos los temas centrales.
El debate televisado duró 90 minutos. Durante éste se midieron de manera acuciosa con ayuda de computadoras los minutos y segundo que cada uno habló.
Ambos quedaron prácticamente empatados en materia de tiempo con unos 32 minutos cada uno. La media hora restante fue para las intervenciones de los 4 moderadores de diversos canales de televisión que plantearon las preguntas a Merkel y a Steinmeier.
El área de opinión electoral del canal de derecho público en cuyos estudios se llevó a cabo al transmisión, el ZDF, encargó a un grupo de especialistas en análisis de contenido para llevar a cabo la cuenta de las palabras que más pronunció cada uno de ellos.
La mayoría de los principales diarios alemanes colocaron en sus páginas de Internet después del debate sus análisis y comentarios.
El mayor diario conservador de derecha, el Frankfurter Allgemeine Zeitung, escribió que el candidato socialdemócrata sorprendió durante el debate 'a amigos y enemigos' porque por primera vez mostró un perfil más definido y un aplomo no visto hasta ahora.
El principal diario de centro-izquierda, el Suddeutsche Zeitung, comentó que el duelo fue más bien un dueto, y que durante éste no se sacaron pistolas ni se escuchó el blandir de sables, sino que más bien fue un intercambio de 'algodón'.
Se aludió con ello a la ausencia de agresiones y ataques entre los dos políticos durante el encuentro.
El SZ afirmó que no hubo ganadores y que los temas centrales fueron salario mínimo, impuestos y energía nuclear.
El diario financiero Handelsblatt consideró que Angela Merkel no tuvo un buen desenvolvimiento y que Frank Walter Steinmeier consiguió una ligera ventaja.
El principal semanario de análisis, Die Zeit, que se ubica en la centro-izquierda del espectro político alemán, consideró que Steinmeier 'atacó' y Merkel 'paró', que el duelo no fue emocionante y que ambos se mostraron decididos y marcaron sus diferencias.
El semanario Der Spiegel, tituló que no se trató de un duelo 'ni por un segundo'. Resaltó que la Canciller Federal y el candidato socialdemócrata elogiaron su trabajo en conjunto.
Añadió que la jefa del gobierno alemán no lanzó ningún comentario sobre su eventual intención de formar coalición con el 'partido de los ricos', el Liberal, para deshacerse de los socialdemócratas.
Interpretó lo anterior como un reflejo de que Merkel está dispuesta a volver a formar una Gran Coalición después de las elecciones, en caso de que no reuna suficientes votos. Por ideología, su aliado natural es el Partido Liberal (FDP).
Los equipos de televisión recogieron asimismo los comentarios sobre el debate de los Presidentes de los partidos políticos con fracción en el Bundestag, y éstos, como era de esperarse, atribuyeron el éxito a su propio partido.