Jalisco

Faltan estrategias de prevención de delitos en el Centro: experto

Establecer un protocolo de intervención entre la autoridad y la ciudadanía mejoraría la seguridad en el primer cuadro, considera el doctor en Derecho y criminólogo, Rogelio Barba Álvarez

GUADALAJARA, JALISCO (12/FEB/2013).- Una de las primeras estrategias para mejorar la seguridad en el Centro de Guadalajara son las reuniones entre los elementos policiales y los comerciantes establecidos para establecer un plan de trabajo, que contemple protocolos de intervención en caso de delitos y eventualidades como incendios y temblores, explica el doctor en Derecho y criminólogo, Rogelio Barba Álvarez.

Dicho plan debería contemplar la movilidad en el Centro, el respeto del reglamento y la capacitación a los elementos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana de Guadalajara.

Para mejorar la movilidad de los policías en el primer cuadro de la ciudad, la administración pasada adquirió scooters para que los elementos recorrieran con mayor facilidad el espacio público,  sin embargo, las estrategias no sólo deben enfocarse en la compra de equipo, “que no es apto para ciertos lugares, en este caso el Centro”.

La compra de estos equipos debe responder a la atención que requiere el ciudadano y a la orientación del  turista, ya que con un scooter  no se puede “repeler una agresión o un robo, no sirven para nada” y “menos para la persecución porque –el Centro- es un área muy transitada”.

El también profesor de la Universidad de Guadalajara (UdeG) comenta que el reglamento del Centro Histórico no sólo lo tiene que conocer el policía, sino todos los ciudadanos que se desarrollan en este espacio.  

 Barba Álvarez, quien fue policía en 1986, señala que un elemento con una buena imagen y educado “hace que cualquier ciudad luzca”, ya que el policía es el primer contacto del Ayuntamiento con los ciudadanos.

 El experto comenta que los esfuerzos de la autoridad deben enfocarse en la prevención con apoyo de cámaras amigas o con el llamado “botón de pánico, que podría ser utilizado en esas áreas porque un delincuente puede pasar desapercibido entre tanta gente y en distintas horas del día”.

El botón de pánico activaría una alarma con la finalidad de ahuyentar a los grupos criminales, que operan en el Centro.

Otra de las opciones, señaladas por Barba Álvarez, es la instalación de una comisaria en el corazón de la ciudad para la atención de los ciudadanos. Además del trabajo de difusión de la ubicación de este punto de contacto.  

EL INFORMADOR / MAYRA TORRES

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