Jalisco
Municipios omitieron prevención para tratar a policías despedidos: experto
Certificación policial es nuevo para las autoridades y por ello faltan acciones para los daños colaterales, señala
GUADALAJARA, JALISCO (29/ENE/2013).- Aunque los municipios no están obligados a dar indemnización a los elementos despedidos que no aprobaron la certificación de policía, pues se trata de una expulsión justificada, omitieron prevenir qué iban a hacer con dichos desempleados y las consecuencias de esto, explica el especialista en Derecho de la Universidad Panamericana, Gerardo de la Cruz.
"Están siendo despedidos con causa justificada y si acaso, alguno de ellos se inconforma, tendrá que ser mediante un juicio de amparo porque la Ley no prevé ningún recurso ordinario, y aun cuando la resolución de amparo sea favorable, en ningún supuesto va a ser reintegrado a su labor".
Según el marco normativo, lo que se puede lograr en estos casos, a través de un juicio de amparo, es una indemnización de tres meses de salario, además de 20 días por cada año de trabajo y las partes proporcionales de vacaciones y aguinaldo, señala Gerardo de la Cruz.
Las pruebas de certificación policial son algo nuevo para las autoridades y por esa misma razón, se omitieron detalles para los daños colaterales que implica despedir a los funcionarios que no aprueben.
Estos proyectos deben manejarse como un programa integral en el que, de acuerdo a las aptitudes y debilidades, se dé seguimiento a las personas despedidas -sin incluir a quienes están relacionadas con la delincuencia organizada- y se prevenga la falta de elementos policiacos en la ciudad por las suspensiones, refiere el especialista.
Se debe incluir apoyo de capacitación profesional en otras actividades y oficios para quienes resulten desempleados, pues sus competencias para la supervivencia van encaminadas a fungir como policías, además del riesgo que implica que estén sin ocupación ex funcionarios que saben manejar armas y conocen los códigos del sistema de seguridad.
Respecto a la tendencia de que elementos policiacos se integren a las filas de la delincuencia, luego de despedidos, Gerardo de la Cruz opina que no es un fenómeno obligado para todos los casos y tampoco obedece a la falta de empleo, pues esas inclinaciones se tienen en cualquier situación y desde un ámbito muy personal.
Para evitar que las colonias de la ciudad resientan inseguridad por falta de policías, el experto recomienda que la visión de estos ejercicios debe ser con miras a darle la misma prioridad a la contratación de nuevos elementos que la dada al despido y así lograr estabilidad, aunque esto incluya ejercer mayor presupuesto.
EL INFORMADOR / ALEJANDRA PEDROZA
"Están siendo despedidos con causa justificada y si acaso, alguno de ellos se inconforma, tendrá que ser mediante un juicio de amparo porque la Ley no prevé ningún recurso ordinario, y aun cuando la resolución de amparo sea favorable, en ningún supuesto va a ser reintegrado a su labor".
Según el marco normativo, lo que se puede lograr en estos casos, a través de un juicio de amparo, es una indemnización de tres meses de salario, además de 20 días por cada año de trabajo y las partes proporcionales de vacaciones y aguinaldo, señala Gerardo de la Cruz.
Las pruebas de certificación policial son algo nuevo para las autoridades y por esa misma razón, se omitieron detalles para los daños colaterales que implica despedir a los funcionarios que no aprueben.
Estos proyectos deben manejarse como un programa integral en el que, de acuerdo a las aptitudes y debilidades, se dé seguimiento a las personas despedidas -sin incluir a quienes están relacionadas con la delincuencia organizada- y se prevenga la falta de elementos policiacos en la ciudad por las suspensiones, refiere el especialista.
Se debe incluir apoyo de capacitación profesional en otras actividades y oficios para quienes resulten desempleados, pues sus competencias para la supervivencia van encaminadas a fungir como policías, además del riesgo que implica que estén sin ocupación ex funcionarios que saben manejar armas y conocen los códigos del sistema de seguridad.
Respecto a la tendencia de que elementos policiacos se integren a las filas de la delincuencia, luego de despedidos, Gerardo de la Cruz opina que no es un fenómeno obligado para todos los casos y tampoco obedece a la falta de empleo, pues esas inclinaciones se tienen en cualquier situación y desde un ámbito muy personal.
Para evitar que las colonias de la ciudad resientan inseguridad por falta de policías, el experto recomienda que la visión de estos ejercicios debe ser con miras a darle la misma prioridad a la contratación de nuevos elementos que la dada al despido y así lograr estabilidad, aunque esto incluya ejercer mayor presupuesto.
EL INFORMADOR / ALEJANDRA PEDROZA