Jalisco
Celebran décima peregrinación del Señor del Encino
Cientos de fieles emprendieron camino esta mañana hacia Ocotes de Moya en un acto fuera del calendario litúrgico
GUADALAJARA, JALISCO (21/ABR/2011).- Este jueves se cumple una década, en la cual cientos de devotos del Señor del Encino -que tiene su santuario en Ocotes de Moya, Yahualica- realizan la peregrinación de 81 kilómetros, trayecto que recorren en dos días.
A la par del arranque de la Semana Santa, donde miles de católicos realizan la visita a distintos templos, y la escenificación del Viacrucis, también se realiza una actividad que no forma parte del calendario litúrgico, pero que año con año va sumando más fieles, la caminata Guadalajara- Yahualica que concentra un promedio de 250 a 300 personas que por alguna manda o por el amor y respeto al Señor del Encino ofrecen esta larga marcha.
Mientras la mayoría aprovechaba para dormir más de lo acostumbrado por el periodo vacacional, para por lo menos dos centenares de fieles del patrón de Yahualica, fue lo contrario. A las 07:00 horas inició la caminata, por lo cual, los participantes tuvieron que madrugar, debido a la diferencia de edades, los adultos mayores, que constituían un grupo numeroso, iniciaron con la travesía de bajar la
barranca.
Seguido de ellos, avanzaron algunas parejas y al final los grupos más jóvenes que mostraban un entusiasmo por la aventura que realizarán durante dos días.
Gilberto Vallejo Macías, uno de los coordinadores del movimiento denominado El Camino Milagroso A.C y Amigos del Camino, explicó que el recorrido de 81 kilómetros consiste en una peregrinación que va de la entrada a la Barranca de Huentitán, la cual deberán bajar para luego subir hasta Mazcuala, donde se hace una escala para desayunar y de ahí continuar la marcha pasando por las poblaciones de La Higuera, Tlacotán, El Bordo de Pepe, Palos Altos, y San Juan del Monte, donde los peregrinos dormirán.
Los peregrinos seguirán su caminar en los poblados de La Villita, Contla, Manalisco, y, finalmente, Ocotes de Moya, donde se espera su arribo alrededor de las 19:00 horas; pasarán a dar gracias al Señor del Encino por haberles permitido realizar esta décima caminata.
Los fieles ofrecieron la caminata por la paz social y de cada persona.
EL INFORMADOR / MARDIA MENDOZA
A la par del arranque de la Semana Santa, donde miles de católicos realizan la visita a distintos templos, y la escenificación del Viacrucis, también se realiza una actividad que no forma parte del calendario litúrgico, pero que año con año va sumando más fieles, la caminata Guadalajara- Yahualica que concentra un promedio de 250 a 300 personas que por alguna manda o por el amor y respeto al Señor del Encino ofrecen esta larga marcha.
Mientras la mayoría aprovechaba para dormir más de lo acostumbrado por el periodo vacacional, para por lo menos dos centenares de fieles del patrón de Yahualica, fue lo contrario. A las 07:00 horas inició la caminata, por lo cual, los participantes tuvieron que madrugar, debido a la diferencia de edades, los adultos mayores, que constituían un grupo numeroso, iniciaron con la travesía de bajar la
barranca.
Seguido de ellos, avanzaron algunas parejas y al final los grupos más jóvenes que mostraban un entusiasmo por la aventura que realizarán durante dos días.
Gilberto Vallejo Macías, uno de los coordinadores del movimiento denominado El Camino Milagroso A.C y Amigos del Camino, explicó que el recorrido de 81 kilómetros consiste en una peregrinación que va de la entrada a la Barranca de Huentitán, la cual deberán bajar para luego subir hasta Mazcuala, donde se hace una escala para desayunar y de ahí continuar la marcha pasando por las poblaciones de La Higuera, Tlacotán, El Bordo de Pepe, Palos Altos, y San Juan del Monte, donde los peregrinos dormirán.
Los peregrinos seguirán su caminar en los poblados de La Villita, Contla, Manalisco, y, finalmente, Ocotes de Moya, donde se espera su arribo alrededor de las 19:00 horas; pasarán a dar gracias al Señor del Encino por haberles permitido realizar esta décima caminata.
Los fieles ofrecieron la caminata por la paz social y de cada persona.
EL INFORMADOR / MARDIA MENDOZA