Tomar bicarbonato de sodio en ayunas es una práctica común que muchas personas realizan con la intención de aliviar malestares digestivos o “desintoxicar” el organismo. Aunque se trata de un producto de uso doméstico y fácil acceso, su consumo habitual o sin supervisión médica puede tener efectos tanto positivos como negativos, dependiendo de la cantidad, la frecuencia y el estado de salud de cada persona.El bicarbonato de sodio es una sustancia alcalina que ayuda a neutralizar los ácidos. Por esta razón, algunas personas lo toman en ayunas disuelto en agua para aliviar síntomas como acidez estomacal, indigestión o sensación de ardor. Al reducir temporalmente la acidez del estómago, puede generar una sensación rápida de alivio.También existe la creencia de que consumirlo por la mañana ayuda a “equilibrar el pH del cuerpo” o a mejorar la digestión durante el día. Sin embargo, el organismo regula su pH de manera natural, por lo que estos efectos no están científicamente comprobados en personas sanas.En casos específicos y de forma ocasional, el bicarbonato puede ayudar a:Estos efectos suelen ser momentáneos y no sustituyen un tratamiento médico cuando los síntomas son frecuentes o intensos.El consumo regular de bicarbonato en ayunas puede provocar consecuencias no deseadas. Entre los principales riesgos se encuentran:Además, no es recomendable para personas con hipertensión, insuficiencia renal, problemas cardíacos o aquellas que siguen dietas bajas en sodio.El uso diario de bicarbonato en ayunas no se considera seguro sin la orientación de un profesional de la salud. Aunque puede aliviar síntomas ocasionales, su consumo frecuente puede enmascarar problemas digestivos más serios, como gastritis o reflujo crónico, que requieren un diagnóstico y tratamiento adecuados.Antes de incorporar el bicarbonato de sodio como parte de una rutina diaria, es importante:Tomar bicarbonato en ayunas puede ofrecer alivio temporal en ciertos casos, pero su uso indiscriminado o prolongado puede generar efectos negativos en la salud. BB