Jalisco
Difieren en prioridades de centros de reclusión para adolescentes
Diputados lamentan que a los menores infractores se les imparta hasta el nivel de secundaria
GUADALAJARA, JALISCO (10/JUN/2010).- Para el
Poder Legislativo de Jalisco, la educación es el rezago más preocupante en los complejos carcelarios para menores de la Entidad. En cambio, las autoridades penitenciarias tienen una gran prioridad: los recursos humanos.
En una visita guiada a las instalaciones del Centro de Observación, Clasificación y Diagnóstico ( antes Tutelar), y al Centro de Atención Integral Juvenil (conocido como “La Granja”), se observó que el máximo nivel educativo al cual pueden aspirar los adolescentes que incurrieron en delitos es la secundaria. El presidente de la Comisión de Readaptación Social del Congreso del Estado, Miguel Ángel Monraz Ibarra, destacó ese problema como uno de los principales a tratar para la exitosa reinserción de jóvenes infractores a la sociedad.
“Una de las primicias es la educación, es fundamental en nuestra sociedad para que podamos tener oportunidades de desarrollo. Le vamos a apostar de manera inmediata, mejorando las condiciones en que (los internos) viven. Es otra línea de trabajo”.
Tras entablar diálogo con menores señalados por haber cometido delitos en ambos centros de retención, representantes del Poder Legislativo coincidieron en que el eje toral para la exitosa readaptación de jóvenes recluidos es la enseñanza.
“Nos han explicado la necesidad de coordinarnos con las autoridades educativas para implementar el sistema educativo a nivel preparatoria”.
Por otra parte, el subdirector del área de Ejecución de Medidas de Prevención Especial y Adaptación Social, Alejandro Díaz Guzmán, narró que la prioridad es la dotación de recursos humanos.
“Principalmente, profesionales en el área de psicología, trabajo social, abogados y personal de vigilancia, que ya en su gran mayoría no son los apropiados para centros de menores”.
Aunado a ello, el funcionario mencionó que podrían recibir apoyo de los diputados en recursos materiales, como computadoras e instrumental adecuado para las áreas médicas.
Sobre el tema de la educación, Díaz Guzmán mencionó que existe un proyecto a corto plazo, en el que se coordinan para que se introduzca la preparatoria. No obstante, dijo, no hay una fecha tentativa.
Frase:
Hay mucho trabajo qué legislar, estamos viendo casos de internos que están cumpliendo sus sentencias en sus hogares. Debemos hacer adecuaciones, por eso trabajamos en el código penitenciario y tendremos que trabajar en la ley de menores infractores
Miguel Ángel Monraz Ibarra, presidente de la Comisión de Readaptación Social.
Para saber
La cifra más baja de internos que alcanzó el ex complejo Tutelar (hoy Centro de Observación, Clasificación y Diagnóstico), fue de 55 en un mismo momento en 2007.
La población más alta es la actual, con 274. Esto significa que, en tres años, la cifra prácticamente se quintuplicó.
Centro de Observación, Clasificación y Diagnóstico
Capacidad para 357 internos.
274 recluidos.
27 custodios.
12 empleados de área médica (divididos en tres turnos).
14, la edad más baja de un adolescente recluido.
22, la edad más alta de un joven recluido (quien cometió robo cuando era menor de edad).
Nueve internos en el módulo de conductas especiales (por sus preferencias sexuales).
Centro de Atención Integral Juvenil
Capacidad para 196 internos.
197 jóvenes recluidos.
114 cometieron robo calificado (57%).
32 cometieron homicidio (16%).
20 cometieron robo en su modalidad de tentativa (10%).
34 acusados de otros delitos (violación, extorsión, etcétera).
Nueve maestros.
281 adolescentes en libertad asistida.
138 jóvenes en internamiento domiciliario.
En una visita guiada a las instalaciones del Centro de Observación, Clasificación y Diagnóstico ( antes Tutelar), y al Centro de Atención Integral Juvenil (conocido como “La Granja”), se observó que el máximo nivel educativo al cual pueden aspirar los adolescentes que incurrieron en delitos es la secundaria. El presidente de la Comisión de Readaptación Social del Congreso del Estado, Miguel Ángel Monraz Ibarra, destacó ese problema como uno de los principales a tratar para la exitosa reinserción de jóvenes infractores a la sociedad.
“Una de las primicias es la educación, es fundamental en nuestra sociedad para que podamos tener oportunidades de desarrollo. Le vamos a apostar de manera inmediata, mejorando las condiciones en que (los internos) viven. Es otra línea de trabajo”.
Tras entablar diálogo con menores señalados por haber cometido delitos en ambos centros de retención, representantes del Poder Legislativo coincidieron en que el eje toral para la exitosa readaptación de jóvenes recluidos es la enseñanza.
“Nos han explicado la necesidad de coordinarnos con las autoridades educativas para implementar el sistema educativo a nivel preparatoria”.
Por otra parte, el subdirector del área de Ejecución de Medidas de Prevención Especial y Adaptación Social, Alejandro Díaz Guzmán, narró que la prioridad es la dotación de recursos humanos.
“Principalmente, profesionales en el área de psicología, trabajo social, abogados y personal de vigilancia, que ya en su gran mayoría no son los apropiados para centros de menores”.
Aunado a ello, el funcionario mencionó que podrían recibir apoyo de los diputados en recursos materiales, como computadoras e instrumental adecuado para las áreas médicas.
Sobre el tema de la educación, Díaz Guzmán mencionó que existe un proyecto a corto plazo, en el que se coordinan para que se introduzca la preparatoria. No obstante, dijo, no hay una fecha tentativa.
Frase:
Hay mucho trabajo qué legislar, estamos viendo casos de internos que están cumpliendo sus sentencias en sus hogares. Debemos hacer adecuaciones, por eso trabajamos en el código penitenciario y tendremos que trabajar en la ley de menores infractores
Miguel Ángel Monraz Ibarra, presidente de la Comisión de Readaptación Social.
Para saber
La cifra más baja de internos que alcanzó el ex complejo Tutelar (hoy Centro de Observación, Clasificación y Diagnóstico), fue de 55 en un mismo momento en 2007.
La población más alta es la actual, con 274. Esto significa que, en tres años, la cifra prácticamente se quintuplicó.
Centro de Observación, Clasificación y Diagnóstico
Capacidad para 357 internos.
274 recluidos.
27 custodios.
12 empleados de área médica (divididos en tres turnos).
14, la edad más baja de un adolescente recluido.
22, la edad más alta de un joven recluido (quien cometió robo cuando era menor de edad).
Nueve internos en el módulo de conductas especiales (por sus preferencias sexuales).
Centro de Atención Integral Juvenil
Capacidad para 196 internos.
197 jóvenes recluidos.
114 cometieron robo calificado (57%).
32 cometieron homicidio (16%).
20 cometieron robo en su modalidad de tentativa (10%).
34 acusados de otros delitos (violación, extorsión, etcétera).
Nueve maestros.
281 adolescentes en libertad asistida.
138 jóvenes en internamiento domiciliario.