Dos de cada 10 mujeres padecen depresión postparto

GUADALAJARA, JALISCO (22/AGO/2016).- Rocío tuvo a su tercera hija casi a los 30 años, después de unos días comenzó a sentir que algo no estaba bien, tenía crisis de ansiedad y el llanto de la niña la desesperaba. “Mi niña no era latosa, pero cuando lloraba le decía a quien estuviera conmigo que la abrazara, porque no soportaba que llorara. Hablé con mi doctora y me dijo que podía tener depresión postparto. Me dio medicamento, una dosis bajita porque amamantaba y me fui controlando”.

Rocío es un ejemplo de  19% de las mujeres que padecen esta depresión, según Paola Alejandra Gutiérrez Galindo, encargada de consulta externa de Psiquiatría en el Hospital Civil Fray Antonio Alcalde. Las mujeres que al tener un bebé sufren depresión, ocasionada por los cambios hormonales tanto en embarazo como en el parto, padecen una enfermedad poco comentada y muchas veces estigmatizada por la misma familia.

Esta depresión puede llegar a durar un año y es muy parecida, en síntomas, a otras depresiones. Por ejemplo, las mujeres se vuelven más irritables, pierden el gusto por las cosas, incluso por el bebé, no duermen o duermen en exceso, entre otros aspectos.

“La irritabilidad puede convertirse en no querer al bebé y puede llegar a un infanticidio. Y no es que lo hagan con intención, sino que la mujer se siente tan mal que se convierte en esto”, resalta la especialista.

El tratamiento varía dependiendo la depresión que puede ser leve, moderada o grave, y va desde tratamiento psicoterapéutico, es decir que sólo con terapias se pueden revertir los síntomas, hasta con medicamentos, que pueden ser con dosis mínimas para no afectar la lactancia o con dosis fuertes, en el caso de depresión grave con trastorno psicótico.

Jesús Terrones, jefe de la Consulta Externa del Instituto Jalisciense de Salud Mental (SALME), comenta que hay muchas teorías sobre la depresión postparto, pero la más acertada es que “las mujeres tienen cambios hormonales en el embarazo y posterior al parto. Hay un descenso de algunas hormonas y otra que se elevan, entonces se puede presentar una modificación del ánimo que es normal”. Sin embargo, se debe acudir con un especialista si esto dura más de dos semanas y no muestra mejoría.

DETECTAR Y ATENDER A TIEMPO

Síntomas

• Falta de ánimo.
• Disminución de interés, sobre todo por el bebé.
• Pérdida de energía.
• Baja autoestima.
• Reproches; sienten que nadie las comprende.
• Pensamientos suicidas.
• Pensamientos de querer hacer daño al bebé.
• Negligencia hacia el bebé o preocupación excesiva por su cuidado.
• Insomnio.
• Ansiedad extrema.
• Ataques de pánico.

Factores que propician

• Embarazo adolescente.
• Embarazo no deseado.
• Nulo o poco apoyo familiar.
• Nulo o poco apoyo económico.
• Nivel educativo.
• Responsabilidades.
• Complicaciones en el embarazo.
• Cuadros depresivos anteriores.

¿Qué hacer?

• No estigmatizar y comprender a la madre.
• Al ver síntomas de negligencia, ayudar con el cuidado del bebé.
• Acudir con un especialista.

"No es lo mismo estar triste que estar deprimida": especialista

Cuando una mujer está embarazada o acaba de tener a su bebé, es normal que pase por un cuadro de tristeza por el cambio de las hormonas, sin embargo, según Paola Alejandra Gutiérrez Galindo, encargada de consulta externa de Psiquiatría en el Hospital Civil Fray Antonio Alcalde, “no es lo mismo estar triste que estar deprimida”.

“Podemos decir que las que acaban de tener a su bebé pasan por una depresión ‘light’, propia de la adaptación, pero si comenzamos a notar signos de negligencia hacia el bebé, que pierde el apetito o las ganas de hacer cosas, entonces debemos comenzar a preocuparnos”.

Jesús Terrones, jefe de la Consulta Externa del Instituto Jalisciense de Salud Mental (SALME) concuerda con ella al decir que durante y después del embarazo hay cambios hormonales, por lo que “debemos prevenir que esto se complique y se transforme en una depresión mayor”.

Para prevenirlo, el especialista dice que lo más importante es que los médicos de primer nivel de atención estén capacitados para detectar, atender y derivar a una mujer con síntomas de depresión postparto a un área de psiquiatría.

“Los apoyos que estas pacientes reciban en el primer nivel de atención van a ayudar bastante. Detectarlo desde ahí, nos puede ayudar”, asegura el especialista.

Existen factores que propician la depresión postparto, aunque la Organización Mundial de la Salud asegura que no se puede prevenir del todo, sí hay indicadores que deben preocupar a los médicos. Por ejemplo, el apoyo económico que recibe la paciente, las complicaciones que tuvo durante el embarazo y si ya ha tenido cuadros depresivos previos. Con esto, los médicos de primer nivel podrían derivarlas a grupos de ayuda o a terapia para reducir los síntomas.

"ES ALGO MÁS FUERTE QUE TÚ"

Rocío había tenido dos hijos sin complicaciones, cuando tuvo a su tercera hija, volvió a casa con su esposo y todo parecía estar bien, sin embargo, a los tres días comenzó a sentir una desesperación incontrolable y muchas ganas de llorar.

“Empecé a sentir una desesperación rara, a sentirme como que no quería estar en mi casa, pero si me salía, me quería meter, y luego se me empezaban a salir las lágrimas de la nada. Se me pasaba en ratos, pero mi hija nació en tiempos de lluvias y cuando comenzaba a llover, empezaba yo a acelerarme. Es algo más fuerte que tú, que no puedes controlar...era una desesperación”.

Al ver que eso no era normal, Rocío habló con su ginecóloga, quien le habló de la depresión postparto y le recomendó un medicamento en dosis mínimas para que pudiera seguir amamantando a la bebé.

Rocío trataba de controlarse a sí misma y, cuando no podía, tomaba el medicamento que requirió por un año. “Yo digo que sí me lo controló, pero no me curó. Duré otros tres años que, cuando se acercaba la fecha en que nació mi hija, empezaba otra vez a sentir eso y a llorar”.

Ahora está mejor, agradece a su esposo el haberle tenido paciencia “porque a veces pensaba que él no me entendía y discutía”. Pero sigue sin tener una explicación de su depresión, ya que nunca ha tenido otro cuadro depresivo, ni antes ni después, y su embarazo no fue complicado.

LAS INSTITUCIONES DE SALUD NO TIENEN CIFRAS EXACTAS DE LA ENFERMEDAD

Aún no está tipificada en los manuales

A pesar de que es una patología que puede llegar al infanticidio y es provocada por el ciclo hormonal de las mujeres, y no porque el cerebro deje de producir sustancias como la serotonina, como en otras depresiones; la depresión postparto no está catalogada como tal y las instituciones de salud no tienen cifras porque las manejan como una depresión más.

“La depresión postparto no está tipificada en los manuales como una depresión independiente, sino que está dentro de las formas del estado de ánimo, pero no como algo diferente. Entonces, comparte los síntomas de la depresión mayor que sí está tipificada en los manuales, así que precisamente por eso, a veces no se le da la importancia debida”, comenta Jesús Terrones, jefe de la Consulta Externa del Instituto Jalisciense de Salud Mental (SALME).

Tampoco el Hospital Civil lo cataloga como un tipo de depresión aparte, por lo que no tienen estadísticas internas de ello. “Nosotros no tenemos, en nuestro sistema de clasificación, normalmente las estadísticas. Lo clasificamos como depresión y dependiendo si es leve, moderada o grave”, dice Paola Alejandra Gutiérrez Galindo, encargada de consulta externa de Psiquiatría de la institución.