Éste es un día de fiesta. Iniciamos un año de promesas, más allá de las tradicionales vacaciones; da principio el reinicio de compromisos entre autoridades y población cuyo centro de decisión se ubica en Guadalajara.
Porvenir
En los 125 municipios de Jalisco protestan cumplir y hacer cumplir las autoridades electas, y con ello resurge la confianza de mejorar condiciones de vida. Los reclamos precedentes, aún los recientes, ya no tienen valor y deben olvidarse dando paso a un año de retos, pero también de oportunidades.
La preocupación por la seguridad tendrá respuesta en la ocupación productiva de toda la población, si en cada uno florece la semilla de la comprensión hacia el equilibrio de fortalezas y debilidades, con la prudencia imprescindible de hacer para merecer.
Los gobernantes, seguramente dotados de los mejores propósitos de coordinación en los tres niveles, cumplirán con eficacia su tarea, si priva la armonía sin propósitos de ambición electoral respecto a 2012 antes de satisfacer su función, para unos inicia este día.
La población, con residencia urbana en su mayoría, enfrenta las recientes elevaciones de impuestos y precios acordados. Tales decisiones motivarán la exigencia de fortalecer el tejido social con obras de infraestructura y servicios con calidad y dimensión satisfactoria.
2010 tiene el atributo conmemorativo y, por eso mismo, ofrece la oportunidad de convertirlo en el reencuentro de postulados maduros y seguros hacia la democracia. La violencia pasó a las páginas de la historia; ahora tenemos en la comunicación herramientas inteligentes para el tendido de líneas de comprensión, antes que la dispersión de esfuerzos.
Las instituciones están para respaldar los valores acumulados en el pasado, y las autoridades para ejercer acciones promotoras de paz y tranquilidad. Pero se requiere confianza en la población y creatividad en los gobernantes. Talento para la superación en los marginados del sistema y fuerza para el cumplimiento estricto de las leyes, actuales y futuras.
Guadalajara es un paradigma de México y ahora el eje de Zona Metropolitana. Los gobernantes solos no podrán sin el respaldo de los gobernados, pero se requiere confianza ganada con austeridad, transparencia y acrisolada honestidad. Es tiempo de confiar y apoyar, aunque concediendo la benéfica duda.
Escuchemos y vayamos al llamado de las palabras, seguramente bien intencionado, sin escatimar recursos también para exigir correspondencia a cuanto aportemos individualmente a la superación de los obstáculos que no serán más que las posibilidades de superación con unidad.
La población joven ha madurado con celeridad al impulso de ciencia, técnica y comunicación, en tanto que la madura tiene la capacidad insustituible de la experiencia. La fusión comprensiva de conocimiento y sabiduría está para moldear la vida de cada uno con el aprovechamiento de recursos encauzados con creatividad por las autoridades.
Economía y seguridad en todos los órdenes reclaman comprensión en los niveles de Gobierno promotor, empresa creativa y sociedad comprensiva y laboriosa, para alentar el desarrollo de un porvenir próspero y pacífico. Ni falsas expectativas ni desmayo en el esfuerzo.
Dios nos guarde de la discordia.
CARLOS CORTÉS VÁZQUEZ / Consultor en comunicación.
Correo electrónico sicpm@informador.com.mx
Porvenir
En los 125 municipios de Jalisco protestan cumplir y hacer cumplir las autoridades electas, y con ello resurge la confianza de mejorar condiciones de vida. Los reclamos precedentes, aún los recientes, ya no tienen valor y deben olvidarse dando paso a un año de retos, pero también de oportunidades.
La preocupación por la seguridad tendrá respuesta en la ocupación productiva de toda la población, si en cada uno florece la semilla de la comprensión hacia el equilibrio de fortalezas y debilidades, con la prudencia imprescindible de hacer para merecer.
Los gobernantes, seguramente dotados de los mejores propósitos de coordinación en los tres niveles, cumplirán con eficacia su tarea, si priva la armonía sin propósitos de ambición electoral respecto a 2012 antes de satisfacer su función, para unos inicia este día.
La población, con residencia urbana en su mayoría, enfrenta las recientes elevaciones de impuestos y precios acordados. Tales decisiones motivarán la exigencia de fortalecer el tejido social con obras de infraestructura y servicios con calidad y dimensión satisfactoria.
2010 tiene el atributo conmemorativo y, por eso mismo, ofrece la oportunidad de convertirlo en el reencuentro de postulados maduros y seguros hacia la democracia. La violencia pasó a las páginas de la historia; ahora tenemos en la comunicación herramientas inteligentes para el tendido de líneas de comprensión, antes que la dispersión de esfuerzos.
Las instituciones están para respaldar los valores acumulados en el pasado, y las autoridades para ejercer acciones promotoras de paz y tranquilidad. Pero se requiere confianza en la población y creatividad en los gobernantes. Talento para la superación en los marginados del sistema y fuerza para el cumplimiento estricto de las leyes, actuales y futuras.
Guadalajara es un paradigma de México y ahora el eje de Zona Metropolitana. Los gobernantes solos no podrán sin el respaldo de los gobernados, pero se requiere confianza ganada con austeridad, transparencia y acrisolada honestidad. Es tiempo de confiar y apoyar, aunque concediendo la benéfica duda.
Escuchemos y vayamos al llamado de las palabras, seguramente bien intencionado, sin escatimar recursos también para exigir correspondencia a cuanto aportemos individualmente a la superación de los obstáculos que no serán más que las posibilidades de superación con unidad.
La población joven ha madurado con celeridad al impulso de ciencia, técnica y comunicación, en tanto que la madura tiene la capacidad insustituible de la experiencia. La fusión comprensiva de conocimiento y sabiduría está para moldear la vida de cada uno con el aprovechamiento de recursos encauzados con creatividad por las autoridades.
Economía y seguridad en todos los órdenes reclaman comprensión en los niveles de Gobierno promotor, empresa creativa y sociedad comprensiva y laboriosa, para alentar el desarrollo de un porvenir próspero y pacífico. Ni falsas expectativas ni desmayo en el esfuerzo.
Dios nos guarde de la discordia.
CARLOS CORTÉS VÁZQUEZ / Consultor en comunicación.
Correo electrónico sicpm@informador.com.mx