Jalisco
La mujer hecha palabra
“No estudio por saber más, sino por ignorar menos.” Sor Juana Inés de la Cruz
GUADALAJARA, JALISCO (10/NOV/2012).- Palabra y mujer son dos conceptos que están estrechamente vinculados entre sí, pues ambos son sinónimos de creación. A la vez, han recorrido un camino común en búsqueda de la libertad: la palabra que trasciende la celda corporal, y la mujer que ha demandado durante siglos un lugar en este mundo que, a ratos, parece ser de los hombres.
Al hablar de la libertad de la mujer, lo primero que nos viene a la mente son las difíciles circunstancias que tuvieron aquéllas que nacieron antes del Siglo XX, época en que eran consideradas inferiores e incapaces de decidir. No obstante, para encontrar un vínculo real entre la libertad y la literatura no podríamos sujetarnos sólo a la visión femenina, sino a la visión de libertad como plenitud del género humano.
Cuando realizamos alguna acción queda de manifiesto nuestro ser. Sólo se puede decir que es libre aquél que obra libremente, y que sólo obra libremente aquél que ha encontrado la plenitud del ser. La libertad es el centro de toda la acción humana: no sólo hacer lo que se desee, sino querer elegirlo.
Por ello, podemos afirmar que la literatura nos hace más libres, porque a través de ella nos convertimos en hombres y mujeres más humanos, capaces de trascender a los condicionamientos materiales e inmateriales, como la ignorancia.
En la literatura mujeres y hombres encuentran una ventana hacia un infinito de historias, sentimientos y conocimientos. A través de la lectura conocemos distintas maneras de pensar; podemos conocer nuestro pasado y entender hacia dónde nos dirigimos; ampliar horizontes y romper paradigmas; ejercitar nuestra inteligencia y forjarnos una identidad.
Si las mujeres queremos ser libres debemos acercarnos al conocimiento, y qué mejor manera de hacerlo que a través de la literatura, que ha brindado autonomía genuina a aquéllas que le han dedicado también su vida, como Sor Juana Inés de la Cruz, cuyas ideas traspasaron las cuatro paredes del claustro del que no salió, así como el tiempo, de modo que podemos leerla hasta nuestros días.
Alejandra Mendoza Ruiz
ECOS DEL DEBATE
“La literatura ha sido una vía hacia la liberación femenina”
“Para mí la literatura sí es un medio de liberación femenina, porque a través de ella se puede decir lo que se siente, además de que ésta es la etapa social en que una mujer puede expresarse sin temor y con seguridad hacia cualquier miembro de la sociedad”.
Cindy Guadalupe Martín Navarro.
“La literatura es una forma de expresión, una manera de comunicar ideales y valores. Si bien la liberación de la mujer nació de una necesidad de igualdad, estuvo apoyada por ideas de justicia y equidad, y considero que la literatura dio la pauta necesaria para transmitir dichas ideas, para expresarse y exigir sus derechos”.
Araceli Ramos González.
“La literatura ha sido una vía de liberación femenina, porque le permitió convertirse en un movimiento intelectual que trascendiera. La literatura es el fundamento para cualquier corriente del pensamiento y en este caso, fue un clamor de igualdad y libertad de las mujeres, al que debemos agradecer por ser autónomas”.
Monse Fernández Carrillo.
COMPARTE
Escucha de viva voz a los líderes sociales compartir, en una entrevista, algunas de sus experiencias.
El papel de Sor Juana Inés de la Cruz
— ¿Quién es Guillermo Schmidhuber, según Guillermo Schimdhuber?
— Soy escritor de poco más de 100 obras. Estoy casado con la Dra. Olga Martha Peña Doria y tenemos tres hijos y un nieto. Es una definición genérica.
— ¿Qué función social cumple la literatura?
— Todos necesitamos responder en nuestra vida a cuestiones elementales: ¿qué es la verdad?, ¿qué es la moralidad? y ¿qué es lo bello? Todas esas respuestas puedes encontrarlas en la literatura, que es la coronación de las habilidades humanas.
— ¿Cómo definiría usted la obra de Sor Juana Inés de la Cruz?
— Sor Juana jugó cuatro papeles. El primero: fue mujer, y quiso que quedara palpable esa condición, siendo una de las primeras mujeres que deja por escrito que la mujer tiene derecho a pensar, plasmado en la Respuesta a Sor Filotea de la Cruz y por lo que se le reconoce como antecesora de la liberación femenina.
El segundo papel es el de monja. Por desgracia muchos han retirado el hecho de que ella fue monja por deseo y vocación, y no por huida del mundo. Se dio cuenta de que a ella le gustaban los libros, y pienso que decidió que no eran compatibles con casarse. Fue monja y hay que aceptarla como tal, porque esa fue su perspectiva vital.
El tercero de sus caminos es el de dramaturga, y el cuarto, el de poeta. Yo digo que fue más lo primero que lo segundo. Numéricamente tiene más líneas de teatro que de verso poético: loas, villancicos, comedias seculares y obras religiosas. La dramaturgia es el camino en que más muestra su forma de ser.
Después sigue lo que más se le reconoce: su obra poética. Si la juzgamos y entendemos desde estos cuatro aspectos tendremos la visión de una mujer realizada, porque si no la vemos en perspectiva total, como ha pasado con algunos críticos, veremos una mujer frustrada, y no fue así.
— ¿En qué momento se da el reconocimiento a la obra de Sor Juana?
— A Sor Juana se le permitió escribir y publicar, que ya era bastante. En vida publicó dos volúmenes en España y cinco años después de muerta apareció otro del que se hicieron 20 ediciones, éxito que ni Cervantes, ni Calderón, ni Lope de Vega tuvieron tan cercano a sus muertes. En el Siglo XVII terminó el barroco e inició el Siglo de las Luces que privilegiaba las cosas escritas para la sociedad, y durante ese tiempo quedó olvidada. En los siglos XVIII y XIX se publicaron algunos poemas.
El primero que retoma a Sor Juana fue Amado Nervo, que publicó un libro muy agradable, pero con un error garrafal: le cambió el nombre. Nervo escribió Juana de Asbaje y su apellido era Asvaje, que se pronuncia como u.
En los años 50 se publica por primera vez su obra total y después de eso la gente empezó a interesarse. Después llega Octavio Paz con su libro Trampas de la fe, y entonces hay una polarización porque empieza a ser estudiada con una mentalidad liberal de personas del siglo XIX, es ahí cuando se hace la historia de la Sor Juana sufrida y abnegada.
Sale el billete de 20 pesos y ahora el de 200, pero le ponen el nombre erróneo de Juana de Asbaje porque no podía tener el nombre de una monja, además eliminan de la imagen los libros que la acompañaban. Es una maravilla que esté ahí, porque es una mujer importante, pero creo que no la hemos reconocido ni representado correctamente.
— Como investigador y escritor ¿de qué piensa que está más necesitado nuestro país?
— La investigación está demasiado influida por la visión norteamericana de hacer patentes que den dinero y ese tipo de investigación no resolverá los problemas de México. La investigación es para comprendernos y apoyarnos. La literatura tampoco nos va a salvar. En México nos hemos puesto la corona antes de desarrollar a la sociedad y no requerimos más literatos, sino personas trabajadoras y esforzadas que nos permitan alcanzar de nuevo esa corona y merecerla.
— ¿De qué manera considera que ha evolucionado la apreciación artística en México?
— México nombró como arte nacional a la pintura y tuvimos esfuerzos muy tempranos depositados en ella, ahora pocos países cuentan con un Orozco, un Siqueiros, un Rivera o un Soriano, pero se descuidaron otras artes. Ha habido pocos grandes músicos, y no creo que falte la creatividad musical, falta el apoyo; el teatro no se apoyó porque se temió que fuera un motivo ideológico de cambio; en la literatura se apoyó a algunos escritores no tan valiosos, porque su obra se vendía, por la peligrosa idea de las industrias culturales de que si algo no se vende, no es bueno. Nuestro país está cojo en el arte.
— ¿Qué paradigma es más correcto: la cultura va de las clases altas a las bajas, o viceversa?
— Es muy factible que la gente que estudia tenga erudición, pero la identidad viene de abajo hacia arriba y del pasado al presente.
— ¿Qué le gustaría que entendiera la juventud?
— Que no hay logro sin esfuerzo.
Asociación de ideas:
Sor Juana… Pensamiento
Literatura… Logro
Teatro… Verdad
Juventud… Esfuerzo
Debate… Tolerancia
Mar Adentro… Visión
VOLUNTADES
Historias de éxito que trascienden
A puño y letra
Ensalzada por algunos y criticada por otros, la polémica Simone de Beauvoir siempre será referente de la lucha por la liberación femenina y del vínculo de ésta con la literatura.
Nació en la burguesía francesa y después de estudiar filosofía en la Sorbona se convirtió en ícono de las corrientes existencialista y feminista. Cuando tenía 21 años, en 1929, conoció al también filósofo Jean Paul Sartre con quien se le vincularía emocionalmente por el resto de su vida.
Además de enseñar filosofía en Francia, Ruan y Marsella, Simone de Beauvoir dedicó su obra a explorar los dilemas de la libertad, la responsabilidad individual y la creación cultural del rol femenino, manteniendo siempre una visión crítica frente al entorno y su condición de mujer.
A la par de sus novelas, Simone escribió cuatro obras autobiográficas que retratan su propia búsqueda de libertad y el cuestionamiento a los roles de género impuestos en su época. Su libro más famoso a este respecto se titula El segundo sexo y fue publicado en 1949, en él realiza una revisión histórica de la dominación masculina, abordando a la mujer desde el punto de vista biológico, histórico, psicológico y antropológico, lo que la convierte en referente obligado para la corriente feminista del Siglo XX.
10 NOTAS POSITIVAS
1. Por primera vez, Somalia integra a una mujer en su gabinete presidencial.
2. Se anuncia el Primer Congreso Internacional de Transparencia a celebrarse durante la FIL.
3. La UNESCO otorga medalla al INAH en nuestro país.
4. De acuerdo con la Encuesta Nacional de las Adicciones, disminuyó el consumo de cigarro entre los mexicanos.
5. Se inaugura el Museo Maya de Cancún.
6. Los artistas mexicanos Andrea Arroyo y Felipe Galindo exponen su obra en Nueva York.
7. El escritor mexicano Juan Villoro gana el premio iberoamericano “José Donoso 2012”.
8. Selma Ancira, traductora mexicana, gana premio Tomás Segovia.
9. Se designa al mexicano Alejandro Mariano Werner, economista en jefe para el Hemisferio Occidental del FMI.
10. Organizaciones de la Sociedad Civil participan en el foro “Los desafíos del desarrollo urbano en Jalisco”.
Mar Adentro Propone
Para leer…
Bahiyyih Nakhjavani, escritora britano-iraní, rememora en su libro La mujer que leía demasiado, la vida de la poetisa también iraní Tahirih Qurratu’l-Ayn, primera mujer en su país en proclamar la dignidad femenina.
Para saber…
El Convento de San Jerónimo alberga hoy la Universidad del Claustro de Sor Juana.
Para conocer…
Asiste el 28 de noviembre a la entrega del Premio Sor Juana Inés de la Cruz en la FIL, y conoce otras mujeres que se han entregado a la palabra.
Al hablar de la libertad de la mujer, lo primero que nos viene a la mente son las difíciles circunstancias que tuvieron aquéllas que nacieron antes del Siglo XX, época en que eran consideradas inferiores e incapaces de decidir. No obstante, para encontrar un vínculo real entre la libertad y la literatura no podríamos sujetarnos sólo a la visión femenina, sino a la visión de libertad como plenitud del género humano.
Cuando realizamos alguna acción queda de manifiesto nuestro ser. Sólo se puede decir que es libre aquél que obra libremente, y que sólo obra libremente aquél que ha encontrado la plenitud del ser. La libertad es el centro de toda la acción humana: no sólo hacer lo que se desee, sino querer elegirlo.
Por ello, podemos afirmar que la literatura nos hace más libres, porque a través de ella nos convertimos en hombres y mujeres más humanos, capaces de trascender a los condicionamientos materiales e inmateriales, como la ignorancia.
En la literatura mujeres y hombres encuentran una ventana hacia un infinito de historias, sentimientos y conocimientos. A través de la lectura conocemos distintas maneras de pensar; podemos conocer nuestro pasado y entender hacia dónde nos dirigimos; ampliar horizontes y romper paradigmas; ejercitar nuestra inteligencia y forjarnos una identidad.
Si las mujeres queremos ser libres debemos acercarnos al conocimiento, y qué mejor manera de hacerlo que a través de la literatura, que ha brindado autonomía genuina a aquéllas que le han dedicado también su vida, como Sor Juana Inés de la Cruz, cuyas ideas traspasaron las cuatro paredes del claustro del que no salió, así como el tiempo, de modo que podemos leerla hasta nuestros días.
Alejandra Mendoza Ruiz
ECOS DEL DEBATE
“La literatura ha sido una vía hacia la liberación femenina”
“Para mí la literatura sí es un medio de liberación femenina, porque a través de ella se puede decir lo que se siente, además de que ésta es la etapa social en que una mujer puede expresarse sin temor y con seguridad hacia cualquier miembro de la sociedad”.
Cindy Guadalupe Martín Navarro.
“La literatura es una forma de expresión, una manera de comunicar ideales y valores. Si bien la liberación de la mujer nació de una necesidad de igualdad, estuvo apoyada por ideas de justicia y equidad, y considero que la literatura dio la pauta necesaria para transmitir dichas ideas, para expresarse y exigir sus derechos”.
Araceli Ramos González.
“La literatura ha sido una vía de liberación femenina, porque le permitió convertirse en un movimiento intelectual que trascendiera. La literatura es el fundamento para cualquier corriente del pensamiento y en este caso, fue un clamor de igualdad y libertad de las mujeres, al que debemos agradecer por ser autónomas”.
Monse Fernández Carrillo.
COMPARTE
Escucha de viva voz a los líderes sociales compartir, en una entrevista, algunas de sus experiencias.
El papel de Sor Juana Inés de la Cruz
— ¿Quién es Guillermo Schmidhuber, según Guillermo Schimdhuber?
— Soy escritor de poco más de 100 obras. Estoy casado con la Dra. Olga Martha Peña Doria y tenemos tres hijos y un nieto. Es una definición genérica.
— ¿Qué función social cumple la literatura?
— Todos necesitamos responder en nuestra vida a cuestiones elementales: ¿qué es la verdad?, ¿qué es la moralidad? y ¿qué es lo bello? Todas esas respuestas puedes encontrarlas en la literatura, que es la coronación de las habilidades humanas.
— ¿Cómo definiría usted la obra de Sor Juana Inés de la Cruz?
— Sor Juana jugó cuatro papeles. El primero: fue mujer, y quiso que quedara palpable esa condición, siendo una de las primeras mujeres que deja por escrito que la mujer tiene derecho a pensar, plasmado en la Respuesta a Sor Filotea de la Cruz y por lo que se le reconoce como antecesora de la liberación femenina.
El segundo papel es el de monja. Por desgracia muchos han retirado el hecho de que ella fue monja por deseo y vocación, y no por huida del mundo. Se dio cuenta de que a ella le gustaban los libros, y pienso que decidió que no eran compatibles con casarse. Fue monja y hay que aceptarla como tal, porque esa fue su perspectiva vital.
El tercero de sus caminos es el de dramaturga, y el cuarto, el de poeta. Yo digo que fue más lo primero que lo segundo. Numéricamente tiene más líneas de teatro que de verso poético: loas, villancicos, comedias seculares y obras religiosas. La dramaturgia es el camino en que más muestra su forma de ser.
Después sigue lo que más se le reconoce: su obra poética. Si la juzgamos y entendemos desde estos cuatro aspectos tendremos la visión de una mujer realizada, porque si no la vemos en perspectiva total, como ha pasado con algunos críticos, veremos una mujer frustrada, y no fue así.
— ¿En qué momento se da el reconocimiento a la obra de Sor Juana?
— A Sor Juana se le permitió escribir y publicar, que ya era bastante. En vida publicó dos volúmenes en España y cinco años después de muerta apareció otro del que se hicieron 20 ediciones, éxito que ni Cervantes, ni Calderón, ni Lope de Vega tuvieron tan cercano a sus muertes. En el Siglo XVII terminó el barroco e inició el Siglo de las Luces que privilegiaba las cosas escritas para la sociedad, y durante ese tiempo quedó olvidada. En los siglos XVIII y XIX se publicaron algunos poemas.
El primero que retoma a Sor Juana fue Amado Nervo, que publicó un libro muy agradable, pero con un error garrafal: le cambió el nombre. Nervo escribió Juana de Asbaje y su apellido era Asvaje, que se pronuncia como u.
En los años 50 se publica por primera vez su obra total y después de eso la gente empezó a interesarse. Después llega Octavio Paz con su libro Trampas de la fe, y entonces hay una polarización porque empieza a ser estudiada con una mentalidad liberal de personas del siglo XIX, es ahí cuando se hace la historia de la Sor Juana sufrida y abnegada.
Sale el billete de 20 pesos y ahora el de 200, pero le ponen el nombre erróneo de Juana de Asbaje porque no podía tener el nombre de una monja, además eliminan de la imagen los libros que la acompañaban. Es una maravilla que esté ahí, porque es una mujer importante, pero creo que no la hemos reconocido ni representado correctamente.
— Como investigador y escritor ¿de qué piensa que está más necesitado nuestro país?
— La investigación está demasiado influida por la visión norteamericana de hacer patentes que den dinero y ese tipo de investigación no resolverá los problemas de México. La investigación es para comprendernos y apoyarnos. La literatura tampoco nos va a salvar. En México nos hemos puesto la corona antes de desarrollar a la sociedad y no requerimos más literatos, sino personas trabajadoras y esforzadas que nos permitan alcanzar de nuevo esa corona y merecerla.
— ¿De qué manera considera que ha evolucionado la apreciación artística en México?
— México nombró como arte nacional a la pintura y tuvimos esfuerzos muy tempranos depositados en ella, ahora pocos países cuentan con un Orozco, un Siqueiros, un Rivera o un Soriano, pero se descuidaron otras artes. Ha habido pocos grandes músicos, y no creo que falte la creatividad musical, falta el apoyo; el teatro no se apoyó porque se temió que fuera un motivo ideológico de cambio; en la literatura se apoyó a algunos escritores no tan valiosos, porque su obra se vendía, por la peligrosa idea de las industrias culturales de que si algo no se vende, no es bueno. Nuestro país está cojo en el arte.
— ¿Qué paradigma es más correcto: la cultura va de las clases altas a las bajas, o viceversa?
— Es muy factible que la gente que estudia tenga erudición, pero la identidad viene de abajo hacia arriba y del pasado al presente.
— ¿Qué le gustaría que entendiera la juventud?
— Que no hay logro sin esfuerzo.
Asociación de ideas:
Sor Juana… Pensamiento
Literatura… Logro
Teatro… Verdad
Juventud… Esfuerzo
Debate… Tolerancia
Mar Adentro… Visión
VOLUNTADES
Historias de éxito que trascienden
A puño y letra
Ensalzada por algunos y criticada por otros, la polémica Simone de Beauvoir siempre será referente de la lucha por la liberación femenina y del vínculo de ésta con la literatura.
Nació en la burguesía francesa y después de estudiar filosofía en la Sorbona se convirtió en ícono de las corrientes existencialista y feminista. Cuando tenía 21 años, en 1929, conoció al también filósofo Jean Paul Sartre con quien se le vincularía emocionalmente por el resto de su vida.
Además de enseñar filosofía en Francia, Ruan y Marsella, Simone de Beauvoir dedicó su obra a explorar los dilemas de la libertad, la responsabilidad individual y la creación cultural del rol femenino, manteniendo siempre una visión crítica frente al entorno y su condición de mujer.
A la par de sus novelas, Simone escribió cuatro obras autobiográficas que retratan su propia búsqueda de libertad y el cuestionamiento a los roles de género impuestos en su época. Su libro más famoso a este respecto se titula El segundo sexo y fue publicado en 1949, en él realiza una revisión histórica de la dominación masculina, abordando a la mujer desde el punto de vista biológico, histórico, psicológico y antropológico, lo que la convierte en referente obligado para la corriente feminista del Siglo XX.
10 NOTAS POSITIVAS
1. Por primera vez, Somalia integra a una mujer en su gabinete presidencial.
2. Se anuncia el Primer Congreso Internacional de Transparencia a celebrarse durante la FIL.
3. La UNESCO otorga medalla al INAH en nuestro país.
4. De acuerdo con la Encuesta Nacional de las Adicciones, disminuyó el consumo de cigarro entre los mexicanos.
5. Se inaugura el Museo Maya de Cancún.
6. Los artistas mexicanos Andrea Arroyo y Felipe Galindo exponen su obra en Nueva York.
7. El escritor mexicano Juan Villoro gana el premio iberoamericano “José Donoso 2012”.
8. Selma Ancira, traductora mexicana, gana premio Tomás Segovia.
9. Se designa al mexicano Alejandro Mariano Werner, economista en jefe para el Hemisferio Occidental del FMI.
10. Organizaciones de la Sociedad Civil participan en el foro “Los desafíos del desarrollo urbano en Jalisco”.
Mar Adentro Propone
Para leer…
Bahiyyih Nakhjavani, escritora britano-iraní, rememora en su libro La mujer que leía demasiado, la vida de la poetisa también iraní Tahirih Qurratu’l-Ayn, primera mujer en su país en proclamar la dignidad femenina.
Para saber…
El Convento de San Jerónimo alberga hoy la Universidad del Claustro de Sor Juana.
Para conocer…
Asiste el 28 de noviembre a la entrega del Premio Sor Juana Inés de la Cruz en la FIL, y conoce otras mujeres que se han entregado a la palabra.