Jalisco
Ayuntamiento tapatío no pedirá la expropiación de La Primavera
La medida no garantiza que sea la mejor vía para protegerlo, concluyen ediles tras estudiar la propuesta de la administración anterior
GUADALAJARA, JALISCO (02/MAY/2013).- El Ayuntamiento de Guadalajara descartó de manera definitiva solicitarle al Gobierno federal que comience con un proceso de expropiación en el Bosque La Primavera, en un planteamiento que surgió de la anterior administración municipal, tras el incendio de abril de 2012, y que además formó parte de las propuestas de campaña del ex alcalde y hoy gobernador Aristóteles Sandoval. El Gobierno actual consideró la idea sin fundamento y también sin futuro, pues no garantiza que sea la mejor estrategia para protegerlo.
La idea vino originalmente de la fracción del PRI en la pasada gestión, pero fue heredada sin una resolución a la actual gestión municipal y la actual Comisión de Asuntos Metropolitanos emitió finalmente una conclusión en contra, pues la iniciativa, según dictaminó ya el pleno, “carece de toda fundamentación que demuestre la viabilidad de la acción y los beneficios que traerá como consecuencia, ya que la expropiación no garantiza que sea el mejor método para la protección de este ecosistema”.
También se advierte que la idea requiere más análisis técnicos, pues la decisión no puede basarse “sólo en un mensaje político de protección ambiental” y “los autores de la iniciativa son omisos” en explicar “las repercusiones sociales, económicas, presupuestales, laborales y jurídicas”, y entre estas ausencias “no se especifica cuál sería la superficie exacta a expropiar, tampoco el número de propietarios que resultarían afectados con dicha acción”.
La idea vino originalmente de la fracción del PRI en la pasada gestión, pero fue heredada sin una resolución a la actual gestión municipal y la actual Comisión de Asuntos Metropolitanos emitió finalmente una conclusión en contra, pues la iniciativa, según dictaminó ya el pleno, “carece de toda fundamentación que demuestre la viabilidad de la acción y los beneficios que traerá como consecuencia, ya que la expropiación no garantiza que sea el mejor método para la protección de este ecosistema”.
También se advierte que la idea requiere más análisis técnicos, pues la decisión no puede basarse “sólo en un mensaje político de protección ambiental” y “los autores de la iniciativa son omisos” en explicar “las repercusiones sociales, económicas, presupuestales, laborales y jurídicas”, y entre estas ausencias “no se especifica cuál sería la superficie exacta a expropiar, tampoco el número de propietarios que resultarían afectados con dicha acción”.