Tecnología
UNAM desarrollará maíz resistente a carcinógenos
La unidad de investigación de semillas labora en el mejoramiento genético de ese cereal para hacerlo resistente a la contaminación por hongos Aspergillus flavus y A. parasiticus
CIUDAD DE MÉXICO.- Especialistas de la UNAM trabajan en el desarrollo de maíz resistente a la invasión de aflatoxinas, sustancias carcinógenas que frecuentemente se encuentran en el grano que a diario consumen millones de mexicanos.
El jefe del Departamento de la Unidad de Investigación en Granos y Semillas de la Facultad de Estudios Superiores Cuautitlán, Ernesto Moreno Martínez, labora en el mejoramiento genético de ese cereal para hacerlo resistente a la contaminación por hongos Aspergillus flavus y A. parasiticus.
En un comunicado, explicó que ambos organismos crecen en el grano de maíz en su proceso de formación y producen las aflatoxinas, consideradas las sustancias naturales más carcinógenas que se conocen.
El consumo constante, en pequeñas cantidades, es acumulativo y propicia el desarrollo de tumores; pero si se ingiere una sola vez, en dosis altas, puede producir intoxicaciones.
Existen otros productos en los que proliferan las aflatoxinas, como la copra, semilla del algodonero y el cacahuate, pero el maíz es el más afectado, señaló.
El hongo Aspergillus flavus puede producirlas en el campo, en la cosecha o posterior a ella; en ese ambiente el control es complicado porque no se pueden modificar las condiciones para evitar la proliferación, detalló.
El proyecto "Mejoramiento genético del maíz para evitar su contaminación con aflatoxinas" , subsidiado desde 2003 por el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología, surgió porque se supo que el Aspergillus flavus invade al grano y produce esas sustancias debido a que la planta entra en estrés y se debilita por la falta de humedad.
El equipo, integrado por especialistas del Instituto Nacional de Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias; de la Universidad Autónoma de Querétaro (UAQ) y de la UNAM, concluyó que para controlar la situación la planta debe ser vigorosa y resistente en ese proceso de desarrollo.
El jefe del Departamento de la Unidad de Investigación en Granos y Semillas de la Facultad de Estudios Superiores Cuautitlán, Ernesto Moreno Martínez, labora en el mejoramiento genético de ese cereal para hacerlo resistente a la contaminación por hongos Aspergillus flavus y A. parasiticus.
En un comunicado, explicó que ambos organismos crecen en el grano de maíz en su proceso de formación y producen las aflatoxinas, consideradas las sustancias naturales más carcinógenas que se conocen.
El consumo constante, en pequeñas cantidades, es acumulativo y propicia el desarrollo de tumores; pero si se ingiere una sola vez, en dosis altas, puede producir intoxicaciones.
Existen otros productos en los que proliferan las aflatoxinas, como la copra, semilla del algodonero y el cacahuate, pero el maíz es el más afectado, señaló.
El hongo Aspergillus flavus puede producirlas en el campo, en la cosecha o posterior a ella; en ese ambiente el control es complicado porque no se pueden modificar las condiciones para evitar la proliferación, detalló.
El proyecto "Mejoramiento genético del maíz para evitar su contaminación con aflatoxinas" , subsidiado desde 2003 por el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología, surgió porque se supo que el Aspergillus flavus invade al grano y produce esas sustancias debido a que la planta entra en estrés y se debilita por la falta de humedad.
El equipo, integrado por especialistas del Instituto Nacional de Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias; de la Universidad Autónoma de Querétaro (UAQ) y de la UNAM, concluyó que para controlar la situación la planta debe ser vigorosa y resistente en ese proceso de desarrollo.