Cultura
'El abogánster': la semilla de la corrupción
Eugenio Aguirre presenta su novela sobre Bernabé Jurado, el personaje real que inspiró leyendas siniestras de la abogacía mexicana
GUADALAJARA, JALISCO (17/MAR/2014).- México también tiene sus villanos. Algunos como Hernán Cortés, Santa Ana o Porfirio Díaz son bien recordados pese al transcurso de los años, y otros como Carlos Salinas de Gortari y el “Chapo” Guzmán parecen más vigentes que nunca. Pero hace falta poner el dedo sobre el renglón en casos menos publicitados, ni tan viejos ni tan nuevos, como el del fallecido abogado Bernabé Jurado: un personaje rapaz y corrupto “hasta el exceso” que pertenece al lado oscuro de la primera generación del México moderno.
El escritor, Eugenio Aguirre, retoma la historia de este hombre a quien describe como “una síntesis de la corrupción” que ha privado en el sistema de impartición de justicia en el país durante muchas décadas. Su nueva novela, editada por Planeta, lleva por título uno de los infames apodos que en vida recibió el susodicho: “El abogánster”.
“Bernabé era un hombre muy carismático, atractivo, alguien que abusó de los medios para promover sus escándalos, un individuo que pudo mezclarse con las altas esferas de la sociedad, con la fauna de peluche, y con las esferas más bajas, con la fauna de barro, andando de un extremo a otro”, comenta el autor.
Esta excéntrica personalidad le sirvió al autor para describir la composición social de México a lo largo de varias décadas, desde la época del Maximato de Plutarco Díaz Calles hasta la Presidencia de José López Portillo.
Jurado fue un criminalista destacado por su habilidad para ganar juicios corrompiendo a los testigos y a los peritos; por conseguir la exoneración del escritor estadounidense William S. Burroughs, quien de un balazo mató a su mujer en la Ciudad de México; por orquestar la llamada “fuga del siglo” al sustraer en helicóptero a un preso de la penitenciaría Santa Martha Acatitla, y por ser el presunto asesino de Mercedes Cassola.
“Se casó 18 veces por la Iglesia y por el civil. Tenía amigos curas y jueces corruptos del registro civil. Inventó ‘el divorcio al vapor’. Decía una de sus esposas que Bernabé podía casarse en 50 minutos y divorciarse en 48”.
“Lo interesante es que toda esta corrupción que es patente en la figura de Bernabé Jurado sigue vigente (...) nada se resuelve, los jueces otorgan amparos como si fueran empanadas o tlacoyos”, comenta el autor.
Las similitudes entre las barbaridades cometidas por Jurado y las que suceden en la actualidad, francamente asustan. “Si una mujer violada va y presenta una denuncia, normalmente acaba siendo la culpable por coscolina y pizpireta. La violencia intrafamiliar no se ha resuelto: Bernabé era un golpeador de mujeres”.
Aguirre dedica esta novela a los habitantes de la Ciudad de México, su lugar natal, pues considera que merecen un homenaje simplemente por el hecho de vivir en un sitio tan difícil y a la vez fascinante.
Sobre el proceso de creación de “El abogánster”, una novela de inspiración histórica, comenta que el producto se vuelve un ser vivo que a partir de la investigación que hace el autor, nunca deja de crecer: “La gente te platica cosas, te empieza a dar información. De hecho la investigación nunca se acaba (…) sino que se va nutriendo con los comentarios y remembranzas de los lectores”.
PERFIL
Un cuentista que trasciende
Eugenio Aguirre nació en la Ciudad de México en 1944, y es novelista, cuentista y ensayista. Entre sus múltiples obras destacan “El rumor que llegó del mar”, “Los niños de colores”, “Lotería del deseo”, “Pasos de sangre” (Premio de Literatura José Fuentes Mares en 1986) e “Hidalgo”.
Varias de sus obras han sido traducidas al francés, portugués, inglés y alemán, para ser difundidas por todo el mundo.
El escritor, Eugenio Aguirre, retoma la historia de este hombre a quien describe como “una síntesis de la corrupción” que ha privado en el sistema de impartición de justicia en el país durante muchas décadas. Su nueva novela, editada por Planeta, lleva por título uno de los infames apodos que en vida recibió el susodicho: “El abogánster”.
“Bernabé era un hombre muy carismático, atractivo, alguien que abusó de los medios para promover sus escándalos, un individuo que pudo mezclarse con las altas esferas de la sociedad, con la fauna de peluche, y con las esferas más bajas, con la fauna de barro, andando de un extremo a otro”, comenta el autor.
Esta excéntrica personalidad le sirvió al autor para describir la composición social de México a lo largo de varias décadas, desde la época del Maximato de Plutarco Díaz Calles hasta la Presidencia de José López Portillo.
Jurado fue un criminalista destacado por su habilidad para ganar juicios corrompiendo a los testigos y a los peritos; por conseguir la exoneración del escritor estadounidense William S. Burroughs, quien de un balazo mató a su mujer en la Ciudad de México; por orquestar la llamada “fuga del siglo” al sustraer en helicóptero a un preso de la penitenciaría Santa Martha Acatitla, y por ser el presunto asesino de Mercedes Cassola.
“Se casó 18 veces por la Iglesia y por el civil. Tenía amigos curas y jueces corruptos del registro civil. Inventó ‘el divorcio al vapor’. Decía una de sus esposas que Bernabé podía casarse en 50 minutos y divorciarse en 48”.
“Lo interesante es que toda esta corrupción que es patente en la figura de Bernabé Jurado sigue vigente (...) nada se resuelve, los jueces otorgan amparos como si fueran empanadas o tlacoyos”, comenta el autor.
Las similitudes entre las barbaridades cometidas por Jurado y las que suceden en la actualidad, francamente asustan. “Si una mujer violada va y presenta una denuncia, normalmente acaba siendo la culpable por coscolina y pizpireta. La violencia intrafamiliar no se ha resuelto: Bernabé era un golpeador de mujeres”.
Aguirre dedica esta novela a los habitantes de la Ciudad de México, su lugar natal, pues considera que merecen un homenaje simplemente por el hecho de vivir en un sitio tan difícil y a la vez fascinante.
Sobre el proceso de creación de “El abogánster”, una novela de inspiración histórica, comenta que el producto se vuelve un ser vivo que a partir de la investigación que hace el autor, nunca deja de crecer: “La gente te platica cosas, te empieza a dar información. De hecho la investigación nunca se acaba (…) sino que se va nutriendo con los comentarios y remembranzas de los lectores”.
PERFIL
Un cuentista que trasciende
Eugenio Aguirre nació en la Ciudad de México en 1944, y es novelista, cuentista y ensayista. Entre sus múltiples obras destacan “El rumor que llegó del mar”, “Los niños de colores”, “Lotería del deseo”, “Pasos de sangre” (Premio de Literatura José Fuentes Mares en 1986) e “Hidalgo”.
Varias de sus obras han sido traducidas al francés, portugués, inglés y alemán, para ser difundidas por todo el mundo.