El regreso de Édgar Zaldívar al primer equipo del Atlas representa mucho más que una reincorporación deportiva. Es la culminación de un largo proceso de resiliencia, fe y fortaleza emocional tras una de las lesiones más duras que puede enfrentar un futbolista profesional. A poco más de un año del infortunio que marcó su carrera, el mediocampista rojinegro volvió a entrenar con el plantel principal y ya se encuentra a disposición de Diego Cocca de cara al Clausura 2026.La lesión ocurrió en noviembre de 2024, durante el Play In del Apertura 2024 frente a Chivas. En una acción defensiva, Zaldívar intentó cortar un centro y, al evitar el contacto con Camilo Vargas, sufrió una hiperextensión de rodilla que derivó en una grave lesión. Aquella jugada lo alejó de las canchas por más de un año, en un proceso de recuperación largo y exigente tanto en lo físico como en lo mental."Sin duda alguna ha sido el momento más difícil de mi vida y de mi carrera, algo que ningún jugador quisiera vivir", compartió Zaldívar, al recordar una etapa marcada por el dolor, la incertidumbre y el desgaste emocional. Durante ese periodo, el mediocampista encontró en la fe, su familia y el respaldo del club los pilares necesarios para no rendirse. El acompañamiento de su esposa, hijos, padres y del entorno rojinegro fue clave para sobrellevar cada fase de la rehabilitación."Conforme va pasando el tiempo te vas sintiendo mejor. Agradezco a Dios la oportunidad de tener una revancha, de poder recuperarme. Volver a sentirme jugador es una satisfacción muy grande", expresó el futbolista, quien hoy vuelve a vestirse de corto con la ilusión intacta.Bicampeón con Atlas, Zaldívar destacó el orgullo de haber atravesado este proceso dentro de la institución que lo formó, resaltando la cercanía y el respaldo constante que recibió. Para el mediocampista, esta experiencia quedará marcada como una lección profunda que lo invita a valorar cada entrenamiento, cada partido y cada minuto dentro de la cancha en la Liga MX.Ahora, "Gary" inicia una nueva etapa con La Furia, integrado de lleno a la pretemporada y con el objetivo de seguir escribiendo su historia con los Zorros. Entre sus motivaciones inmediatas está alcanzar una cifra especial: llegar a los 200 partidos oficiales con la camiseta del Atlas, un logro que simbolizaría su entrega y amor por el club.*Mantente al día con las noticias, únete a nuestro canal de WhatsAppOF