México
Propuesta para mejorar la legislación sobre trata de personas
La senadora priista María del Socorro García ha indicado que las personas en condiciones vulnerables suelen ser en mayor medida las víctimas de este delito
CIUDAD DE MÉXICO (29/ DIC/ 2010).- La senadora del PRI, María del Socorro García propuso mejorar la legislación en materia de tráfico y trata de personas a fin incluir dentro de las agravantes de estos delitos, el de personas en situación de vulnerabilidad y aumentar sanciones.
Explicó que las personas en situación de vulnerabilidad, se refiere a quienes por su origen étnico, género, edad, discapacidades, condición social, calidad o condición migratoria, o por cualquier otra circunstancia, se encuentren en desventaja física y psicológica que les impida resistir la conducta de su agresor.
García Quiroz indicó que esta propuesta ya se encuentra en comisiones del Senado de la República, que tendrá que evaluar las modificaciones al Código Penal Federal, la Ley para Prevenir y Sancionar la Trata de Personas, la Ley Federal Contra la Delincuencia Organizada, entre otras.
La priista expuso que uno de los puntos medulares de la propuesta, se encuentra en la reforma y adición al artículo 5 y 6 de la Ley para Prevenir y Sancionar la Trata de Personas, que amplía los alcances de este delito.
Detalló que se tipifica la prostitución, pornografía, corrupción, lenocinio, mendicidad, matrimonio y adopción, que actualmente no están incluidos en la consideración del fin de la trata de personas.
Igualmente las penas por este delito pasarían de una pena mínima de seis años y una máxima de 12 años de prisión, a una de ocho a quince años, respectivamente, por este ilícito.
En este sentido, recalcó que debe existir una legislación adecuada para sancionar los delitos aún cuando las víctimas ya tienen la mayoría de edad, pero fueron obligadas desde niñas o adolescentes.
Dijo que de esa forma se podrán erradicar los vacíos legales que aprovechan los delincuentes.
'La explotación sexual de las que son objeto las víctimas, es uno de los delitos de mayor afectación psicoemocional que atentan en contra de la vida y la dignidad humana", subrayó.
Destacó que en mucho de los casos este tipo de delitos son un negocio sumamente lucrativo, con escasos riesgos para sus organizadores y las víctimas de estos delitos suelen ser en mayor medida las personas en situación de vulnerabilidad.
Explicó que las personas en situación de vulnerabilidad, se refiere a quienes por su origen étnico, género, edad, discapacidades, condición social, calidad o condición migratoria, o por cualquier otra circunstancia, se encuentren en desventaja física y psicológica que les impida resistir la conducta de su agresor.
García Quiroz indicó que esta propuesta ya se encuentra en comisiones del Senado de la República, que tendrá que evaluar las modificaciones al Código Penal Federal, la Ley para Prevenir y Sancionar la Trata de Personas, la Ley Federal Contra la Delincuencia Organizada, entre otras.
La priista expuso que uno de los puntos medulares de la propuesta, se encuentra en la reforma y adición al artículo 5 y 6 de la Ley para Prevenir y Sancionar la Trata de Personas, que amplía los alcances de este delito.
Detalló que se tipifica la prostitución, pornografía, corrupción, lenocinio, mendicidad, matrimonio y adopción, que actualmente no están incluidos en la consideración del fin de la trata de personas.
Igualmente las penas por este delito pasarían de una pena mínima de seis años y una máxima de 12 años de prisión, a una de ocho a quince años, respectivamente, por este ilícito.
En este sentido, recalcó que debe existir una legislación adecuada para sancionar los delitos aún cuando las víctimas ya tienen la mayoría de edad, pero fueron obligadas desde niñas o adolescentes.
Dijo que de esa forma se podrán erradicar los vacíos legales que aprovechan los delincuentes.
'La explotación sexual de las que son objeto las víctimas, es uno de los delitos de mayor afectación psicoemocional que atentan en contra de la vida y la dignidad humana", subrayó.
Destacó que en mucho de los casos este tipo de delitos son un negocio sumamente lucrativo, con escasos riesgos para sus organizadores y las víctimas de estos delitos suelen ser en mayor medida las personas en situación de vulnerabilidad.