Futbol sin balón

• Nadie en el futbol mexicano se salvará de afectaciones por la suspensión de actividades con motivo de la pandemia del coronavirus; pero quizá uno de los gremios que la pasará peor que otros es el de los árbitros.

• Empecemos por señalar que toda la actividad deportiva en el sector profesional y amateur está suspendida, por lo tanto, ningún árbitro en México recibirá honorarios durante las próximas semanas hasta que la Secretaría de Salud disponga que se abran las unidades deportivas, los centros de entrenamiento, las ligas amateurs y los torneos profesionales.

• Los árbitros que dirigen partidos en los llanos y ligas amateurs serán los más afectados, pues prescindirán de esos ingresos durante tiempo indefinido.

• Los árbitros profesionales verán disminuidos sus ingresos en mayor o menor medida según la categoría a que pertenezcan.

• Por ejemplo, los silbantes de Segunda y Tercera División profesional, no reciben sueldo fijo, su único ingreso es por partido dirigido.

Tampoco tienen salario base los árbitros de Liga Premier, torneos Sub-20, Sub-17, Sub-15 y Liga Femenil.

• Los menos perjudicados serán los silbantes de Primera División y Liga de Ascenso, pues son los únicos con salario fijo por parte de la Federación Mexicana de Futbol, sin embargo, la cuota mensual es un paliativo nada más, no alcanza para mantener una familia.

Los silbantes de Ascenso MX reciben un ingreso mensual de ocho mil pesos, en tanto que los de Liga MX tienen cuotas diferentes: los árbitros internacionales categoría A reciben 30 mil pesos mensuales, los de categoría B tienen salario de 25 mil pesos y los que no tienen gafete FIFA perciben 20 mil pesos al mes.

• Lo que hace fuerte económicamente a los silbantes profesionales son las designaciones semanales, ya que en Primera División ganan 42 mil pesos por partido dirigido, los asistentes reciben 22 mil pesos por juego y nueve mil pesos el cuarto árbitro; pero ante la suspensión de torneos se privarán de estos ingresos.

Los que también la pasan mal son los árbitros del VAR ya que no tienen sueldo fijo y ganan sólo por partido: 14 mil pesos el Asistente del VAR y siete mil el Avar.

• Lo peor para el gremio arbitral es que muchos silbantes viven al día y todos tienen compromisos adquiridos por cubrir como, celulares, Internet, dispositivos electrónicos, rentas, pagos de autos, casas y los gastos propios de la familia.

Por bien de los árbitros y del futbol mexicano el paro de la actividad por la pandemia no debe prolongarse por mucho tiempo.